Tarámaris están en el olvido, dice Graciela Domínguez, y pide explicación del uso del recurso etiquetado para grupos indígenas
En memoria del político y activista Román Rubio López y por los grupos indígenas, en especial los Tarámaris del norte de Sinaloa, la legisladora de Morena, Graciela Domínguez Nava, pidió en nombre del grupo parlamentario que se esclarezca el destino del recurso etiquetado para cuestiones de alimentación, salud, educación y más, que no se ven reflejados, señalando que están en el olvido de los gobiernos.
“No solo padecen hambre, desnutridos, con anemia, leucemia y problemas gástricos, los Tarámaris, permanecen olvidados”, destacó.
La legisladora por Morena señaló que el Colectivo Tarahumara Sinaloense, encabezado por Rubio López y Hortensia López Gaxiola, es testigo que este grupo étnico se encuentra aislado en extrema pobreza y en condiciones poco dignas, sin acceso a servicios básicos.
Domínguez Nava expuso que se etiquetó recurso para apoyar a este grupo indígena, sin embargo, el Gobierno del Estado no ha dado respuesta de dónde está ese apoyo.
Mientras que, criticó la legisladora, el Ejecutivo ha permitido gastos que consideró como inútiles, caprichosos y frívolos, pero los 11 millones de pesos etiquetados en 2019, misma cantidad para 2020 y 6 millones 243 mil pesos en 2021 no han sido aplicados.
“En los altos de los municipios de Sinaloa y Choix, donde entre dos mil 500 y cinco mil personas llamadas a sí mismas Tarámaris habitan en grupos, algunos en cuevas, otros en chozas de adobe, una y otra fecha solo representan un día más, al continuar invisibles para los gobiernos, inexistentes como etnia y discriminados en el sentido más amplio, sin derecho a nada, más que a morir de hambre”, refirió.
La Diputada reconoció el trabajo del colectivo Tarahumara Sinaloense, detallando entre sus labores de activismos dos colectas de alimentos con donativos ciudadanos, así como la organización para dar apoyo a las familias que van requiriendo atención médica. También se han preocupado por capacitarlos para realizar artesanías; sin embargo, aclaró, el esfuerzo de este colectivo no es suficiente, se requiere de una política pública de atención a los Tarámaris.
“Los Tarámaris están ahí, algunos en Cuitaboca, otros más en Cañada Verde, Jakapori y El Cochi; pero no existen, carecen de credencial de elector y por lo tanto no aparecen siquiera en el padrón electoral. Se estima que hay entre 2 mil 500 a 5 mil indígenas Tarámaris, pero la cifra real se desconoce debido a las veredas intransitables que dificultan el acceso a sus localidades dispersas, a las que el Inegi y el INE nunca han llegado”, abundó.
Recursos
La atención a este grupo vulnerable es apremiante, manifestó, destacando que el hambre aumenta y aún con más de 6 millones de pesos etiquetados exclusivamente para atención prioritaria y urgente para esta población indígena en el 2021 y a 4 meses de cerrar el año, no se esté cumpliendo con ese mandato legal, argumentando que esto muestra a una autoridad insensible y carente del compromiso humanitario que la situación demanda, refiriéndose a la administración de Quirino Ordaz Coppel.
“Es por ello que públicamente hacemos un llamado para que el Gobierno del Estado de inmediato proceda a cumplir con la aplicación de dichos recursos etiquetados. Así mismo, le solicitamos a la comisión de Asuntos Indígenas y a la comisión de Hacienda Pública y Administración de este Congreso del Estado, su intervención para que se vigile el cumplimiento de esta disposición legal por parte de la autoridad estatal”, pidió.