"El Tambor, la playa donde todos los problemas se olvidan"
Miles de culiacanenses salieron el miércoles de sus casas a las playas que ofrece Sinaloa para ellos, muchos visitaron El Tambor, la tradicional playa navolatense que los hace olvidar todos sus problemas y pasar una Semana Santa en familia.
Mónica Domínguez Avilés tiene 51 años de edad, de los cuales, 47 sin falta ha venido a la playa de El Tambor. Primero lo hacía con sus padres y primos, ahora ella trae a sus hijos, buscándoles inculcar la tradición de visitar la playa del municipio de Navolato.
“Nos gusta que dejamos todo lo que hay que hacer allá, no barremos, no trapeamos, nos olvidamos de todo, y especialmente traemos a los niños para que se diviertan, vinieron cuatro niños”, comparte.
“Yo para eso los traigo, para que vean lo que yo hacía cuando estaba niña, que ellos sientan y disfruten lo mismo que yo disfruté cuando estaba chiquita... les fascina, es una cosa muy bonita, traemos lo que podemos”.
Mónica es de Culiacán, para ella salir de vacaciones no es algo imposible ni algo que sea tan caro; conversa que tiene desde el lunes en El Tambor, y prevé quedarse ahí con su familia hasta el domingo, día en que acaba la Semana Santa.
“No es caro, al contrario, es muy barato, porque no vas a comprar carne, lo único que trae uno es huevo, sopa Maruchan y pan Bimbo, frijolitos puercos, lonjas, salchichas. Para venirme yo una semana me gasté como mil 500 (pesos), y 500 de gasolina, y me divierto a gusto, saco a la familia; si me voy a Mazatlán, ¿cuánto me voy a gastar?” , cuestiona.
Ella sin falta pasa tiempo con su familia en El Tambor, y pide a la gente que no tiene pensado salir de sus casas, que hagan el esfuerzo para salirse de su cotidianidad y vayan a la playa.
“Que vengan, que conozcan, que no se vaya a otra parte, que vengan a conocer lo suyo, Sinaloa es muy bonito, más El Tambor, una cosa muy bonita; nos ayudan aquí, pasa Protección Civil en la noche, nos pregunta si algo nos falta, está muy bien, pasan fumigando también en las noches”, menciona.
Por su parte María, quien viene El Tamarindo, explica que ella llegó este miércoles a la playa navolatense, y plantea estar hasta el sábado. Ella al igual que Mónica, dice que se gastan aproximadamente mil 500 pesos en estos días de vacaciones.
“Queremos quedarnos hasta el sábado, tenemos tres años viniendo para acá... se la pasa uno a gusto, para divertirse, bañarse, traer a los niños a pasear, nosotros somos dos familias y al rato llegan otros hermanos”, señala.
“Mínimo gasta uno mil 500, aparte mi hermano también hace gasto, fueron mil 500 que gastamos para traer comida y eso”, detalla.