Sevilla y Barcelona repartieron puntos en el Sánchez-Pizjuán
SEVILLA._ Sevilla y Barcelona empataron 1-1 en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán por el partido postergado de la cuarta fecha de LaLiga.
En un primer tiempo parejo, que se disputó con un ritmo lento y en el que las áreas no tuvieron mucha actividad, los goles llegaron mediante el recurso de la pelota parada.
El local abrió el marcador a los 32 minutos, cuando Iván Rakitic sorprendió con el envío de un tiro de esquina por bajo para que Alejandro Gómez definiera cruzado y de primera, con mucha sutileza. Una brillante jugada preparada que el croata y el argentino ejecutaron a la perfección.
La victoria parcial era demasiado premio para el conjunto andaluz y, justo antes del descanso, la visita encontraría la igualdad; un resultado mucho más acorde al desarrollo del juego. También llegó luego de un córner, en este caso producto de una conexión entre Ousmane Dembélé y Ronald Araújo, quien se elevó para rematar con un gran golpe de cabeza.
El complemento fue más favorable al el club blaugrana, especialmente luego de la insólita expulsión de Jules Koundé. El francés reaccionó infantilmente ante un leve roce con Jordi Alba y, a menos de un metro de distancia, lanzó la pelota contra el hombro del lateral izquierdo.
Los dirigidos por Xavi Hernández aprovecharon la superioridad numérica para acentuar su dominio y por momentos acorralaron a su rival, que terminó pidiendo la hora, aunque volvieron a sufrir la falta de contundencia. La situación más clara la tuvo Dembélé, el jugador más desequilibrante del encuentro, cuyo zurdazo de afuera del área rebotó en el palo.
El punto no le sirve demasiado a a ninguno de los dos. El elenco de Julen Lopetegui quedó a cinco de Real Madrid, mientras que el club culé no pudo entrar en los puestos de clasificación a competiciones internacionales (se ubica séptimo, a una unidad de Real Sociedad y Atlético Madrid).