"En Mazatlán, médicos reimplantan brazo a joven amputada de Escuinapa"

"En el puerto y el estado hay capacidad para hacer cirugías reconstructivas: Salvador Negrete"
11/06/2020 07:38

Mireya tendrá una nueva oportunidad de tener un brazo. Aún es pronto para saber si podrá funcionarle al 50 o al 60 por ciento, pero no pasará el resto de su vida con un muñón.

Ello, gracias a la oportuna intervención de reimplante que permitió que un brazo totalmente amputado en un accidente de trabajo en Escuinapa, volviera a ser parte de su cuerpo.

"Tuvimos la fortuna de hacer el primer reimplante de brazo en Mazatlán y Sinaloa", declaró Salvador Negrete, Cirujano Plástico y Reconstructivo.

Dijo que con ello se demuestra que todos los pacientes que sufren un traumatismo en el que pierden una parte de su cuerpo, tienen la opción de que le sea reimplantado.

El doctor Negrete indicó que en el caso de Mireya, una joven de 21 años de edad, se juntaron muchas cosas a su favor: el que la primera atención fuera por un cirujano plástico, y el que en la Clínica del Mar hubiera todo el equipo médico y material para atenderla.

 

El doctor Javier Nares, quien intervino también en la cirugía, explicó que había tres equipos, el de anestesiólogos y dos de cirugía, uno para tratar el brazo y otro para la parte amputada para localizar las partes para el reimplante: hueso, arterias, venas, tendones y músculos.

La identificación de los elementos les llevó dos horas y la cirugía en total entre seis y siete horas.

Nares dijo que esperan que recupere entre 50 y 60 por ciento de movilidad, pero depende de la rehabilitación, que podrá empezar hasta que el hueso suelde, es decir unas seis semanas más.

Negrete consideró que siempre es importante tratar de reconstruir, antes que amputar de primera intención.

Ello, recalcó, le da la oportunidad de no sufrir el trauma de la amputación.

Los padres de Miyera, Cristina y Francisco, agradecieron el trabajo de los médicos.

Señalaron que los primeros días fueron muy dolorosos porque su hija se negaba a hablar, pero tras ver que ya tiene de nuevo su brazo, recuperó el habla y la sonrisa.