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"MALECÓN DE MAZATLÁN"

"La cruda realidad"

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MALECÓN
16/07/2020

    La “nueva normalidad” es un verdadero desastre en el sector turístico, por más buena cara que quieran ponerle hoteleros y turisteros. La cruda realidad es que no hay turismo suficiente para sacar adelante a todos.

    Fuera de un par de hoteles que pueden presumir de buena ocupación, la mayoría de los hoteles apenas ha conseguido un 40 por ciento de ocupación y en algunos casos apenas el 30 por ciento.
    Y lo peor es que los pocos turistas que llegan al puerto, lo hacen ¡sin dinero!.
    La situación es tan difícil que un hotelero hacía un chiste y se comparaba con don Manolo, el papá de Manolito, en Mafalda. Asegurando que ahora está detrás de la caja con la esperanza de que llegue un peso.
    El caso es que ya no se trata de ganar algo este año, eso ya lo dieron por perdido, ahora se trata de ver quién sobrevive para el próximo año.
    Imagínense el tamaño de la bronca, hoteleros de Mazatlán preguntándose si el año que entra van a estar abiertos.
    Hace un año eso podría parecer una locura, con el puerto a la alza, repleto de eventos y de edificios nuevos por todos lados.
    Una de las razones que los hoteleros esgrimen, como parte del daño a sus negocios, es la renta de casas y departamentos a los vacacionistas, sin que sus dueños paguen ningún tipo de impuesto, creando una competencia completamente desleal.
    Por lo pronto, los hoteleros se han puesto manos a la obra y la mayoría cuenta con descuentos y promociones para atraer a los turistas, pero el panorama sigue siendo muy oscuro, sobre todo si desde el Gobierno se sigue hablando de la posibilidad de regresar a una cuarentena.

     

    La comisión de hierro

    Sin tregua va la Comisión de Fiscalización en el Congreso contra entes estatales y municipales, después de haber reprobado las cuentas públicas de ocho municipios. Llegaron con todo a darle para atrás a estos entes, que además, ya habían sido aprobados por la Auditoría Superior del Estado.
    Y es que en todo este rollo hay una confusión sobre quién dirá la última palabra en la aprobación o rechazo de las cuentas públicas.
    En Sinaloa, la ASE tiene facultades que no las tiene ni Obama, es decir, es la única que manda las auditorías con un sentido aprobatorio o reprobatorio, así es, ni la Auditoría Superior de la Federación hace eso.
    Pero con todo y los superpoderes no han hecho que la Comisión dictaminadora del Legislativo se ponga de su lado.
    Los diputados sacan a relucir hasta las adjudicaciones directas y los montos extraviados de cada una.
    Nadie asegura que se vaya a resarcir el daño o que el dinero aparezca de la nada después de los sainetes en el Congreso, pero el escándalo por lo menos nos asegura que más de un funcionario, funcionaria o ente, lo piense antes de utilizar mal los recursos públicos.
    Si se reprueban las cuentas de nuevo, se cumplirían dos años seguidos de rechazo, a ver si así aprenden la lección.
    Y de paso se rechazó la aprobación de los informes de la Comisión Estatal de Agua Potable y Alcantarillado de Sinaloa, Colegio de Bachilleres del Estado de Sinaloa, Colegio de Educación Profesional Técnica del Estado de Sinaloa del Instituto Sinaloense de Cultura y las del Instituto Sinaloense.
    Además del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores de la Educación del Estado de Sinaloa, también del Instituto Electoral del Estado de Sinaloa
    Y el rechazo alcanzó a las universidades Autónoma de Occidente y Autónoma de Sinaloa.
    Y en el caso de los municipios, parece que no podían faltar, las juntas municipales de Agua Potable Culiacán, de Ahome, de Guasave y de Mazatlán.
    El problema de seguir rechazando todas las cuentas es que van a terminar perdiendo credibilidad. A no ser que nadie sea capaz de entregar sus cuentas de manera ordenada, aunque sea por puritita casualidad.

     

    Toma y daca...

    Ha sido más largo el jaloneo del Ejecutivo y el Legislativo por el nombramiento de la directora del Instituto Sinaloense de las Mujeres que la cuarentena en México.
    Desde mediados de febrero inició con el intento del Gobernador Quirino Ordaz Coppel para que Aracely Tirado Gálvez fuera ratificada, ese fue el primer round. Tras una tórrida discusión en el recinto legislativo la respuesta fue “no”.
    Después se lanzó una convocatoria, se anotaron 20 mujeres, muchas destacadas activistas y con una trayectoria intachable en sus andanzas en defensa de la causa de las mujeres, pero la elegida por el Gobernador Quirino Ordaz fue una aviadora de la Secretaría de Educación Pública y Cultura, y comunicadora Eva Guerrero, lo que encendió nuevamente el Congreso del Estado.
    El jaloneo sigue, el proceso está atorado en un bucle en el que le dan para atrás al dictamen pero no lo descartan por completo, mientras tanto el gobierno del estado ya se lavó las manos y Tirado Gálvez sigue en el despacho del Ismujeres.

     

    El misterio de Chapman

    El Alcalde de Ahome, Manuel Guillermo “Billy” Chapman, reveló que Topolobampo está en la mira de fuertes inversionistas estadounidenses.
    El problema es que hasta ahí se quedó el Mandatario y se negó a dar mucha información sobre el posible proyecto.
    Chapman dejó ver que se trata de una empresa del giro ferroviario y que está interesada en realizar una inversión millonaria, pero ya no dijo más.
    La inversión en el puerto de Ahome tiene mucha lógica, en los últimos años, Topolobampo se ha ido posicionando como uno de los puntos estratégicos de Sinaloa para hacer negocio y no tarda en convertirse en un polo de desarrollo de enormes proporciones.
    Lo que llama la atención es que el anuncio no lo haya hecho el Secretario de Economía, Javier Lizárraga, o hasta el propio Gobernador, Quirino Ordaz Coppel.
    Generalmente este tipo de noticias se dan a conocer después de meses de negociaciones y ya con los pelos de la burra en la mano, esperemos que no se haya emocionado Chapman por una simple visita de inspección, por parte de los empresarios.
    Si algo hace falta en estos momentos en Sinaloa son inversiones de gran calado, ojalá que el anuncio se convierta en realidad.