Miguel Torruco, Secretario de Turismo federal, solicitó ante el Gobierno federal que el turismo en México sea considerado una actividad esencial.
Como todos sabemos, el simple hecho de que esto sucediera provocaría que el sector turístico abriera sus puertas inmediatamente, sin importar el color que la pandemia pintara sobre el País.
Seguramente a millones de personas que viven del turismo la idea podría parecerles inmejorable, pero la verdad se nos antoja harto difícil que se pueda decidir algo así, de hacerlo las consecuencias podrían ser impredecibles.
El primero que brincó fue el Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, quien aseguró, con acierto, que el turismo es mucho más que hoteles.
Los hoteles han hecho un gran trabajo en materia de capacitación y prevención y se preparan para abrir sus puertas de manera gradual y con numerosas precauciones, pero ¿qué pasaría con el resto de los protagonistas del sector?
Restaurantes, bares, centros de entretenimiento, puntos turísticos que reúnen a miles de personas, playas, malecones, parques, etc…
Los riesgos son enormes y cada lugar tiene sus propias características, así que suponemos que la idea no pasará de ser una buena intención.
O quizá, lo mejor que pueda pasarle es que se convierta en una idea que sea retomada parcialmente.
Invitado
Por cierto, el Secretario de Turismo federal, Miguel Torruco, participará hoy en un foro virtual, junto con el Congreso del Estado de Sinaloa, con líderes del sector turístico en Sinaloa.
En el evento participarán algunas de las diputadas más destacadas en el Congreso y permitirá abordar temas sensibles que atañen al sector turístico de Sinaloa, entre ellos el del posible regreso a la “nueva normalidad”.
Los retos del sector frente a la pandemia serán analizados por líderes del sector hotelero como Carlos Berdegué Sacristán y José Ramón Manguart, y por parte de la autoridad participará Óscar Pérez Barros, Secretario de Turismo en Sinaloa.
El encuentro virtual se realizará a las 16:00 horas, a través de la plataforma Zoom.
Advertencia
Los agricultores de Sinaloa se unieron ayer para exigir que el Presidente Andrés Manuel López Obrador garantice el precio de 4 mil 150 pesos por tonelada de maíz.
Con sus camionetas, camiones de carga, tractores y trilladoras realizaron caravanas y plantones en los entronques carreteros y casetas de peaje de varios municipios para exigir sensibilidad al Gobierno federal y que pague el precio prometido.
Los productores se apostaron desde la caseta de San Miguel Zapotitlán, en Ahome, el Valle del Carrizo hasta la caseta de Mármol, en Mazatlán.
Y se realizaron manifestaciones en caravana en Guasave, Angostura, Navolato, Culiacán, Mocorito, Elota y San Ignacio.
De acuerdo a los organizadores participaron la mayoría de los 22 mil 300 productores de Sinaloa, evitando cerrar vialidades y manteniéndose al margen de las carreteras.
El Diputado Faustino Hernández Álvarez amenazó con protestas ya no tan pacíficas en caso de que no se cumplan sus peticiones.
Los productores, dijo el líder agrícola, exponen su patrimonio para levantar la cosecha y que llegue a la mesa de los mexicanos y en este momento solo quieren que se cumpla un compromiso.
Por lo pronto, la pelota la dejan en manos del Presidente, Andrés Manuel López Obrador, quien si logra destrabar este conflicto y cumple con el precio pactado para el pago de las cosechas se anotará un golazo.
Con las manos vacías
Los que no obtuvieron gran cosa, pero al menos fueron escuchados son los líderes de los comerciantes de Culiacán, que han agudizado sus protestas para exigir que reabran las calles del primer cuadro y los negocios no considerados esenciales.
Ayer, representantes de los comerciantes sostuvieron una reunión virtual con el Alcalde de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro.
Los comerciantes pidieron el desbloqueo de las calles y vialidades, pero el Alcalde dijo que el Ayuntamiento no tiene tales facultades de reapertura, dada la situación grave de la pandemia.
¿Sí o no?
“¿Qué no se supone que el Cabildo es el máximo órgano de gobierno? ¿Incluso por encima del Presidente Municipal? Entonces, ¿por qué estamos aquí trabajando, exponiéndonos al contagio de coronavirus, exponiendo a los que llegan al Palacio Municipal?”.
Fue un reclamo directo, y no vino de parte del líder del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Ayuntamiento de Mazatlán, ni de algún director de área.
Eran trabajadores y trabajadoras, simples mortales que han estado conviviendo con compañeros que caen un día sí y el otro también víctimas del Covid-19.
Tienen miedo y tenían la esperanza de ponerse a resguardo mientras pasaba lo peor de la pandemia. Pero eso no sucedió, para ellos el valor del Cabildo se cayó al suelo.
“Es muy fácil aprobar un acuerdo e irte a tu casa a descansar. Los regidores sí pudieron ponerse a resguardo, pero nunca comprobaron que su acuerdo se cumpliría”, declaró una de las quejosas.
Algunos ediles sí llegan hasta el Palacio Municipal, como el petista Rodolfo Cardona Pérez, quien aseguró que el acuerdo de Cabildo sí se cumplió, que incluso en la oficina de regidores no hay personal.
Lo cierto es que desde el día siguiente de la sesión de Cabildo donde se votó el acuerdo, el 28 de mayo, los directores no sabían cómo se procedería, la Secretaría del Ayuntamiento no respondió al cuestionamiento y el Oficial Mayor ha estado ausente también por Covid-19, el Alcalde apenas regresó y todos se tiraron la bolita.
Y mientras tanto, los casos no paran en el Ayuntamiento, ya se habla de cuatro infectados en la Dirección de Planeación y que hasta pleito estuvo a punto de haber en Asuntos Jurídicos cuando la directora, Cielo Rosa Muncharraz Elías siguió yendo a trabajar a sabiendas de que estaba contagiada.