El miércoles nos enteramos que Luis Ángel Pineda Ochoa, ex secretario técnico de la Secretaría de Turismo, fue detenido por posibles actos de corrupción y que después se le dejó en libertad condicional.
De inmediato podemos pensar, citando al ex Alcalde de Culiacán, Sergio Torres Félix, que “hay culebra en el agua”, pero la cosa es que esa libertad condicional está en la ley.
Lo primero que tenemos que tomar en cuenta es que los delitos de ejercicio indebido del servicio público y desempeño irregular de la función pública, aunque de por medio haya un posible desvío por 8 millones 651 mil 798.52 pesos, no son considerados como graves ni parte del catálogo para prisión preventiva oficiosa.
Cuando se reformó el Código Nacional de Procedimientos Penales se estableció que los delitos con cárcel de oficio son delincuencia organizada, homicidio doloso, violación, secuestro, trata de personas, delitos cometidos con medios violentos como armas y explosivos, así como delitos graves que determine la ley contra la seguridad de la Nación, el libre desarrollo de la personalidad y de la salud.
Sin embargo, se dejó la posibilidad de que el Ministerio Público solicite cárcel preventiva cuando crea y sustente que la persona que acusa se puede dar a la fuga, pueda destruir evidencia importante o ponga en riesgo la vida de otras personas.
Sin argumentos
En el caso de Luis Ángel Pineda Ochoa, resultó que el Ministerio Público dijo que tenía miedo de que se fugara.
Sin embargo, los representantes de la Fiscalía General no justificaron su temor y los abogados de Pineda Ochoa demostraron con documentos que su cliente se presentó en dos ocasiones a la Fiscalía General para ponerse a disposición del Ministerio Público.
En ambas ocasiones le despacharon sin que le notificaran de las denuncias en su contra ni de la orden de aprehensión que ya tenían en su contra.
El juez tomó en cuenta la disposición de Pineda Ochoa ante posibles investigaciones, tal como el Código Nacional de Procedimientos Penales en el artículo 168 le obliga a revisar:
“El máximo de la pena que en su caso pudiera llegar a imponerse de acuerdo al delito de que se trate y la actitud que voluntariamente adopta el imputado ante éste”, indica el artículo en el que se establece cómo y cuándo dar prisión preventiva.
Si Pineda Ochoa no se hubiese presentado en la Fiscalía General, o no se le hubiese encontrado en sus domicilios, o se hubiese resistido a la detención, la situación sería diferente.
Aquí lo que pasó es que el Ministerio Público no dio un argumento sólido para exigir que el ex secretario técnico de Turismo se quedara en la cárcel para sobrellevar un proceso penal en su contra.
¿Por qué no lo hicieron?, esa pregunta no nos toca a nosotros responderla, sino a la propia Fiscalía General.
SNTE 27 y 53, como Batman y Superman
Batman y Superman son dos héroes que trabajan, cada quien, con su propio código, sin embargo, cuando tienen un enemigo en común que no puede derrotar cada quién por su lado, se alían para combatir a ese ente ruin que aqueja la paz.
Pues ayer, guardando las proporciones, se unieron la Sección de jubilados y pensionados del SNTE 27, y los integrantes del movimiento Somos Más que 53, pero ellos no formaron la Liga de la Justicia, formaron el movimiento “Somos más que 80”
Sí, es fácil el saber por qué el nombre, 27 más 53 igual a “Somos 80”, sencillito, pero a diferencia de Batman y Superman, que han combatido a villanos como Darkseid y otros extraterrestres, el enemigo de estas secciones sindicales fue el mismísimo Gobierno del Estado.
Los integrantes de la sección 27 buscan que el Gobierno Estatal les pague sus 65 días de aguinaldo, todo completito y de un sólo golpe, dado que actualmente se les pagan 40 días en diciembre y los otros 25 días se les paga en partes.
Por su parte, los integrantes de la sección 53 piden que no se reforme al Issstesin y que se le haga una auditoría de los últimos 20 años y que se paguen las gratificaciones de Cobaes como habían acordado.
Al unísono unieron sus fuerzas en la explanada del Palacio de Gobierno y gritaron consignas contra el líder de los villanos, en este caso, personificado por Quirino Ordaz Coppel, Gobernador del Estado.
“Que salga Quirino”, o “Quirino se esconde, se esconde y no responde”, eran los cánticos de guerra contra el mandamás del Estado.
La lucha aún no termina, el enemigo que no debería de serlo todavía no soluciona sus demandas, sin embargo, al estar estos dos frentes unidos, hay más posibilidades de que logren la victoria.
El premiado
El que anda como niño con juguete nuevo es el Alcalde de Mazatlán, Fernando Pucheta.
Resulta que los priistas le entregaron un “premio por su gestión”, y el se siente como si se hubiera sacado el Premio Nobel.
Ahora amenaza con imprimir la imagen de su premio en cualquier obra gestionada por su Gobierno.