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Homicidio

Caso del bailarín Maximiliano Corrales sigue esperando por justicia

Desde que fue encontrado sin vida a las orillas del río Culiacán, el gremio artístico no ha dejado de pronunciarse para que se esclarezca el caso del joven bailarín

CULIACÁN._ Ha pasado más de una semana desde que fue encontrado sin vida el bailarín de 27 años, Maximiliano “Rinkalu” Corrales García, a las orillas del río Culiacán, y sigue sin haber nada claro acerca de su desaparición y posterior hallazgo.

Como primer pronunciamiento póstumo hubo un homenaje el 22 de abril en el Teatro Pablo de Villavicencio en el que compañeros de danza de Maximiliano lo recordaron.

En el evento, el director del Instituto Sinaloense de la Cultura, Juan Salvador Avilés Ochoa, expresó solidaridad con la familia de “Max” en la búsqueda de justicia en su caso.

Posteriormente, en el inicio del Festival de Danza José Limón, el 23 de abril, también hubo palabras de unión a la lucha por esclarecer el caso; en aquella ocasión fue Ruby Gámez, ganador del Premio Nacional de Danza José Limón 2020, quien se expresó al respecto.

“Hoy me manifiesto a favor de vivir una vida digna, al derecho de pensar libremente, de vivir sin miedo, ser felices... pero desgraciadamente no es así, vivimos en una sociedad que rápidamente se está volviendo en su propio verdugo, en su propio asesino... Termino este discurso exigiendo verdad, justicia y castigo”, expresó entonces Ruby Gámez.

Durante el mismo festival hubo más mensajes de apoyo y condena hacia la muerte de Maximiliano y sus posibles responsables, tal fue el caso del grupo Flores Teatro-Danza, de Tamaulipas, que mostró una pancarta dedicada al fallecido bailarín.

Además, diversas instituciones culturales a lo largo y ancho del País han dedicado eventos a la memoria del joven bailarín, como el Centro Cultural de Tijuana con su Muestra Internacional de Danza; la Dirección General de Cultura de Coyoacán en el Palacio Cortés o el minuto de aplausos que le ofrecieron en el Teatro Ángela Peralta de Mazatlán.

En la conferencia semanal llamada “La Semanera”, del 24 de abril, el Gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, declaró que “Max” no murió ahogado, sino que su cuerpo fue arrojado al río; luego subrayó que no tenían algún adelanto por parte de la Fiscalía. No obstante, el Secretario General de Gobernación, Enrique Inzunza Cázarez, precisó que había indicios de que se trató de un homicidio.

Hasta el momento no ha habido esclarecimiento alguno por parte de la Fiscalía General del Estado ni de su titular, Sara Bruna Quiñonez Estrada, acerca de este acontecimiento; sin embargo, las versiones de forenses indicaron que la causa de muerte fue un traumatismo craneoencefálico severo.