Banquetas dañadas, cruces peligrosos y falta de árboles, los retos de los peatones en Culiacán
En Culiacán los peatones enfrentan diversos retos y obstáculos para desplazarse, indicó la organización que estudia la movilidad en Sinaloa, Mapasin.
En el marco del Día Internacional del Peatón, Mapasin lanzó un artículo sobre las dificultades de los peatones en la capital sinaloense y las posibles soluciones a los mismos.
Los retos que deben enfrentar los peatones son la falta de banquetas, la falta de sombra, los cruces peatonales y la falta de iluminación en ciertos sectores. Todos estos factores vulneran la seguridad de los peatones, determinó la organización.
“Iniciaremos comentando que no todas las calles de la ciudad tienen banquetas, lo cual es un gran riesgo para las personas ya que no existe un área segura para desplazarse caminando, resaltando que para las personas que cuentan con alguna discapacidad esto resulta aún más grave”, señaló la organización.
“En caso de que existan banquetas en las calles, podemos encontrar que la mayor parte de ellas no cumplen con los requerimientos básicos para hacer uso de ellas. Son muy estrechas, la superficie está en mal estado, tienen desniveles, están obstruidas por postes, autos”.
En este caso, Mapasin señala que debe de implementarse un programa de construcción y reparación de banquetas, tal como se hace para los baches en los carriles vehiculares pero para el beneficio de las y los peatones.
Otra deficiencia detectada fue la falta de arborización en Culiacán, pues para un clima como el del municipio donde gran parte del día y del año se registran temperaturas altas es de vital importancia darle a las y los peatones la comodidad de desplazarse bajo la sombra.
“Un programa de arborización de banquetas existentes podría ser de gran utilidad, así mismo debería ser de preocupación de las y los vecinos de las calles que actualmente se están pavimentando el que se coloquen espacios adecuados para sembrar nuevos árboles y así sus calles y banquetas sean más agradables en todos los sentidos”, propone Mapasin.
“Sabemos que faltan muchas cosas por hacer, pero para tener la ciudad que queremos debemos exigir cada día espacios más dignos para caminar, una ciudad que camina es una ciudad saludable”.