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Espacios

Mercado Humaya entre el olvido y el menosprecio; locatarios señalan poco apoyo al sector

Locatarios señalan la necesidad de atención a la infraestructura del complejo y escucha a sus demandas

A más de 35 años de la apertura del Mercado Humaya, locatarios señalan un menosprecio a las deficiencias estructurales del complejo y aquejan ser objeto de quienes aspiran hacerse de un cargo político.

José Eduardo López, dirigente de locatarios, explica que el recinto que los refugia alberga también problemas estructurales en el techo que se trasmina cada vez que llueve, el piso corroído y la estética descolorida de las paredes.

A pesar de haber pedido ayuda a las autoridades, no han sido atendidos y han convivido con esos problemas, afirma, desde hace varios años.

Sin embargo, recuerda, hubo quién sí intentó hacer un cambio, pero, aunque no le conste, las acciones no se concretaron por diferencias políticas.

La iniciativa de los locatarios de arreglar por su cuenta el lugar se ha visto frenada por los altos costos en pintura, impermeabilizante ya que, aun con todo eso, también tienen que pagar hielo, agua, luz y renta, sin mencionar la poca venta que se ha presentado desde los últimos tres años.

“Después de que pasan las elecciones y todo eso pasamos a la historia, como quien dice, es lo que ha sucedido no hemos recibido el apoyo como debe de ser”, dijo.

“Por ejemplo el piso del mercado, el techo que cuando llueve se trasmina ya y así como eso, pintura y todo eso, desgraciadamente no podemos. Nosotros lo sostenemos de acuerdo a la posibilidad de cada uno de nosotros pero es muy difícil”.

El dirigente resalta que a pesar de las promesas incumplidas han tenido la suerte de seguir en pie, no como los mercados Barrancos y Cañadas que fueron descontinuados por ser insustentables económicamente.

El respaldo de los más de 60 locales que comparten el espacio, dice, se lo atribuyen a los clientes que frecuentan y consumen sus productos.

“Nos hemos sostenido porque pues la gente de aquí es muy noble, vienen todos los días, los conocemos a la mayoría, ya somos como quien dice amigos porque vienen y nos consumen a diario o de acuerdo a sus posibilidades pues”.