Ve CESP necesario retomar la cotidianidad en Sinaloa; exige garantías mínimas de seguridad
Después de 20 días de encierro de la ciudadanía ante una ola de violencia que se registra principalmente en el centro de Sinaloa es necesario comenzar a retornar a la cotidianidad para recuperar espacios, pero con garantías mínimas de seguridad, apuntó el titular de la coordinación general del Consejo de Seguridad Pública de Sinaloa, Miguel Calderón Quevedo.
Calderón Quevedo externó que como sociedad inmersa en la ola de violencia se deben de crear estrategias y medidas organizadas para poder recuperar actividades de ámbitos educativos y comerciales.
Dentro de estas estrategias expuso un taller sobre qué hacer en caso de una balacera, impartido por la asociación civil Parques Alegres la semana pasada, y en el cual participaron de manera virtual más de 900 personas.
“La solución no está solamente en las instituciones gubernamentales, no está solamente en la mano dura o en el poder duro del gobierno, en la parte militar o en la parte policiaca, también en la parte de la ciudadanía, en la parte civil, en el sector educativo, pero ocupamos garantías mínimas, y esas garantías mínimas desde el primer día las estamos exigiendo desde la Coordinación, hoy seguimos exigiendo garantías mínimas”, dijo.
Por otra parte, explicó que la crisis de seguridad que enfrenta Sinaloa es posible debido al fortalecimiento de los grupos criminales, que se han nutrido mediante muchas condiciones entre las que se encuentra el arraigo a la narcocultura en lo local.
“Lamentablemente no es un tema nuevo, es un tema que ya se dio en 2008, que ya se dio en 2017, que ya hemos tenido brotes y hemos venido luchando desde sociedad civil en un llamado frente a las entidades gubernamentales y el resto de los vecinos y vecinas de la ciudad y del estado de que vivimos rodeados de un contexto de violencia, de una cultura de la violencia, que estalla de tiempo en tiempo”, lamentó.
Desde el pasado 9 de septiembre en Sinaloa se han registrado jornadas violentas consecutivas que ya suman más de 100 personas asesinadas y más de 100 personas desaparecidas.
Los hechos registrados, de acuerdo a la autoridad estatal y federal, corresponden a una pugna entre dos grupos delictivos dedicados al tráfico de drogas.
