"ENTREVISTA: Tatiana Clouthier, el poder y AMLO"

"La vida de la hija de “Maquío” ha dado un vuelco desde que Andrés Manuel López Obrador la nombró coordinadora de campaña. En poco tiempo, ha acumulado influencia y poder. Y no pocos la “candidatean” ya para la “grande”... en 2024"

Hasta el 15 de enero la cuenta en Twitter de Tatiana Clouthier Carrillo registraba unos 14 mil seguidores.

Desde ese día su destino dio un viraje: Andrés Manuel López Obrador, el candidato presidencial puntero en todas las encuestas, le nombró su coordinadora de campaña.

Y su vida es otra.

En el reflector nacional, la sinaloense, hija de “Maquío” --el panista que le abriera un “boquete al sistema” priista en 1988-- se ha convertido en una revelación. Hoy le siguen a diario 118 mil tuiteros, quienes le festejan sus debates en televisión nacional. 

Tatiana hace alarde de tablas, oficio. Ataca, contraataca. Polemiza con lobos experimentados como Jorge G. Castañeda, o Javier Lozano. “tía Tatis”, empiezan a llamarle en las filas lopezobradoristas. Y ya muchos la “candidatean” para “la grande” en 2024. Otros le dicen que, por ella, sólo por ella, dan el “voto de confianza” a “El Peje”. En los “cuernos de la luna”, la integrante de la dinastía Clouthier admite que la posición le ha dado poder.

“Pero no soy yo, es Andrés Manuel”, señala a quien sus seguidores le lanzan hasta propuestas de matrimonio. Y aunque su marido se ponga celoso, dice, esto es síntoma de una manera de expresar la esperanza, la alegría, que “se respira”, por un cambio de régimen político en México en los comicios del domingo 1 de julio.

 

El viraje

Tatiana llega tres horas antes al Aeropuerto de Culiacán, sola, con una mochila al hombro, para ser la primera en la fila de Viva Aerobús, una de las aerolíneas más económicas. Quienes la reconocen le piden “selfies”. Pero ella, dice, no “se la cree”.

“Uno viene a la vida a aportar algo; yo creo que al final de cuentas he encontrado que lo que me gusta, lo que me mueve, lo que me hace vibrar tiene que ver con el servicio y encontrar mejores circunstancias de vida para mí y para los demás; en ese sentido es el camino en que he trabajado, y el camino en el que estoy”, señala.

Desde enero 15, la agenda de esta sinaloense de 53 años está saturada. La entrevista con Noroeste la concede en el aeropuerto. Visita Culiacán para acompañar el registro de Manuel, su hermano como candidato al Senado por la vía independiente.

Tatiana salió de Sinaloa a los 15 años, para estudiar inglés en Estados Unidos. Tres años más tarde, se quedó en Monterrey a estudiar la Licenciatura en Lengua Inglesa, en el Tec.

En 1986 tuvo su primer encuentro con la política partidista en la candidatura de “Maquío” a la Gubernatura. La experiencia se repitió en 1988, con su padre como candidato presidencial del PAN.

Fallecido Clouthier en 1989, volvió a Sinaloa en 1992 para encabezar el “Ejército de la Democracia” y apoyar la campaña de Emilio Goicoechea al Gobierno estatal.

Aquellos fueron los años de mayor activismo del PAN local, que enarboló la bandera contra los fraudes electorales. Después de Goicoechea, Tatiana respaldó a Mercedes Murillo, “Meché”, en su intento por la alcaldía culichi.

 

La vida te ha puesto en momentos clave para la política y democracia en México: 1986, 1988, 2000, y hoy otra vez, 2018...

Son oportunidades que se dan en la vida, y creo no es casualidad. Tú recordarás el sismo del 85, aquel sismo que hizo vibrar los mexicanos y retumbó en la Ciudad de México, y abrió el paso para lo que vino ser el movimiento ciudadano que se generó en el 88 con “Maquío”. Creo que ahora vuelve a surgir, desde otra manera, vuelve a haber otro sismo que nos vuelve vibrar, viene a haber como un despertar mayor, que como ciudadanos podamos decir queremos que esta transformación se dé, y se dé en el 2018.

 

¿Te ha cambiado la vida ser coordinadora de AMLO?

Claro que sí, no puedo decir que no. Yo me encontraba cómodamente como directora de una prepa privada en Monterrey, con un horario establecido, donde veíamos cómo construir un mejor futuro para los jóvenes. Y ahora ya no nada más es eso, sino buscar mecanismos para poder que la gente se sume a este proyecto, que incluye a todos los mexicanos.

Ahora es como darle cinco meses de regalo a la patria, en esta responsabilidad. Y esto efectivamente cambió mi vida.

 

¿Cuál es el papel concreto que juegas dentro de la campaña?

Esto es la parte que yo creo que AMLO muestra al final del día, la de Andrés es una campaña distinta, que tiene matices, y mi puesto como coordinadora tiene que ver con algo diferente, la campaña ha sido larga y tiene ya la parte de las estructuras manejadas y la parte de la agenda, a mí me invitaron a ser como un factor de sumar y atender todos estos nichos de votación, donde tenemos que jalar a estos votantes que tradicionalmente no han estado atrincherados a ningún partido, sino éstos que razonan el voto.

 

¿Si te escucha Andrés Manuel?

La gente dice y comenta, y todo lo demás. Ustedes pueden ver. Coordino una campaña, no coordino a un candidato. Les digo yo “no coordino ni a mi marido”. Libertad de maniobra es la frase. Y discutimos temas, hablamos, presentamos escenarios, y se toma la decisión de lo que creemos conviene.

 

¿Han sido más los encuentros que desencuentros tuyos con AMLO?

No, no he tenido desencuentros con Andrés; creo que en este país a veces tenemos miedo a decir que pensamos distinto o que tenemos una visión distinta de algún punto de vista, y eso pudiera llamarse desencuentro.

Yo no he tenido ningún desencuentro con él, al contrario, estoy contenta de las enseñanzas que he tenido en el camino con él, de lo que he aprendido con su equipo, en abrirme las puertas para poder que sumemos en forma exponencial, y no restar.

 

El poder

Eres hoy una figura de mucha proyección mediática, ¿cómo te sientes estar en una vitrina pública las 24 horas del día?

La verdad es que en el camino por la vida entre menos te despegues de la tierra, entre más captemos que éstas son circunstancias y momentos, es lo que nos permite continuar en el camino que tenemos. La vida es la vida. Somos los mismos, yo y mis circunstancias, nada cambia. Lo único que cambia, y yo quiero que cambie, es este país.

 

¿Qué es el poder, Tatiana?

Para mí el poder tiene que ver con el hacer o capacidad de hacer que muchos logremos de utilizar un mecanismo para que nos vaya mejor a todos.

 

¿Te sientes una mujer de poder, hoy 2018?

Creo que estamos convenciendo a que muchos podamos caminar hacia esta misma visión que nos invita AMLO para construir una patria distinta.

 

Tatiana admite que su caso es como un “boom” en la actual campaña presidencial.

Los números hablan por sí mismos: sus seguidores en Twitter ya rebasaron, en dos meses, los de otras mujeres cercanas a AMLO, como Yeidckol Polevnsky, dirigente nacional de Morena.

“Es una locura”, refiere, “en términos de que no soy yo; es la figura o el puesto que represento, 'me cuelgo' por llamarlo así de muchos de los seguidores de Andrés; represento este movimiento grande que no es Tatiana, es un movimiento donde muchos de estos seguidores son de Andrés, porque es el camino que estoy caminando, pero no es Tatiana, es el proyecto al que siguen”.

 

Pase lo que pase tendrás una posición destacada en la próxima Legislatura federal, como Diputada (va en lugar dos de lista de plurinominales).

La parte importante en todo este camino tiene que ver con pensar que el lugar más importante de todo mexicano es el que nos da el derecho en el artículo 39 constitucional: el ciudadano es el mandante, ese es el mejor lugar.

 

El terruño 

¿Cómo ves a Sinaloa a la distancia? Nunca te has desterrado del todo de Sinaloa...

No me puedo desterrar, aquí nací, aquí crecí. Tengo enormes lazos que me unen, hermanos, hermanas; amigos, amigas. Aquí moví mi primer balón, tuve mis primeras alegrías, encuentros, desencuentros, y la patria chica nunca se olvida.

 

Los Clouthier, en particular tú y Manuel, han sido muy críticos sobre la situación política del estado...

Lo ven ustedes todos los días; es un estado que ha sido, no diría ejemplo, porque no es ejemplo, sino como referente en cuanto a lo que no queremos los mexicanos en temas de violencia, drogadicción, narcomenudeo, y el poder que se ha metido a hacer parte de la política, que tiene que ver con el narcotráfico, y que ya se contaminaron otros estados del país, y en eso no me gustaría que sea referencia.

Qué sí me gusta: que Sinaloa sea referencia de grandes hombres y mujeres, como lo es César Millán que es ejemplo internacional como encantador de perros; donde tienes líderes empresariales que han sacado la casta, artistas como Rossy Robles, Teresa Margolles, Élmer Mendoza, como mucha gente que ha destacado en este estado y ha puesto a Sinaloa en alto.

 

Sinaloa y el país, sostiene, tienen remedio.

 

¿Y si no es AMLO, Tatiana?

Y si no es Andrés Manuel, qué decidirá la gente. Yo creo que AMLO lo ponía bien: “tenemos la gran oportunidad”; yo veo frente a nosotros dos caminos. No hay otro, en los dos caminos es PRI y PAN, que es más de lo mismo, y ya conocemos, y no podemos esperar un cambio en este país haciendo más de lo mismo. Y el otro es un viraje, hay que respetar lo que la mayoría decide. Si (no es AMLO) tristemente iríamos por el mismo camino, que es más de lo mismo.

 

¿Ustedes descartan “fraude de Estado”?

Ni lo descarto ni lo quiero mencionar, porque creo que construimos con el lenguaje. Creo que los mexicanos tenemos que salir y ser capaces de cuidar, promover y hacer que cuente el voto que cada uno de nosotros emitamos. Y si somos capaces de cuidarlo y darle garantía habremos de evitar lo que sucedió en Coahuila y el Estado de México.

 

AMLO iba arriba en las elecciones de 2006 y 2012 y se vino abajo el día de la elección, ¿ven ese escenario ustedes en 2018?

--Yo digo que esto es como el beisbol y aquí en Sinaloa lo entienden muy bien. El juego sigue hasta que meten el último out, y hasta que se acaban las nueve entradas, el juego sigue y el juego es proceso electoral en término de lo que denominamos una campaña; faltan varios días, meses, y no podemos cantar victoria hasta que se meta la última carrera.

 

¿No hay triunfalismo en el “cuartel de guerra” de AMLO?

En ningún lado hay triunfalismo, AMLO no deja de trabajar día y noche, no se cansa, camina y camina, va abriendo brecha para seguir sembrando y cosechando, no hay triunfalismo.

 

AMLO, añade, ha puesto énfasis en las estructuras para cuidar el voto el 1 de julio. Pero será la gente, subraya, la vigilante mayor de la limpieza electoral.

 

Derecho a disentir

Para Tatiana los electores mexicanos deben entender que se viven “otros tiempos” en la política. En su caso, dice, no es militante de Morena. Y vino a Sinaloa para apoyar a su hermano Manuel, porque es el “llamado de la sangre”, y además, ella también fue promotora de las candidaturas independientes.

“No estoy en Morena, no estoy en ningún partido, estoy en el partido más grande que se llama México, en el partido que creo militamos todos los mexicanos, no me siento sectaria, no soy parte ni estoy sellada como una vaca con unas siglas”.

Para ella, confiesa, no es complicado disentir dentro de Morena, porque es libre pensadora.

“Y aquí se lo digo a la gente abiertamente. Somos libre pensadores. Por ejemplo, cuando yo le dije a Andrés Manuel ‘no estoy de acuerdo con la candidatura de Napoleón Gómez (el cuestionado líder minero)’, me respondió, ‘adelante, puedes decirlo abiertamente’. Somos un grupo de libre pensadores, no tenemos por qué estar de acuerdo en todo”.

Esto es parte, añade, de lo que se tiene que entender en la construcción de un nuevo país.

“AMLO ya entendió y ha sido capaz de decir 'requerimos ir juntos, representar a este México plural, diverso, que tenemos, y ha dicho 'Morena abre las puertas para que este México se exprese, para que este México plural camine”.

 

Hay segmentos importantes, no priistas, no panistas, que le tienen aún miedo a AMLO...

Yo también le tengo miedo a muchos de esos segmentos, le tengo miedo a todos esos sectarios que asustan a los demás sin argumentos, simplemente porque quien puede estar al frente del país no se somete a tus intereses, porque no piensa como tú.