"Construye Tatiana Bilbao un nuevo acuario en Mazatlán que respeta su entorno"
Ariel Noriega
La arquitecta responsable de imaginar el proyecto del nuevo Acuario, recorrió la obra que emerge de sus cimientos y comienza a tomar forma.
Distinta al resto de los arquitectos, Adriana Bilbao construye en Mazatlán un acuario donde el cuidado del medio ambiente no es un discurso, es una totalidad, un edificio que emergerá de su entorno para asombrar a sus visitantes.
“Lo más importante es crear arquitectura donde permitamos que la naturaleza demuestre que es lo más importante, sobre todo en un acuario, donde vamos a aprender de la naturaleza”, explicó la arquitecta.
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En una visita agendada para que la arquitecta supervise la obra que ya alcanza el 20 por ciento de avance, Bilbao aprovechó para reunir a los trabajadores de todos los escalafones y explicarles el proyecto.
“Ustedes son los que van a transmitir esas ideas, esos sueños, en un espacio muy especial, en muchos sentidos, para esta ciudad, para este parque, pero sobre todo para el hábitat que queremos albergar aquí”.
Por primera vez, la arquitecta con proyectos en China, Estados Unidos, Francia y Guatemala, visitó el proyecto del acuario después de haber superado la etapa de la cimentación, uno de los trabajos más complejos que se han realizado en Sinaloa, debido a las características del suelo pegado a la Laguna del Camarón.
Lo primero que llama la atención son las bases de las enormes escalinatas que llevarán hasta el techo del edificio, donde los visitantes podrán observar el Parque Central, la ciudad y el mar desde una altura superior a los 23 metros.
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También se puede observar ya los trabajos de herrería de lo que será el “corazón” del nuevo acuario, la pecera oceánica, un enorme tanque con paredes de concreto armado de 80 centímetros de espesor.
Acompañada por Guillermo Zerecero, director general del proyecto, Bilbao platicó con los 230 trabajadores que operan al mismo tiempo en el proyecto, resolvió dudas, dio indicaciones y se mostró satisfecha con los avances.
De pie, en lo que será el restaurante y la cafetería del futuro acuario, Bilbao observó el Parque Central, señaló la zona donde estará el aviario y recordó que el edificio mismo estará cubierto por la naturaleza, para recordarnos que no somos nosotros quienes mandamos, sino ella.
