Avanzan hacia el Senado Inzunza y Valdés
Lastres de Paloma y aplausos para Estrada

OBSERVATORIO
    En las fórmulas de Movimiento Regeneración Nacional y aliados, y la del Verde que en lo local decidió ir sin alianza en la estrategia para que la llamada Cuarta Transformación se lleve los tres escaños disponibles en Sinaloa, son donde más se nota la talacha y se siente que el proselitismo va como la gacela en la llanura, al menos más ágil en cuestión de optimismo que en las postulaciones de Estrada Ferreiro y Yolanda de la Cruz, por el Partido del Trabajo, y Paloma Sánchez y Eduardo Ortiz, por el bloque Fuerza y Corazón por México.

    Hay dos campañas en Sinaloa con miras a llegar al Senado, la de Imelda Castro Castro y Enrique Inzunza Cázarez por la coalición Seguimos Haciendo Historia, y la que presenta el Partido Verde Ecologista de México con Jesús Valdés Palazuelos en mancuerna con Nubia Ramos Carbajal, que están penetrando en el nivel de conocimiento que la gente adquiere sobre los candidatos y probablemente también en la construcción de intención del voto. En los dos casos se pone a prueba la eficacia de la adulterada frase zapatista que dice que el voto es de quien lo trabaja.

    En las fórmulas de Movimiento Regeneración Nacional y aliados, y la del Verde que en lo local decidió ir sin alianza en la estrategia para que la llamada Cuarta Transformación se lleve los tres escaños disponibles en Sinaloa, son donde más se nota la talacha y se siente que el proselitismo va como la gacela en la llanura, al menos más ágil en cuestión de optimismo que en las postulaciones de Estrada Ferreiro y Yolanda de la Cruz, por el Partido del Trabajo, y Paloma Sánchez y Eduardo Ortiz, por el bloque Fuerza y Corazón por México.

    En lo general, evaluadas por el proselitismo hecho a ras del suelo, la estrategia de Inzunza Cázarez se nota despresurizada, holgada, aun cuando Imelda Castro lo acompaña nada más los fines de semana porque sigue desempeñando el cargo de Senadora. Visto con la lente meramente política, sorprende la transfiguración del adusto ex Presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado y Secretario General de Gobierno con licencia, a alegre y cortés buscador de votos.

    Aunque cualquiera andaría con la sonrisa de oreja a oreja cuando las encuestas de febrero le dan importante ventaja a Claudia Sheinbaum, candidata de Morena a la Presidencia (Consulta Mitofsky la pone 23 puntos adelante, Parametría 20 puntos, De las Heras-Demoscopía 52 puntos), frente a la opositora Xóchitl Gálvez, de cualquier manera Inzunza y Castro no deben echarse a dormir sobre los laureles, principalmente la Senadora, que debe revalorar la solicitud de licencia, pues a pesar que no hay ley que le impida ser candidata y legisladora al mismo tiempo, tal dualidad podría generarle mala imagen en los electores.

    En lo que corresponde a la candidatura de Jesús Valdés por el PVEM, en Sinaloa parece funcionar la jugada de Morena que crea su propia oposición haciendo uso de los partidos aliados. El ex dirigente estatal del PRI posee el nada desestimable capital político que le queda de intensos recorridos que realizó por todos los rincones de la tierra de los once ríos, creyendo que sería el abanderado priista en la elección de Gobernador de 2021, pero el líder nacional del tricolor, Alejandro Moreno Cárdenas, se le atravesó con la postulación de Mario Zamora Gastélum.

    Esa cualidad que la gente le ve a Chuy Valdés, de habérsele rebelado al partido que mayor rechazo registra entre los votantes, le acarrea simpatías que lo podrían colocar en el segundo lugar del resultado comicial del 2 de junio, llevándolo al Senado. Todos los aspirantes a la Cámara alta saben que el ex Alcalde de Culiacán puede pasarse 24 horas en labores de campaña y aguanta aunque luego la salud se lo cobre. El lunes ya había recorrido los 20 municipios y ese mismo día inició la segunda vuelta.

    Mientras tanto, Paloma Sánchez realiza sin lugar a dudas la mejor propuesta de las cuatro fórmulas sinaloenses al Senado, pero enfrenta la desconfianza e incredulidad de ciudadanos que en cuanto detectan que a ella la arropan las siglas tricolor experimentan estremecimientos por los agravios asestados durante décadas. No se diga de la partidocracia aliada que más le vale ocultar antes de que los electores corran despavoridos.

    Además, poco le aporta a la ex Diputada federal el acompañamiento de Eduardo Ortiz Hernández, que en su momento sí fue un aguerrido activista del Partido Acción Nacional y actualmente está borrado de la memoria política de los sinaloenses. Paloma Sánchez va sola contra molinos de viento con aspas filosas y tétricas que no están en la Oposición sino dentro del bloque que la arropa en la pretensión de obtener los votos suficientes que la lleven al Senado.

    Por su parte, Jesús Estrada Ferreiro, cuya candidatura está armada con retazos petistas, morenistas y pasistas, sí es muy popular entre los culiacanenses siempre y cuando acuda a los talentos histriónicos que hacen reír a la gente. Eso le dará aplausos y abrazos, pero no le prodigará votos. Y el Partido del Trabajo le hará el favor a Morena de cavarle la sepultura política al ex Presidente Municipal de Culiacán en venganza porque el de Culiacancito violó el triduo moral de la 4T que lo instó a no mentir, no robar y no traicionar. ¿De qué materiales está hecho este personaje que añora el poder que ya tuvo y dilapidó? Ni Frankenstein podría saberlo.

    En síntesis, aquí cabe la acotación pertinente de que no se requieren de bolas de cristal, ouijas o médiums para ver venir el resolutivo que emanará de los votos la noche del 2 de junio. Es tan sencillo como leer los esfuerzos dramáticos de unos por ascender en la preferencia electoral, ver los rostros de otros alegres y los entristecidos, otear la víspera de golpes asestados a los que van en sentido contrario de las ambiciones de mafias políticas. Tranquilos, sólo se trata de entender las señales antes de asumir como propio el credo de los políticos.

    Reverso

    Antes de que lo digan los votos,

    Los sinaloenses podemos ver,

    Quiénes creen ya tener el poder,

    Y cuáles prevén sus sueños rotos.

    El ‘Entendimiento’

    A ver quién rompe primero el voto de silencio que les impuso la Secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, al Gobernador Rubén Rocha Moya y al Rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa en funciones, Robespierre Lizárraga Otero, para crear condiciones de encuentro y salidas del conflicto. La escueta información oficial señala que la funcionaria federal, luego de escuchar los argumentos de las partes, les recomendó “que se sigan buscando acercamientos que puedan traer como consecuencia avanzar en el entendimiento”. Y corre la cuenta regresiva para saber qué estará sobre la mesa. ¿Impunidad o justicia?

    -

    sicairos6204@gmail.com