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"MALECÓN DE MAZATLÁN"

"Matan la cuarentena"

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MALECÓN
07/05/2020 07:22

    Los alcaldes de Culiacán y Mazatlán están a punto de echar a perder el enorme esfuerzo que se ha realizado en Sinaloa para mantener viva la cuarentena.

    Todo el trabajo de miles de personas que trabajan en el Sector Salud, del sacrificio de la ciudadanía, de los miles de comerciantes que han soportado pérdidas y de los trabajadores que han perdido sus empleos, puede perderse en las decisiones de dos alcaldes que lo único que buscan es dejar claro que también ellos pueden tomar decisiones.

    En Culiacán, el Alcalde Jesús Estrada Ferreiro anunció que los panteones abrirán hoy y mañana para recibir a las personas que no podrán ir a visitar las tumbas de sus familiares durante el 10 de mayo, día en que permanecerán cerrados los camposantos.

    En Mazatlán, el Alcalde Luis Guillermo “El Químico” Benítez Torres declaró que permitirá que abran los restaurantes el 10 de mayo, aunque limitó el servicio de los restaurantes al 40 por ciento.

    Las dos decisiones nos parecen sumamente desacertadas, tomando en cuenta lo que sucedió el pasado 30 de abril, cuando miles de personas abandonaron la cuarentena para festejar el Día del Niño.

    Todavía hay tiempo para recapacitar, pero por lo pronto el mensaje ya llegó a la ciudadanía y es muy claro: “Sí se puede romper la cuarentena, aunque nomás poquito”.

    Con estos alcaldes para qué queremos más problemas.


    Protesta en el puerto

    Los trabajadores de Aseo y Limpia de Mazatlán, los que se encargan de recoger y transportar los desechos del puerto a su depósito final, protestaron ayer frente al edificio del Ayuntamiento del puerto.

    Los inconformes solicitaron al Alcalde Luis Guillermo “El Químico” Benítez, lo que llamaron un “bono de seguridad”, para seguir realizando sus labores en plena Fase 3 de la contingencia sanitaria provocada por el Covid-19.

    Alegan que el trabajo que realizan es de suma importancia y se hace bajo condiciones de enormes riesgos de contraer el coronavirus, por lo que buscan ser compensados de alguna manera.

    Con tapabocas y manteniendo la sana distancia, los trabajadores realizaron una protesta muy organizada frente a las instalaciones del Ayuntamiento.

    Muchos pensarán que no es el momento ideal para realizar una protesta de esta naturaleza, pero la verdad es que los trabajadores tienen toda la razón.


    Mazatlán se dispara

    Durante todo abril, Mazatlán sorprendió con sus escasos números de fallecimientos y contagiados de Covid-19, incluso la ciudadanía comenzó a relajar la cuarentena, pero en los últimos días se dispararon los casos.

    De solo dos fallecimientos y solo 17 contagios durante las primeras semanas, el puerto pasó a cinco fallecidos hasta ayer y superó los 100 contagios, poniéndose por arriba del número de contagios en Ahome, y ocupando el segundo lugar en Sinaloa, solo después de Culiacán.

    Mazatlán había disfrutado de cifras bajas en materia de contagios, debido a las decisiones que se tomaron al inicio de la pandemia, el puerto cerró sus hoteles y los porteños se fueron a sus casas, pero desde la semana pasada comenzó a observarse que las calles volvían a poblarse.

    La Zona Dorada y los sitios turísticos de Mazatlán continúan desolados, pero el problema es en las colonias, donde la gente simplemente vive como si no hubiera pandemia.

    Y el problema no es solo en el puerto, las colonias populares de Culiacán, Ahome y otras ciudades presentan el mismo problema, las familias siguen viviendo como si no pasara nada, con el pretexto de las necesidades cotidianas.


    Cancelación del Tianguis

    La palabra cancelación no les gusta a nuestros funcionarios, siempre que un evento se cancela por el Covid-19 aseguran que se “pospondrá”, para tal o cual fecha, pero finalmente es un evento que ya no se hizo.

    Y esto acaba de pasar con el Tianguis Turístico que se iba a realizar en Mérida, Yucatán, una terrible noticia para el mundo del turismo mexicano, ya de por sí golpeado por la crisis sanitaria.


    Los números que no cuadran

    Lo que está pasando con el precio del maíz está de risa, aunque a los productores no les haga mucha gracia, pero por lo menos demuestra la inexperiencia de los funcionarios federales.

    Resulta que el Gobierno federal les garantizó que les pagarían 4 mil 150 pesos por tonelada de maíz, un precio que garantizaba una buena temporada.

    Los funcionarios federales, representados por Seguridad Alimentaria Mexicana, la dependencia creada por la 4T, llegaron a ese precio de una manera muy sencilla, hace unos meses.

    Fueron y revisaron el precio internacional de la tonelada de maíz y le sumaron un subsidio para llegar a los 4 mil 150 pesos y consiguieron que el Presidente Andrés Manuel López Obrador se los autorizara.

    Lo que nunca imaginaron estos genios es que a la hora de pagar a los productores el precio por tonelada iba a bajar, y ahora con todo y la suma del subsidio, pues resulta que el precio queda por debajo de lo prometido.

    Los agricultores no le dan muchas vueltas al asunto, ellos quieren que el Gobierno federal asuma la pifia y aumente el subsidio, para que les lleguen los 4 mil 150 pesos prometidos.

    Pero si algo hemos aprendido con la 4T es que el dinero no les sobra, a menos de que sea para sus proyectos, así que vamos a ver si los agricultores reciben lo prometido.


    El virus viaja a Brasil

    Después de China, el epicentro de la propagación del Covid-19 se trasladó a Europa y de ahí pasó a Estados Unidos, donde los contagios superaron el millón de personas, pero hoy el epicentro de la pandemia viaja a América Latina.
    Con una enorme población de 209 millones de habitantes, Brasil podría convertirse rápidamente en el nuevo centro del desastre, después de que Estados Unidos comienza a salir del pico de la crisis.

    El problema de Brasil es la enorme desigualdad entre sus estados, con un sur rico y un norte en la miseria, además de enormes regiones cubiertas por las selvas amazónicas.

    El desastre podría ensañarse con las poblaciones indígenas, en total indefensión frente al virus y con un sistema de salud muy endeble.