Editorial
Aunque gobernaba Estados Unidos, sus decisiones tuvieron peso en todo el mundo. Una política dirigida a fortalecer su relación con los blancos estadounidenses y de abierta confrontación hacia las diferentes minorías. Así fue el Gobierno de Donald Trump que llega a su fin y se abre una nueva era.
¿Cómo será el Gobierno de Joe Biden? No hay que esperar que sea la caridad, cuando lo que se busca, sea demócrata o republicano, es proteger los intereses estadounidenses, pero sí promete revertir algunas de las cosas que Donald Trump intentó destruir.
La atención a la pandemia. Es tal vez para Biden uno de los puntos más urgentes de su agenda y promete gestionarlo de mejor manera para contener los contagios y muertes a causa del Covid-19.
Su relación con el mundo. Al menos, ha anunciado flexibilizar las restricciones que se habían impuesto, por ejemplo, hacia países del mundo árabe. Busca tender puentes, los que Trump derrumbó.
El cuidado al medio ambiente. Mientras que el republicano se convirtió en un negacionista del cambio climático, el demócrata promete acciones inmediatas para el cuidado del medio ambiente, como cerrar el oleoducto Keystone.
El reconocimiento a los migrantes. La política migratoria ha sido uno de los temas pendientes entre los demócratas y Biden ha prometido también acciones inmediatas que permita dar certeza jurídica a los millones de migrantes irregulares en ese País.
La aceptación de la diversidad. Una de las acciones más evidentes que marca distancia frente a Trump es la manera en que Biden ha conformado su gabinete: un mosaico de la pluralidad cultural que vive el País.
Sí, termina una época en la política estadounidense, la de Trump que marcó un oscuro precedente en Estados Unidos en su relación con el mundo y con las minorías, enalteciendo a la extrema derecha y a los grupos xenofóbicos.
Y hoy inicia una nueva era, que promete ser totalmente lo opuesto con lo que hasta ahora ha ofrecido Joe Biden. Ya el tiempo pondrá a cada quien en su lugar.
