Cuauhtémoc Celaya Corella
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Cuando el Presidente dice que tiene el apoyo empresarial porque comió con Slim, Bailleres y otros cupulares empresarios, ¿creerá él, que ellos son representantes genuinos del empresariado mexicano? Pues que engañado vive. Es como creer que Coppel, Vizcarra, Ley, Berdegué, Carranza, Elizondo y otros, representan al empresariado sinaloense. Para nada.
Los empresarios que sostienen la economía no son esos, porque ellos ante cualquier torbellino que presagie tormenta para sus patrimonios e inversiones, tienen buen recaudo donde refugiarse. Para quienes se pedían apoyos fiscales, no condonaciones, era para esa millonada de inversionistas de varios tamaños, que serán los que de no haber un cómo ayudarles, cerrarán sus inversiones durante y pasada la emergencia. Ahí es donde están los 10 millones de puestos de trabajo en peligro de perderse. ¿Por qué esa miopía del Presidente, Inge?, Sí, ya sé que no sabes la respuesta, pero ¿a quién se lo pregunto? Porque está muy clara su postura: no al empresariado en sus sugerencias, sí, a continuar empobreciendo la economía, hasta destruirla. Te lo comenté la charla anterior.
No importa que tan alta sea la inflación, que tan bajo caiga el peso, que tantos fallecimientos provoque la enfermedad, que tan deficiente sea el sistema de salud, si se regresa a la escuela o no, le da lo mismo, entre más rápido se concrete la ruina, él cree que se erigirá como el gran salvador y podrá levantar la ruina y volverla una transformación.
Lo describen muy bien los que saben de política, y expresan su opinión en prensa y medios, pero eso a él lo tiene sin cuidado. Se replegó a buen recaudo, las fuerzas armadas y quienes delinquen. ¿Y el pueblo? es solo una frase en su discurso. Quien lo crea, allá él.
Sin duda, está cercado por un grupo que no da la cara, pero que lo lleva de la mano a una realidad maniquea que ellos pretenden alcanzar. Unos dicen que vienen de Venezuela, otros que de la isla caribeña, otros más no lo saben. Pero si dicen que el Presidente obedece, y no para generar un gran país, y menos con las bases sociales actuales, que para él son corruptas aunque no pueda demostrarlo, ni tiene interés en hacerlo porque no tiene otros datos.
Decía un intelectual, Inge, se le fue la oportunidad de levantarse como el gran Presidente de este país. Reflexiono lo que me dice, y la verdad no se le fue nada, porque a él no le interesa ser un gran Presidente, por eso te pregunto. ¿Cuál realidad tiene en mente? Y te lo digo ahora, destruir lo existente y volver al México otra nación pobre, al nivel de las naciones atrasadas del planeta.
Proyectarlo como país emergente, que busca con sus jóvenes crear, innovar, competir, hacer valer sus talentos, descubrir nuevos representantes en todos los ámbitos, elevar el nivel de la educación, generar espacios para los adultos mayores de una vejez digna, asegurar el desarrollo de la clase trabajadora, elevar la eficiencia de sus empresarios, generar espacios de nueva inversión, alcanzar nuevos lugares en la búsqueda de horizontes más propios y darle al hombre y a la mujer mexicana lo que los conservadores y neoliberales no les dieron, no está en su agenda.
Le vale la historia, y el juicio que dicte sobre su sexenio. Sólo se ha burlado de todos y muchos de esos todos estarán dispuestos a rasgarse las vestiduras si el coronavirus lo alcanza. Por eso dice, yo soy inmune, y lo es porque no atrae nada, solo soberbia, ira y enojo que cubre con una frase: primero los pobres, todo lo demás tiene un cimiento corrupto y debe ser demolido.
Alguien subió una carta de un empresario a su trabajador y la tituló: Nos dejaron solos. Alguien más adelantó en la víspera de su informe dominical, un listado con ajustes en el gabinete. Suenan lógicos, pero no ahora, llegarán cuando la emergencia pase, no importa lo que dure, eso no le preocupa, porque irá viendo la caída de la economía y luego dirá, están cayendo los corruptos, los culpables de que no se alcance un mejor futuro, los que buscan impedir la transformación que veo.
Y en caso de que surja un líder opositor, tiene tres alternativas, el SAT si es empresario, las fuerzas del orden, si es conocido, o las que actúan al margen de la ley, si es necesario. Esa es la realidad que presenta en su visión. Y no le incomoda el vecino del norte, mientras finja sometimiento.
Escribió un articulista nacional una columna que llamó Mezquindad, denunciando las posiciones contrarias de la opinión pública. En referencia a videos de Derbez, y declaraciones de Thalía y el Chicharito. Bien pudo haber titulado su trabajo como Perversidad, toda vez que desde la tribuna matutina, es perverso en sus mensajes.
Por eso pregunté al inicio, tu opinión sobre la realidad que ve el Presidente, y te quedaste corto, Inge.