Familias preparan el Panteón Civil en Culiacán para el Día de Muertos
CULIACÁN._ El Panteón Civil en Culiacán empieza a recibir visitantes que preparan las lápidas de los seres queridos que conmemorarán en el próximo Día de Muertos, celebrado el jueves 2 de noviembre.
A cinco días de la gran tradición mexicana, familias acudieron al cementerio ubicado sobre el bulevar General Gabriel Leyva Solano para limpiar, pintar o rehabilitar las tumbas, donde yacen los cuerpos de sus difuntos.
Con escoba en mano, Víctor Manuel Amador limpiaba la tierra que ocultaba el color blanco de la lápida de su padre, mientras un pariente replicaba el quehacer en el sepulcro a su derecha, que también pertenece al legado familiar.
Manuel explicó que su familia se dividió en dos fases para reacondicionar ambas tumbas; ellos se encargaban de limpiar, y otros renovarán la pintura en el transcurso de la próxima semana.
“Nos pusimos de acuerdo para venir a limpiar con tiempo, avanzar, van a venir otros familiares y ya nos repartimos la tarea, unos van a hacer una cosa, otros van a hacer otra cosa, vinimos a lavar todo lo que se pueda, y la siguiente fase, para el lunes o martes vienen a la pintura y todo eso”, detalló.
María Esther Nuñez, reposaba en el bastón que sostenía con su mano derecha mientras su nieta removía las flores viejas del jardín que adorna la tumba de su madre.
Cada año, María visita a su progenitora, así como a su suegra y hermana, el día 2 de noviembre.
“Vengo el 2 un ratito y luego nos vamos, porque no puedo estar mucho tiempo parada”, dijo mientras alzaba su bastón.
“Nomás venimos a estar un ratito a estar aquí con ellos y yo rezo tantito”.
La celebración tradicional deja gran afluencia en los panteones de la ciudad, por lo que algunas personas asisten días antes a las fechas con mayor aglomeración: 1 y 2 de noviembre.
Una mujer de edad avanzaba lucía un bello vestido rojo, decorado con flores de color beige, recorría el pasillo principal del parque funerario del brazo de su enfermera, Erika Melendrez.
La tarde del sábado 28 de octubre, María Socorro López visitó la lápida de sus padres, para tener una convivencia amena y evitar conglomeraciones.
“El día de muertos está muy lleno, y como la señora ya está grande, no podemos andar para todos lados”, comentó la enfermera de María, vistiendo un uniforme médico de color azul.
Cada año, la mujer acude al Panteón Civil días antes de la fiesta mexicana, principalmente, por cuestiones de salud, pues sufre de problemas de rodilla que le dificulta caminar.
“Siempre que pueda, como cada año, aquí andaré, aunque sea cayéndome, porque apenas puedo”, manifestó María Socorro.
Día de Muertos: tradicional celebración mexicana
Al iniciar el mes de noviembre, los mexicanos adornan las calles de la República, así como sus panteones, de color naranja y morado para conmemorar a sus seres queridos que han fallecido.
Las fotografías de aquellos que han pasado a mejor vida lucen en la cima de altares decorados con ofrendas, como pan de muerto, calaveritas, velas, además de sus alimentos y objetos favoritos en vida.
De acuerdo a la Secretaría de Relaciones Exteriores, el Día de Muertos, en la cosmovisión indígena, implica el retorno transitorio de las almas de los difuntos, quienes regresan al mundo de los vivos para convivir con sus familiares.
Abunda la creencia de que los tributos colocados en los altares serán tomados por los espíritus durante su retorno a casa, para nutrirse de la esencia del alimento.