Carlos Correa estampa su firma con Mellizos de Minnesota
Menos de una semana después de darse a conocer que Carlos Correa había aceptado firmar por tres temporadas con los Mellizos de Minnesota, este martes por fin se pudo hacer oficial el pacto.
El campocorto puertorriqueño, que era uno de los agentes libres más cotizados en el mercado, estampó su firma para ser parte de los Mellizos por los siguientes tres años, aunque puede optar por salirse de su contrato al finalizar cada una de las primeras dos temporadas.
Correa firmó por 105.3 millones de dólares con el que será apenas su segundo equipo en las Grandes Ligas, ya que anteriormente solamente había jugado para los Astros de Houston.
Correa no rindió a su nivel se siempre durante la temporada acortada de 2020, pero tuvo una gran postemporada y luego llevó eso a su año de contrato. Llegó a su segundo equipo del All-Star en 2021 y bateó .279/.366/.485 (131 OPS+) con 26 jonrones, 34 dobles, 92 remolcadas y 104 carreras anotadas.
También brilló a la defensiva, ocupando el sexto lugar entre los paracortos de la MLB en la métrica de Outs Above Average de Statcast (plus-12). Entre su excelencia con el bate y el guante, Correa generó 7.2 WAR como jugador de posición, según Baseball-Reference, superando a Marcus Semien y Juan Soto por el liderazgo de la MLB.
Este tipo de producción no es nada nuevo para Correa. Desde el inicio de su primera temporada completa en 2016, ocupa el primer lugar entre los paradores en corto en bWAR (29,3) y el quinto entre todos los jugadores de posición, sólo por detrás de Mookie Betts, Mike Trout, Nolan Arenado y José Ramírez.
El mayor problema de Correa han sido las lesiones. Grande para un campocorto, con 1.90 metros y 220 libras, ha tenido que lidiar con una rotura del ligamento del pulgar, una costilla fracturada y múltiples molestias en la espalda. Correa se perdió 192 de los 486 partidos de los Astros (39.5%) entre 2017 y 19, aunque jugó en 148 partidos en 2021.
A pesar de esos contratiempos, Correa se ha puesto en una rara compañía hasta este punto. Sus 133 cuadrangulares de carrera hasta su temporada de 26 años lo ubican en el quinto lugar de todos los tiempos entre los shortstops de la LA/LN, y su línea de bateo de .277/.356/.481 se traduce en un OPS+ de 127 que lo ubica en el séptimo lugar de ese grupo (entre aquellos con más de 2,000 apariciones en el plato). También ha sido un incondicional de la postemporada, con sus 18 cuadrangulares empatando en el séptimo lugar de la lista de carreras y sus 59 carreras impulsadas en el sexto lugar.
