"Cytotron: la nueva adquisición millonaria del Estado que no sirve"

alberto.kousuke@uas.edu.mx

De acuerdo con una nota publicada el mes pasado en Línea Directa, el legislador Alfredo Villegas reveló que el Estado se prepara para la compra de un dispositivo llamado “Cytotron”, un equipo creado por el científico de la India Vijay Kumar. De acuerdo con el Diputado federal, el pasado 13 de noviembre fue certificado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (la FDA, por sus siglas en inglés) para el tratamiento del cáncer.

El legislador federal por el PRI mencionó que están trabajando en el vínculo profesional para adquirir el equipo para todos los hospitales públicos del país para atacar este mal (cáncer), por lo cual viajará con una comisión de diputados y de médicos a Bangalore, en la República de la India.

“El señor Gobernador y su señora esposa Rosy determinaron que el primer aparato que logremos adquirir sea para Sinaloa como un interés de parte de él y de los diputados y los médicos que vamos a ir a Bangalore”, expresó.

Hablemos de los hechos.

El cáncer es un grupo de enfermedades en donde existe un crecimiento descontrolado de células anormales, las cuales pueden invadir o diseminarse a otras partes del cuerpo.

El tratamiento se basa en la eliminación de estas células anómalas que crecen sin control. Usualmente, se utiliza una combinación de cirugía, quimioterapia, y/o radioterapia, dependiendo del tipo y extensión del cáncer.

A pesar de los grandes avances médicos y tecnológicos, aún no ganamos la batalla contra el cáncer. Debido a esto, muchos pacientes buscan desesperadamente alternativas para la cura de su padecimiento, lamentablemente, muchas veces terminan siendo presas de charlatanes inescrupulosos como el Dr. Kumar.

Rajah Vijay Kumar es la mente maestra detrás del Cytotron, así como de otros aparatos milagrosos (Haemoseis 256, FORN, SPARSE, FIT, TMDR, AQUARIA, AQUATRON).

El Cytotron es un dispositivo de “Resonancia Magnética Nuclear Cuántica de Campo Rotacional”. Kumar afirma que este dispositivo es “una máquina con 864 pistolas, con antenas de campo cercano y sistema de entrega de reflector parabólico. El dispositivo es capaz de producir una amplia gama de dosimetría, que implica múltiples modulaciones en dosimetría de densidad de protones fija y variable. Las señales de radiofrecuencia multi-armónicas moduladas adecuadamente en el extremo inferior del espectro electromagnético se pueden usar para alterar el proceso de señalización celular, por lo que pueden abordar los trastornos sistémicos”.

¿Qué significa esto? Absolutamente nada. Es meramente un trabalenguas de términos pseudocientíficos diseñado para confundir a los pacientes. Cabe mencionar que esto no tiene ninguna base científica, no se menciona en ningún artículo científico, ni es prescrito por ningún oncólogo.

Con respecto a su aprobación por la FDA, esta es una verdad a medias. El Cytotron solamente fue admitido por la FDA para su uso en protocolos, es decir, para determinar si tiene un efecto. En ningún momento ha sido autorizado para el tratamiento de pacientes con cáncer ni ningún otro tipo de padecimiento.

La adquisición del Cytotron es una muestra más de que “aquel que no conoce su historia está condenado a repetirla”. Así como con el Cytotron, hace algunos años la Sedena adquirió 739 pistolas moleculares GT-200 por el módico precio de 211 millones de pesos. Este aparato prometía detectar armas, drogas (más de 300 sustancias), cadáveres (sobre y bajo la tierra, sumergidos en el agua, e incluso en aviones y helicópteros en vuelo).

Estos aparatos se adquirieron a pesar de que el Gobierno Británico advirtiera sobre su ineficacia a raíz de un reportaje emitido en enero de 2010 en la BBC, en el que académicos y científicos demostraron el fraude del detector, usado también en Afganistán e Iraq.

Hace más de 10 años que el Cytotron y la Resonancia Magnética Nuclear Cuántica de Campo Rotacional fueron declarados como inefectivos (http://www.inahta.org/upload/Briefs_10/09091_MaHTAS_Cytotron.pdf).

Esperemos que el Diputado Alfredo Villegas y el Poder Ejecutivo estatal reconsideren la adquisición de esta máquina absurda y utilicen ese dinero para causas bien fundamentadas y no para ocurrencias.

Utilizar esta “terapia” en niños con cáncer resulta igual de infame que inyectarles agua en lugar de quimioterapia.