Andrés Manuel López Obrador acaba de realizar una jugada en el tablero de 2018. Y le salió bien.
El “Peje” va sumando de a poco figuras locales que le sumen puntos o hagan contrapeso a los negativos que él solo se crea, con el objetivo de atraer votos.
Para el caso de Sinaloa, se sumaron al proyecto del único aspirante de Morena a la candidatura a la Presidencia de la República, Rubén Rocha Moya; María Teresa Guerra; el cantante Julio Preciado; la ex lideresa del PRD, Imelda Castro, y el cineasta Óscar Blancarte.
Sin duda, la adhesión que más llama la atención es la de Rocha, ex Rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa y candidato del PRD a la Gubernatura de Sinaloa, con quien el sol azteca alcanzó su máximo histórico de votos obtenidos. De ahí en adelante es un camino hacia la extinción.
Rocha es un personaje al que se le critica haber abandonado su trayectoria de izquierda para integrarse al Gabinete de Jesús Aguilar Padilla como coordinador de asesores.
No sólo eso, prácticamente se refugió en el aguilarismo durante el Gobierno de Mario López Valdez y regresó a Sinaloa, para el mismo cargo, con el actual Mandatario, Quirino Ordaz Coppel.
Sin embargo, algo habrá hecho bien para mantener cierto respeto del sector intelectual y periodístico sinaloense, mismo respeto que le abonaba a Ordaz Coppel. Digamos, le hacía el “paro”, como decimos.
Ahora, esa credibilidad se la dará a AMLO. Ya veremos si el López Obrador no la quema al arranque de campaña.
¿Y Quirino?
Quizá Quirino Ordaz Coppel ni vaya a sentir la ausencia de su coordinador de asesores. Es regla que los gobernadores no hacen caso a los asesores.
¿Pues cómo? Si son los superhombres que todo lo saben.
En el breve camino del actual Gobernador se le han visto disparates y desaciertos que cualquier asesor le advertiría que no cometiera.
Y ha sido claro que Quirino no escucha consejos. Quizá sólo los de Joel Hernández Niño, al que frecuentemente se le ve cerca.
Otra pista: la constante queja de los reporteros de que el Gobernador no da nota.
En entrevistas siempre dice lo mismo en un discurso desarticulado.
Por eso no extraña que los sinaloenses vean un Sinaloa estancado y en retroceso, según la encuesta reciente del Gabinete de Comunicación Estratégica.
Otro lunes
Hoy se cumplen 16 lunes del asesinato del colega Javier Valdez.
Con ello también se cumplen 16 lunes de impunidad.
Ni la Fiscalía General del Estado ni la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos contra la Libertad de Expresión de la PGR dan señales de que los responsables intelectuales y materiales vayan a ir a tribunales.
Golpe a la cultura
El Alcalde de Mazatlán Fernando Pucheta acaba de asestarle un duro golpe a la Cultura mazatleca, al ordenar que el Instituto de Cultura pague los honorarios que va a cobrar la cantante Lupita D´Alessio, por presentarse en la Plazuela República, la noche del 15 de septiembre.
Para dimensionar el daño al proyecto cultural de Mazatlán, solo plantearemos un ejemplo de lo que significan un millón 300 mil pesos (costo del espectáculo de Lupita D´Alessio).
El promedio del costo anual de la muestra de teatro Escena Mazatlán es de alrededor de 350 mil pesos, de tal manera que con el dinero que se pagaría a la cantante se pueden realizar casi cuatro muestras de teatro, a lo largo de cuatro años.
Los beneficios de Escena Mazatlán son complejos y difíciles de cuantificar, pero basta con decir que acercan a mazatlecos al arte y permite que los grupos de teatro y los actores locales comparen su trabajo con compañías e histriones profesionales de otras latitudes.
Ademas les ha permitido ampliar sus conocimientos y mejorar sus técnicas de actuación y dirección a través de los talleres que los directores, actores y dramaturgos imparten durante su visita al puerto.
Sin embargo, esfuerzos culturales como estos !no dan votos!
El origen de la polémica
La discusión sobre el costo de traer a Lupita D’Alessio comenzó porque voces del Ayuntamiento habían aclarado que el evento lo iba a pagar Gobierno del Estado, pero Quirino Ordaz Coppel ya trae su propia bronca al anunciar que contratará a Lucero para su grito, así que salieron a desmentir al personal de la Presidencia Municipal de Mazatlán y dijeron que no, que lo pagaran ellos.
La mayoría de los proyectos culturales mazatlecos, algunos de ellos de excelencia internacional, como el curso de perfeccionamiento vocal del maestro Enrique Patrón, la escuela de danza contemporánea de Claudia Lavista y Víctor Ruiz, la Escuela de Ballet y la Escuela de Música sobreviven a una constante sangría, debido a la falta de recursos.
Quitarle presupuesto a un proyecto cultural de más de 30 años va en detrimento de la sociedad mazatleca, ese es el nivel de frivolidad que permea al Ayuntamiento de Mazatlán.