Vaya “ejemplo” que dieron ayer los diputados de la 62 Legislatura a cientos de sinaloenses que acudieron a acompañar a los cinco jóvenes galardonados con el Premio al Mérito Juvenil 2017.
Resulta que la sesión solemne, en la cual se rinden honores a la bandera y se invita a la “casa del pueblo” a representantes de los otros poderes, empezó con ¡45 minutos de retraso!
Quienes acuden usualmente a las sesiones podrán percatarse que a los diputados nomás no se les da la puntualidad. Aun cuando les cambien seguido los relojes en el recinto, que cada vez son de tamaño más grande.
Pero ni así voltean a ver la marcación electrónica.
Pero ayer, como dirán los jóvenes, ¡se volaron la barda!
Formales y puntuales, los cinco galardonados, con sus familiares, amigos y porras, empezaron a llenar el recinto desde antes de las 11:00 horas.
La tardanza de 45 minutos obligó que muchas personas, incluso algunas personalidades del sector público, salieran del recinto mucho antes de que concluyera el acto, en el cual se rindió homenaje a las víctimas caídas en los temblores del 19 de septiembre.
Y de paso, el Diputado de Morena, Jesús Rendón, recordó a los 43 jóvenes desaparecidos de Ayotzinapa.
Pero siguiendo con expresiones juveniles y coloquiales, ojalá que algún día a nuestros diputados locales “les caiga el 20” y entiendan que también la puntualidad es un sello distintivo de la responsabilidad y la excelencia y que su ejemplo “educa” al resto de los ciudadanos.
¿Será mucho pedir?
La simulación
¿Cómo es posible que un trabajador acusado de cometer faltas en sus responsabilidades, como funcionario del Gobierno del Estado, pueda ser sancionado con 30 días de “vacaciones” sin goce de sueldo y regresar tan campante a ocupar su lugar en la misma oficina?
El caso de Rafael Lizárraga Favela, subsecretario de Operación y Promoción Turística de la Secretaría de Turismo del Gobierno del Estado, podría ser el ejemplo de cómo el Gobierno de Quirino Ordaz Coppel tratará estos temas.
Nos gustaría saber si Ordaz Coppel, en el tiempo que lleva como empresario, ha mantenido a algún empleado que luego de algún tiempo de emplearlo, éste haya sido acusado de cometer faltas, y con la mano en la cintura, y ciega fe, lo pueda retener en sus empresas.
Nos llama la atención porque la mayoría de las ocasiones, cuando un funcionario ha tenido que pasar por un proceso administrativo, o incluso penal, regresa y luego luego la justificación para devolverle su lugar en la burocracia es “un juez determinó que era inocente”.
Si regresa Lizárraga Favela será esta acción un acto de mera simulación.
Para que regresen el dinero, a los otros funcionarios sancionados, de más bajo perfil, se les otorgarán créditos fiscales que podrán saldarlos conforme a sus posibilidades.
Si esto no es motivar a los irresponsables, no sabemos de qué otra manera llamarlo.
Algo traman,
algo traman
Cuando vimos que el Partido Revolución Institucional dijo que regresaría 258 millones de la partida que le proporcionará el Instituto Nacional Electoral del 2017, para destinarlos a los damnificados de los terremotos del 7 y el 19 de septiembre, uno diría: qué lindos, qué bonitos, pero uno termina que algo traman.
Y es que ante la mayoría, el PRI es el cáncer de la corrupción,el villano favorito, el Alpha y el Omega de las desgracias mexicanas, desde Plutarco Elías Calles hasta Enrique Peña Nieto, el PRI ha sido el dolor de cabeza de los intelectuales de México.
Por eso cuando sale el PRI y dice que se desprenderá de 258 millones de pesos uno piensa ¿achis, achis? ¿será verdad? mostraron empatía por un país que clama igualdad y que no se malgaste el dinero; ¿o todo será mera política electorera?
Una publicidad basándose en el dolor que dejaron los temblores en el centro y sur del país.
Eso no lo sabemos, lo que sí es que esos 258 millones que iban a irse a spots, a los medios de comunicación, ahora al menos irán para quien más lo necesita, ya después veremos el motivo de su bondad electorera o si en verdad algo traman.
Comienza
la rebatinga
La recolección, transporte y distribución de los donativos para los damnificados de los terremotos ya comenzó a hacer agua.
Videos, testimonios y denuncias comienzan a pintar un cuadro donde la corrupción y el desorden campea, pero lo que más se repite es la desconfianza en las autoridades, ni siquiera entre ellos se tienen confianza.
No hay concentración popular donde no se insulte a los políticos, hasta el Presidente Enrique Peña Nieto ha salido abucheado y eso que viaja con su corte de aduladores.
Poco ha faltado para que se de un enfrentamiento y las quejas comienzan a aflorar por todos lados.
Si algo explota se lo tendremos que adjudicar a la escasa confianza que inspiran nuestros políticos.
