Varios malovistas empezaron a asomar la cabeza desde el jueves 27 de julio, día en que el PRI, con apoyo del PAS y partidos satélites, decretaron el “perdón político” para el ex Gobernador, Mario López Valdez.
De inmediato, Gerardo Vargas Landeros, ex Secretario General de Gobierno y operador político de López Valdez, reanudó sus invitaciones a través de WhatsApp, para que “lo visiten” en sus redes.
Quienes saben leer los mensajes del poder y frases célebres como la magistral “en política la forma es fondo”, atribuida a don Jesús Reyes Heroles, ideólogo del PRI (¡Qué tiempos!), ven en la aprobación de los cuestionados estados financieros de fin de sexenio un triunfo de los malovistas.
Incluso hay quienes empiezan a promover de nuevo la figura del “trébol”, que identifica a Vargas Landeros, con la mira puesta en el Senado por el 2018 y la Gubernatura en 2021, como le hemos comentado en otras ocasiones.
De hecho, desde las negociaciones en pos de la definición de la candidatura del PRI a la Gubernatura en 2016, se especuló del acuerdo de Malova, de hacerse a un lado, a cambio de que Vargas Landeros compitiera por un escaño el próximo año.
La versión del pacto Quirino-Malova parece confirmarse con la “luz verde” que salió de la 62 Legislatura, al margen de que se quiera enredar a la sociedad con argumentos técnicos, o salidas “políticas”, de que ahora las denuncias penales y administrativas por desvíos e irregularidades están en la cancha de la Fiscalía y de la ASE. ¿En serio?
Ya hay quienes incluso hacen apuestas de que la fórmula para el Senado, por el PRI, satélites, e incluso PAS, llevará los nombres de Gerardo Vargas Landeros y Héctor Melesio Cuén Ojeda.
Aunque habría que revisar lo que indica la equidad de género.
Por cierto, llamó la atención también que entre los hombres del malovismo, una de las áreas menos cuestionadas por los reportes de la Auditoría fue precisamente la que encabezó Vargas Landeros.
¿De dónde habrá salido tanto dinero para sus tréboles?
Elisa, de todo un poco
Otra que reapareció estos días fue la ex vocera de Mario López Valdés, Elisa Pérez Garmendia, quien estuvo al frente de la Coordinación de Comunicación Social en el sexenio pasado.
A principios de año, Elisa apareció como flamante “investigadora de tiempo completo” en su “alma máter”, la Universidad de Occidente.
La situación inconformó a más de un docente en la UdeO, que dirigió Guillermo Aarón Sánchez, cuestionado por presuntos manejos de recursos públicos. Pese a ello, la Auditoría Superior del Estado no revisó sus cuentas.
El caso es que ante el temor de una rebelión de maestros que llevan más de una década esperando no tiempos completos, sino medios tiempos y algunos más horas base, la nueva Rectora Silvia Paz Díaz Camacho ordenó investigar la plaza “fast track” que se adjudicó a la ex vocera malovista.
Ahora, tras la aprobación de la cuenta de su jefe político, Pérez Garmendia ha anunciado su nueva faceta: de vocera, a fallida académica e investigadora, nos anuncia en su cuenta de Facebook que lo suyo, lo suyo, es el ramo empresarial.
Y con bombo y platillo anuncia que el próximo mes echará a andar una cadena de restaurantes en Culiacán.
Por cierto, en la última cuenta pública del segundo semestre de 2016 aparecieron datos interesantes, vinculados a la gestión de doña Elisa.
La Auditoría estatal detectó pagos por casi 170 millones de pesos, en el rubro de difusión, que hasta el momento no habían sido aclarados.
Quién sabe si ahora que anda tan ocupada en su nuevos proyectos empresariales, Pérez Garmendia ya se dio un tiempecito para aclarar las dudas.
¿Y el ex tesorero?
El que no usa redes sociales es don Armando Villarreal Ibarra, el ex Tesorero estatal.
Aunque nos dicen que el hombre que manejó los dineros públicos del sexenio pasado, brazo financiero de Mario López Valdez, es uno de los más contentos con la exoneración tricolor.
Por cierto, ha trascendido que mientras don Armando “se quebraba” la cabeza a fines del sexenio para ver de dónde sacaba dinero para el pago de médicos, maestros y contratistas, en Culiacán supervisaba el nacimiento de un nuevo eslabón empresarial, dedicado a la venta de muebles de oficina, giro en el que creció en Los Mochis.
Le agarró taaanto amor a los culichis, nos cuentan, que decidió expandir sus negocios al centro del Estado.
Lo dicho, no hay mejor lugar para crecer como empresario... que el Gobierno estatal.
Ahí viene ‘El Peje’
Los resultados de una supuesta encuesta realizada por Presidencia nacional y ventaneada por SinEmbargo muestran la fuerza de Andrés Manuel López Obrador.
El líder de Morena le ganaría en estos momentos la silla presidencial a cualquier candidato, de cualquier partido.
No tardan en brotar los “neopejistas” por todos lados.
