"MEDICINA DEL DEPORTE"
Amigo lector de Noroeste, ¿qué le duele a usted?, podemos aparentar, y decir que no o que sí, pero sólo usted sabe lo que siente, ya que es muy difícil medir las incomodidades y el dolor.
Cuando un individuo se queja, es que algo le molesta, esta molestia puede ser real o somatizada, lo que estará afectando la calidad de vida, no sólo la del paciente sino también en terceras personas (familiares, amigos, etc.), el dolor es una sensación desagradable de causa multifactorial.
En la actualidad, con el desarrollo de la tecnología y el sedentarismo ha sido factor importante en la aparición de dolores en el cuerpo, tanto por postura, movimientos repetitivos, etc., la higiene en quehacer diario deja mucho qué desear, lo que trae sus consecuencias e incomodidades en la persona.
La postura afecta tanto a personas "sanas" como "enfermas". Dentro de las alteraciones en personas "sanas" vemos las contracturas musculares, manifestadas por dolor e incapacidad en el sitio de la contractura (lumbalgia, torticolis, etc.), estas alteraciones pueden ser causa de lesiones y alteraciones reales como es la compresión y atrapamiento de nervios (nervio ciático, atrapamiento acromioclavicular, etc.). Al existir una lesión real, el manejo se debe de realizar previo diagnóstico de certeza ya que "toda sintomatología tiene su causa, y mientras la causa persista, la sintomatología será la misma".
En personas "enfermas" también es importante que dentro del protocolo de tratamiento de ciertas patologías se tome en cuenta la postura, por ejemplo, si se vive con osteoporosis, vive con mayor riesgo de lesionarse por movimientos que implican girar, levantar, cargar o flexionarse. Pero ser cuidadoso no significa que deje de ser activo.
Puede tomar medidas para aumentar la seguridad y protegerse de fracturas y caídas. Aprender a sentarse, pararse y desplazarse usando una buena postura y la mecánica del cuerpo hace más fácil funcionar en la rutina de la vida diaria. Una mala postura aumenta la carga sobre los músculos y huesos, produce fatiga y lo hace más propenso a lesiones.
Los hábitos arraigados de mala postura pueden complicar un trastorno como la osteoporosis. Durante el día, incluyendo cuando practica ejercicio, trate de mantener una buena postura, asegurándose que se está moviendo con seguridad, puede llevar a cabo muchas de las tareas que está dispuesto a hacer.
En personas "sanas", pero que mantienen una postura forzada, como el hablar, leer o chatear por teléfono en una mala postura va a provocar dolor de la musculatura que se está forzando en mantener la mala posición (postura), que en un principio puede mejorar al dejar de hacerlo, pero si esta postura se hace crónica, va a iniciar con sintomatología de menos a más hasta provocar lesión por postura, que cuando se es nuevo (menos de 30 años), puede curarse, pero de la tercera década en adelante las lesiones por postura son más difíciles de tratar o sólo tienen manejo de control, y cuando estas alteraciones por postura se vuelven crónicas, en forma secundaria se pueden presentar alteraciones emocionales, y con éstas se agregan otras alteraciones de origen emocional.
Bien, también desde esta columna le invitamos a seguir cuidándose del coronavirus, está prohibido bajar la guardia, haga caso, siga las medidas que el Sector Salud recomienda.