Rafael Morgan Ríos
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Se están viviendo tiempos de concientización en la protección del medio ambiente; la presencia de la adolescente alemana Greta Thunberg en la Cumbre del Clima en la Asamblea General de las Naciones Unidas y en la COP-24 en Polonia, en donde Greta hizo un vigoroso y juvenil reclamo contra la destrucción del medio ambiente. La actividad de Greta suscitó cientos de marchas y protestas exigiendo a gobiernos, empresas y organizaciones sociales, se cumplan los Acuerdos de París.
Pemex está entre las 20 petroleras más contaminantes, ocupando el 9° lugar, según el Instituto de Responsabilidad Climática de Estados Unidos, de acuerdo con nota en El Universal. La posibilidad de que México cumpla con sus compromisos en los Acuerdos de París se agravan, pues varias plantas de la CFE consumen carbón y combustóleo, ambos muy contaminantes, a lo cual hay que agregar ahora las burocráticas decisiones del actual gobierno en cuanto a la entrega de los Certificados de Energía Limpia (CELs), cuyos lineamientos se pretende modificar, obstruyendo los nuevos proyectos y dañando la operatividad de las empresas ya establecidas, a pesar de que se ha demostrado que la generación de energía limpia por las empresas privadas tiene un costo de 20 dólares el megawatt, frente a los 78 dólares que informa la CFE que le cuesta, según reportaje en El Universal.
En Sinaloa se tienen los propios problemas: por un lado, atendiendo a un estudio del Fondo para la Defensa Ambiental en el cual colaboró la doctora Laura Rodríguez, se señala que, ante el aumento de la temperatura del mar por el cambio climático, la pesca puede caer entre 30 y 44 por ciento por la migración de especies, reducción de oxígeno o cambios de la acidez en el agua. Se pretende instalar una planta de amoniaco en Topolobampo, en el Mar de Cortés, del cual se succionarían 2000 m3/hora de agua de mar, que una vez realizado el proceso industrial, se reintegra al mar pero con altas temperaturas, agravando el problema del calentamiento en esa zona.
Causa extrañeza que el Senador Mario Zamora Gastélum declare al periódico Noroeste que la planta de amoniaco en Topolobampo no se debe perder a causa de mitos o mitotes, o de la grilla y politiquería, lo que indica que quiere ignorar que se han presentado diversos recursos de amparo, con los que se han logrado suspensiones provisionales y definitivas en base a argumentos jurídicos, ambientales y sociales, que de ninguna manera son “mitos ni mitotes” sino razones de peso esgrimidos por diferentes grupos colectivos en materia ecológica; un juez federal ordenó al Director de Semarnat, al Presidente Municipal de Ahome y al Ayuntamiento de Ahome, “procedan a paralizar los efectos de la resolución en materia de impacto y riesgo ambiental... y ordenar la inmediata paralización de operaciones del proyecto denominado “Planta de Amoniaco 2200 TMPD en Topolobampo, Sinaloa”.
Para conocimiento del Senador Zamora, conviene reproducir algunas de las razones planteadas por las organizaciones, que demuestran se violan leyes y normatividad:
1. El lugar elegido está dentro del sitio Ramsar 2025, Lagunas de Santa María-Topolobampo-Ohuira en área de conservación de aves num. 33 y Región Terrestre prioritaria.
2. No se consultó a las comunidades indígenas asentadas en la zona para la autorización en materia de impacto ambiental.
3. El alto riesgo en esta planta se presenta con el movimiento de más de 2000 toneladas diarias de amoniaco, producto inestable y peligroso, a través de un ducto de 3 km al puerto de Topolobampo y almacenado en tanques de 75 mil toneladas.
4. Se han rellenado más de 26 hectáreas litorales afectando las corrientes de agua de la laguna, así como la tala de manglares.
5. Altera el ecosistema local, hábitat de 32 especies enlistadas en la NOM-059-SEMARNAT-10, 13 de ellas amenazadas y cinco en peligro de extinción.
6. Los dragados provocarán un incremento de mareas rojas envenenando organismos pesqueros.
7. Se está afectando la zona de mayor abundamiento de post-larvas de camarón, así como huevos y larvas de peces.
8. La succión de agua del Golfo secuestrará larvas de peces y camarones, calculándose en más de 500 toneladas, o sea el 61 por ciento de la producción anual.
9. Se cuenta además con la demanda penal por la escrituración falsa de la zona marítima federal, en la que se llamó al estero como “Agostadero de Mala Calidad”.
No se está en contra de una planta de amoniaco, sino que se debe instalar en un lugar que no afecte en tan sumo grado los ecosistemas y que no signifique tanto riesgo a la población.
