"Responsabilidad de Noroeste frente a la violencia"

"Cobertura y publicación responsable de la información relacionada con inseguridad y delincuencia organizada"

La situación inédita que se vive en el País, en el estado y la región en cuanto a la escalada de violencia, obliga a reforzar la responsabilidad de nuestras publicaciones.

Día a día, en nuestras decisiones editoriales nos enfrentamos a nuevos y difíciles dilemas.

En Noroeste lo tenemos claro: la violencia existe, tenemos que decirlo, la autocensura no es la decisión acertada para una publicación responsable, no se puede evadir la responsabilidad periodística, pero ésta tampoco puede ser un escudo para publicar irresponsablemente información que haga apología de la violencia o fomente la ilegalidad.

Por este motivo, en Noroeste establecemos la siguiente:

DECLARACIÓN DE CRITERIOS:

  1. Noroeste publicará siempre todos los hechos de violencia de los que tenga conocimiento, cumpliendo su compromiso de informar la realidad a la sociedad a la que sirve. La sección destinada para ello se denomina “Seguridad y Justicia”, acorde con la premisa de desarrollar la cultura de legalidad entre los ciudadanos y de justicia penal en las autoridades.
  2. Publicamos en portada los hechos relacionados con violencia cuando éstos abonan en la construcción del estado de derecho, por ejemplo: detenciones y decomisos relevantes; así como en la defensa de los grupos vulnerables, tales como violencia de género, abuso de menores y víctimas inocentes.
  3. Publicamos en portada dichos hechos con un enfoque de prevención y alerta a la ciudadanía.
  4. No publicamos en Portada hechos violentos que consideramos que forman parte del discurso de intimidación y terrorismo de grupos de crimen organizado, tales como mensajes en mantas o en grabaciones donde se transmiten enfrentamientos armados, asesinatos, actos de tortura, entre otros; excepto cuando éstos trascienden a otras esferas de la comunidad, como la política y la civil.
  5. Reporteamos y publicamos la información con los más altos estándares de ética periodística.
  6. No publicamos rumores, hipótesis o información no confirmada, ni señalamos responsables sin tener certeza.
  7. Cuidamos de manera rigurosa los títulos y encabezados de las notas, evitando que sean amarillistas o sensacionalistas. Nos remitimos a los hechos.
  8. Somos especialmente cuidadosos y rigurosos con la selección de fotografías, cuidando que las imágenes no sean ofensivas para el lector al ser esencialmente violentas o aquellas donde la sangre es la protagonista principal.
  9. No publicamos domicilios de víctimas, victimarios o cualquier otra persona relacionada.
  10. No publicamos nombres ni direcciones de hospitales a donde fueran trasladadas las víctimas de un hecho violento.
  11. No hacemos descripciones que hagan apología de la violencia.
  12. No publicamos el lenguaje de los grupos delictivos ni transcribimos textos de sus mensajes.
  13. No publicamos fotografías ni nombres de menores acusados de delito.
  14. No difundimos rostros de elementos policiacos, militares o de rescate presentes en los hechos de alto impacto.
  15. Buscamos siempre ser sensibles con las víctimas, sin revictimizarlas ni estigmatizarlas. Las tratamos con dignidad y respeto.
  16. Redactamos la información de modo que sea ecuánime, precisa y contundente, evitando adjetivos y juicios de valor. Buscamos siempre ser neutrales y reflejarlo, por lo que en las notas no damos nuestra opinión ni publicamos hipótesis, acusaciones o señalamientos que atenten contra la dignidad de alguna persona.
  17. En las notas sólo incluimos temas y detalles de interés público, no aquéllos que invadan la intimidad de una persona, salvo las excepciones cuando esto sea de interés de la ciudadanía.
  18. No utilizamos calificativos o descripciones que pueden afectar a familias y que no favorecen la conciencia social o comunitaria sobre hechos violentos.
  19. Ponemos en perspectiva el impacto que tendrá en la comunidad la cobertura y el tono en qué se publicará un hecho de alto impacto.
 

A LOS LECTORES

La violencia en nuestra comunidad, nuestro estado, nuestro país ha crecido y su reflejo en nuestras páginas es inevitable. Dejar de decirlo sólo evita la comprensión de su significado y de su alcance.

Por eso nuestro compromiso de publicación es el fomento absoluto a la cultura de la legalidad, a los valores y a la prevención.