"Julio Urías se lleva el triunfo y Dodgers avanza a la SCLN"
ARLINGTON._ La semana pasada, barrieron a los Cerveceros de Milwaukee. Esta semana, barrieron a los Padres de San Diego. Ese mejor récord en el beisbol esta temporada no fue casualidad, ya que los Dodgers de Los Ángeles continúan con lo que creen que es una marcha metódica hacia un campeonato de la Serie Mundial.
Dieron otro paso necesario el jueves por la noche al vencer a los Padres, que no tenían suficiente personal, 12-3, y se llevaron la Serie Divisional de la Liga Nacional en el Globe Life Field en Arlington.
Su quinta Serie de Campeonato de la Liga Nacional en los últimos seis años comienza el lunes contra Bravos de Atlanta.
Los Dodgers recordaron a los Padres en tres victorias que pueden jugar pelota larga y pelota pequeña y pasar el testigo, mientras explotan los enfrentamientos. Con los Padres forzados a un juego de bullpen por necesidad, los Dodgers conectaron 14 hits, cinco de Will Smith, sin ni siquiera un jonrón en un estadio amigable para los lanzadores.
Defienden de manera confiable y, en momentos cruciales, de manera deslumbrante. Corren las bases sin miedo para forzar errores de fildeo. Son inteligentes, versátiles y excepcionalmente profundos, equilibrados con juventud y experiencia. El cuerpo de lanzadores está equipado con brazos de poder aparentemente interminables, una ventaja inconmensurable. Y cuando ganan por nueve carreras, la angustia del bullpen se pospone para otro día.
Aunque su estrategia de usar a Dustin May y su sinker que rompió Internet como abridor de un juego de bullpen, para explotar su dominio sobre Fernando Tatis Jr. y Manny Machado, se desvió un poco después de su cameo sin anotaciones en una entrada, casi todo lo demás que hicieron los Dodgers funcionó de manera eficiente a raíz de su épico thriller del Juego 2.
En el montículo, Julio Urías volvió a ganar en relevo, ya que lo fue en el Juego 1 de la Serie Wild Card. Esa vez, siguió a Walker Buehler con tres entradas en blanco. Esta vez, lanzó cinco entradas, retirando a los primeros 10 bateadores que enfrentó mientras permitía un hit, terminando con seis ponches y rechazando la única carrera que permitió.
Nada de las malas palabras, los lanzamientos de equipos y los besos que soplaron en el juego del miércoles por la noche se traspasaron al Juego 3, y todo el drama se desvaneció con la tercera entrada de cinco carreras y 25 minutos de los Dodgers.
Fue provocado por un error en un intento espectacular del campocorto Tatis, un sencillo productor que le dio a Justin Turner el récord de franquicia de hits de postemporada (64), e incluso un hit de dos carreras del bateador designado Joc Pederson, cuya última temporada antes de ser agente libre ha sido un fracaso y el mes pasado incluyó el tiempo perdido debido a una emergencia médica familiar.
(Con información de MLB)
