Desde 2016 hemos expuesto lo que ocurre en los rastros de México, mostrando imágenes de al menos 22 de ellos, pero en julio de este año sacamos a la luz una investigación con la más extensa evidencia sobre lo que sufren animales en 34 rastros en 13 estados de México: Jalisco, Puebla, Hidalgo, Zacatecas, Nuevo León, Colima, Chiapas, Nayarit, San Luis Potosí, Aguascalientes, Tabasco, Oaxaca y Estado de México.
En total contraste con todo lo que se concibe como bienestar animal, los videos documentados por nuestro equipo de investigaciones de Igualdad Animal México muestran los graves incumplimientos a la Norma Oficial Mexicana, que determina métodos para aturdir y matar a los animales evitando sufrimiento innecesario.
Las imágenes nos muestran cómo los trabajadores dan patadas, golpes, para después matarlos cuando aún están conscientes, es decir cuando todavía pueden darse cuenta de que están siendo colgados y desangrados, algo que por supuesto, no debería ocurrir.
Estas condiciones de crueldad e ilegalidad, créanme que no son una excepción de esta investigación, en otras de nuestras investigaciones quedan expuestas, concluyendo que es la realidad que lamentablemente ocurre en cualquiera de los casi mil rastros que existen en el País. Una realidad que no solo debe ser mostrada para que la sociedad conozca que la ganadería industrial ha diseñado las más crueles prácticas en contra de los animales, sino también denunciada para que sea castigada.
Las investigaciones son la herramienta más poderosa que tenemos para lograrlo, no solo son la mejor prueba para denunciar la crueldad animal que se vive en los rastros, también comprueban con cada una de las fotos y videos obtenidos lo que la ciencia ha dicho por años: los animales que se crían y matan para producir carne y otros productos sufren, experimentan dolor, miedo y estrés durante la matanza: son seres sintientes.
Es por eso que, derivado de esta investigación, presentamos denuncias ante las autoridades correspondientes a nivel federal y en cada estado. Denunciamos un total de 28 rastros en Jalisco, Oaxaca, Hidalgo, Estado de México, Puebla y Chiapas, por el incumplimiento de la regulación de la matanza, pues ésta provoca sufrimiento grave a los animales.
A nivel federal, se denunciaron a todos los rastros ante la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica). Aunque las denuncias podrían suponer la culminación de todo nuestro trabajo que busca castigar la crueldad contra los animales, no es así, lo que sigue es monitorear la actividad de las autoridades para saber la resolución a las denuncias presentadas, además de seguir consultando a aquellas que no dan respuesta, para asegurar que den trámite a las denuncias.
En este caso particular, Cofepris recibió la denuncia y la envió a las áreas pertinentes para tomar acciones. Senasica, por su parte, respondió que las autoridades estatales son las competentes para vigilar la protección animal.
Las autoridades estatales de Jalisco y Oaxaca recibieron las denuncias y dieron trámite, además de mandarlas a las áreas correspondientes para iniciar investigaciones en los rastros denunciados, así como vigilar que no se cometan de nuevo las faltas denunciadas. Las autoridades de Hidalgo y Estado de México avisaron a otras autoridades para que realizaran sus propios actos de inspección y vigilancia para sancionar. Las autoridades de Puebla y Chiapas alegaron que no pueden hacer nada al respecto, a pesar de que dentro de las pruebas se adjuntó la respuesta de Senasica en la que se estipula que sí es su deber atender las denuncias presentadas.
Ante estas respuestas, seguiremos manteniendo la comunicación con dichas autoridades para vigilar que den seguimiento e inspeccionen los rastros denunciados, y asegurar el cumplimiento de la norma dentro de sus territorios.
Desde Igualdad Animal sabemos que denunciar es el principio del camino, habrá que trabajar para que se aplique la ley y se cumplan las condenas y así lograr cambiar la vida de los animales más maltratados del planeta: los animales en granjas. Pero sobre todo, seguiremos informando a las personas para que conozcan la verdad sobre la ganadería industrial y puedan tomar decisiones que dañen lo menos posible a los animales.
Si existe una forma de alimentarnos sin usar a los animales, sin participar de todo aquello que los daña, ¿por qué no hacerlo?