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Hoy termina el puente Guadalupe-Reyes y comienza la Nueva Normalidad.
Estudiantes endeudados
Me dice la paisana Martha Gómez Gámez: “A ver a qué árbol se arrimará ahora tanto profesionista. Hace años platicamos de qué iba a pasar con todo el bonche de egresados de universidades y la deuda de todos esos pobres ilusos. No les queda de otra más que irse a un país tercermundista a laborar, refinanciar su crédito con intereses congelados y que lo absorba la empresa que lo contrate, descontándolo de una parte de su sueldo y que sea deducible al 100 para el patrón. O sea, casi casi, que le traspase la deuda como trueque (una parte es su pago y otra su sueldo). Así, el bolón de cerebritos se podrían explotar en un país donde realmente apliquen sus conocimientos, ayuden a elevar el nivel del país tercermundista, PERO tendrían que ser bilingües y eso es lo que a los gringos nativos no se les da mucho. También podría provocar broncas de ego en los países a donde llegaran puesto que les quitarían la oportunidad a los nativos de ejercer esos puestos, pero las empresas fuertes en su mayoría son trasnacionales.
“Aquí en tu puerto querido, hay una ola imparable en hacer torres, residenciales, hoteles, casas, etc. ¡No hay albañiles ya! No se dan abasto. Se los traen de otras ciudades. Hay muchos peones, pocos ‘maistros’ y están cotizadísimos. Mucha gente de medio pelo que apenas está llenando ese hueco en las constructoras por tanta obra que hay. Y así como los albañiles están los electricistas, fontaneros, pintores, etc. O sea que aquí aplica al revés. Falta mano de obra y ese gremio, lejos de devaluarse, está subiendo como no te imaginas.
Abundan los real staters improvisados que están en pañales y nombre... Vieras las historias de terror. Faltan organismos que regulen y eduquen pero con lecciones de ética y antigandallismo. De todos modos, aquí la vida sigue siendo bella”.
https://elamerican.com/venganza-nerds-deuda-universitaria/
Sobrantes
Esos pobres endeudados no son más que un caso particular, circunstancial. El problema general es que quizá hemos llegado al final del ciclo expansivo. La humanidad tuvo menos de mil millones de habitantes durante 200 mil años (y muchos menos durante la mayor parte de ese tiempo). En el brevísimo curso de dos siglos la población creció extraordinariamente debido a la inyección de un mega shot de energía vía carbón-gas-petróleo y un modelo económico de crecimiento infinito a base de recursos finitos (posibilitado por una desorbitada expansión crediticia, permitida a su vez por el “dinero” fíat keynesiano, casi infinitamente estirable, etc, tú ya conoces mi opinión al respecto). Ambos elementos han arribado a su término (esa “ola imparable” que menciona la paisanita se financia en puro crédito bancario, que endeuda más a constructores y compradores, y que nunca será pagada tampoco). Me temo que es tiempo de regresar al parámetro "normal" de la demografía planetaria.
¿Estamos nosotros y nuestros hijos y nietos, entre esos seres humanos "sobrantes" de que se habla? (Se dice de cierto funcionario, tecnócrata de primer nivel del gobierno, que en 1993 dijo que a México “le sobraban” 50 millones de habitantes. ¿Cuántos millones, según él, le “sobrarán” ahora a México? ¿Se incluye a él mismo entre esos “sobrantes”?).
¿Políticas idiotas o perversas?
Hoy Marián y yo caminamos hasta la sucursal de la tienda Mascota. Necesitábamos un paquete de pañales para nuestra perrita. Pero la empleada nos informó que la tienda sólo estaba autorizada a vender comida, aunque a la vista tenían muchos otros artículos: suéteres, collares, camas, etc. Y sí, también pañales. Tuvimos que comprarlos en una veterinaria. Sorprendentemente nos salieron más baratos. Pero qué le vamos a hacer. El objetivo es quebrar todas las economías del mundo, pero algunos babosos creen que ellos se van a “salvar”.