Rafael Morgan Ríos
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Este 15 de mayo de 2020, el PADRE ha llamado al Lic. Silvino Silva Lozano, periodista comunicólogo, asesor y consejero, fundador y director de los periódicos Noroeste de Culiacán, Mazatlán y Los Mochis, Director del Periódico La Hora y de la Revista Recuento, Director también durante cinco años de la Revista La Nación, órgano del Partido Acción Nacional. Esposo y padre ejemplar, hombre de fe, hermano y amigo como pocos.
Su obra cumbre fue la creación, fundación y sostenimiento durante veinte años de los periódicos Noroeste, que han sido parte de la historia de Sinaloa, cuya presencia fue clave durante las gubernaturas de Alfredo Valdez Montoya, Alfonso Calderón Velarde, Antonio Toledo Corro y Francisco Labastida Ochoa, en tiempos en que los gobernadores eran omnipresentes, omnipotentes y omniscientes y que no toleraban ninguna crítica u opinión contraria de periodistas, prensa o comentaristas, quienes se jugaban la vida con cada artículo o comentario.
Eran tiempos en que el narcotráfico y los grupos de delincuentes; tenían pleno control sobre territorios, negocios, cómplices y funcionarios públicos comprados, desde directores de policías, ministerios públicos y jueces, tiempos en los que no se contaban los muertos y en los que las luchas entre ellos eran fatales por definición.
Reporteros, administradores, repartidores, voceadores y hasta directores de los periódicos Noroeste sufrieron los embates de gobernantes y delincuentes. Se perdieron las vidas de varios reporteros y el robo y destrucción de equipo de trabajo; pero también se sufrieron las consecuencias de una prensa libre e independiente frente a autoridades y funcionarios federales como la Productora e Importadora de Papel, S.A. (PIPSA), que en ese tiempo detentaba el monopolio del papel periódico y con eso controlaban a la prensa recortándoles o encareciendo el papel a las empresas periodísticas no gratas.
Se sufrieron estas vicisitudes, además de las de una empresa que se inicia, que nunca tuvo el capital necesario, que sufría cada quincena para pagar salarios, muchas veces atrasados, que crujían huesos y dientes para pagar impuestos y los créditos bancarios (y algunos de agiotistas), además de una competencia de la prensa ya establecida.
En Noroeste nunca hubo miedo de apoyar la democracia frente a un partido oficial, hegemónico y totalitario, dando entrada en sus páginas a las opiniones y noticias de los partidos de oposición, cuando éstos estaban casi proscritos; siempre había algún lugar en las páginas del Noroeste para dirigentes y candidatos de oposición.
Pero... ¿Cómo se inició esta epopeya de la comunicación libre en Sinaloa? Sucede que por allá en los inicios de los años setenta, un grupo de jóvenes, católicos, profesionistas inquietos ante la falta de libertades políticas y sociales, buscaron empresarios que quisieran hacer algo al respecto, financiando alguno de los proyectos que se les presentaron: una universidad que recibiera a los rechazados, o bien, una escuela técnica para enseñar oficios como carpintería, mecánica, electricidad, etc.; o también, un periódico o una revista, o tal vez una organización capacitadora de líderes.
Finalmente hubo un grupo de empresarios interesados en crear un periódico, con la condición de que fuera un órgano muy objetivo, sin ser pro, pero tampoco anti gobierno y además sin que se supiera quién financiaba y que esos jóvenes: el Lic. Silvino Silva, Esteban Zamora Camacho, Rafael Morgan Ríos, etc., fueran los que aparecieran como socios. Los empresarios fueron el Ing. Manuel J. Clouthier, el Sr. Enrique Murillo Padilla y el Lic. Jorge del Rincón Bernal. Lo anterior era entendible, ante las represalias de gobernantes y testaferros, además del peligro que significaba el narcotráfico.
Con un capital inicial de tres millones de pesos, de los cuales el 95 por ciento lo aportaron los tres empresarios y el resto se logró con pequeñas aportaciones de 5 o 10 mil pesos de amigos y simpatizantes, como Luisa Urrecha, el Dr. Jared Álvarez, el Ing. Jorge Luis Franco, Célida Andrade, el Ing. José Humberto Choza, Rafael Morgan Ríos, Carmen Alicia Franco y muchos más cuyos nombres se me escapan.
A su debido tiempo todos los empresarios y accionistas dieron la cara y también sufrieron algunas consecuencias, pero la obra ya estaba en marcha. Esta es la historia del origen del periódico Noroeste y del Lic. Silvino Silva Lozano como periodista y comunicólogo, que cumplió su papel en la historia de Sinaloa y de México.
Descanse en paz.
