Antes de la última imagen

    Uno cada 40 segundos. Ese es el número de suicidios en el mundo, según la Organización Mundial de la Salud y, por cada uno, hay 20 intentos. En el marco del Día Internacional para la Prevención del Suicidio, a conmemorarse este sábado 10, hagamos consciencia que podemos evitar que un ser querido crea que no hay otra salida.

    @guerrerochipres

    SinEmbargo.MX

    Uno cada 40 segundos. Ese es el número de suicidios en el mundo, según la Organización Mundial de la Salud y, por cada uno, hay 20 intentos. En el marco del Día Internacional para la Prevención del Suicidio, a conmemorarse este sábado 10, hagamos consciencia que podemos evitar que un ser querido crea que no hay otra salida.

    En su participación en la Feria Internacional del Libro Universitario 2022, la escritora Rosa Montero habló de lo que llama el suicidio desesperado, aquel en el cual una serie de circunstancias agravan la percepción de la vida e impiden a una persona ver que podría salir adelante si permitiera que el tiempo favoreciera un cambio, tuviera la ayuda psicológica necesaria y no desesperara.

    Pensar que alguien de nuestro entorno pudiera sentir ese nivel de depresión y desesperación nos hace preguntar qué podemos hacer para ayudarle.

    Son diversos los factores de riesgo para el suicidio. Desde la historia psiquiátrica familiar, el abuso de drogas o la pérdida de un ser querido hasta la violencia doméstica, el estrés laboral o el aislamiento social; el universo concreto que vive una persona puede causar un pensamiento suicida.

    Situaciones ambientales como la pandemia de Covid provocaron también un aumento en afecciones mentales. En este caso, el Inegi reportó un incremento del 9 por ciento en suicidios en niñas, niños y adolescentes entre 2019 y 2020.

    En The Last Photos, una campaña de salud mental realizada en el Reino Unido, las últimas imágenes captadas de personas que se suicidaron muestran rostros sonrientes y escenas de felicidad que jamás podrían llevar a asumir que esa persona era suicida. El sufrimiento emocional y psicológico puede estar enmascarado por la apariencia de sentimientos positivos y pasar desapercibido. Entonces, ¿cómo saber si alguien vive una tormenta interior que pueda llevarle a quitarse la vida?

    Tal vez la persona se muestra retraída, ha tenido fuertes cambios de humor, abusa de alcohol o drogas, regala sus pertenencias o ha comenzado a despedirse de familiares y amigos como si el adiós fuera definitivo. Para notarlo, hay que observar con intención.

    El apoyo de la gente que le rodea puede ayudarle a sentirse mejor y motivarle a pedir ayuda a servicios como la Línea de Seguridad o Chat de Confianza, 55 5533 5533, del Consejo Ciudadano, donde este año, a través del programa DI SÍ a la Vida hemos brindado Primeros Auxilios Psicológicos a 4 mil 353 personas, principalmente mujeres.

    Cuando todo se torna gris, puede ser difícil ver que detrás de las nubes hay paisajes coloridos, nuevos caminos y escaleras para volver a estar en la cima. En la atención que damos a quienes nos rodean y en cada acción podemos salvar una vida.