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"ÉTHOS"

"La frustración existencial"

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    rfonseca@noroeste.com
    @rodolfodiazf

     

    Fuimos creados para amar, pero en ocasiones no encontramos el sentido total de nuestra vida. Esta vacuidad existencial, como asentó Víctor Frankl, es patógena y provoca multitud de enfermedades psíquicas.

    En su libro Ante el vacío existencial, Frankl recordó las palabras de Harvey Cushing, el mayor especialista en cirugía cerebral de todos los tiempos: “Sólo existe una manera de hacer frente a la vida: tener siempre una tarea que cumplir”.

    Quien no encuentra sentido a su vida se fastidia, frustra y aburre. Por eso intenta llenar el “horro vacui” con un incesante activismo. “Cuanto más desconoce el hombre el objetivo de su vida, más trepidante ritmo da a esta vida”, sentenció el logoterapeuta vienés.

    Añadió que es necesario encontrar también el sentido del sufrimiento para conceder valor a la vida: “Dicho de otra forma: cuando ya no existe ninguna posibilidad de cambiar el destino, entonces es necesario salir al encuentro de este destino con la actitud acertada”.

    Sin embargo, hay personas a quienes se hace difícil vencer el sin sentido y la frustración, como escribió la poeta Alejandra Pizarnik, quien se suicidó el 25 de septiembre de 1972:

    “No hay elección posible. Ni esperanza alguna. Así va la vida. Un enorme llanto. Una bestial sinfonía de frustraciones… El invierno me sume en mí misma, ya soy un caracol cerrado.

    “Y qué es lo que vas a decir/ voy a decir solamente algo/ y qué es lo que vas a hacer/ voy a ocultarme en el lenguaje/ y por qué/ tengo miedo. La muerte siempre al lado./ Escucho su decir./ Sólo me oigo/… Alguna vez/ alguna vez/ me iré sin quedarme/ me iré como quien se va/… No quiero ir/ nada más/ que hasta el fondo”.

    ¿Encuentro sentido a mi vida? ¿Derroto a la frustración existencial?