|
"MALECÓN DE CULIACÁN"

"Relajados"

""
MALECÓN
08/01/2021

    Entre más pasan los meses, las autoridades, ciudadanía y establecimientos comerciales se han relajado ante la pandemia.

    Si uno camina por el Centro de Culiacán, Mazatlán o Los Mochis es la misma historia: donde quiera usted se puede topar con infinidad de restaurantes, comercios y demás establecimientos a reventar.

    Por supuesto que a la entrada de cada uno hay un tapete sanitizante seco que a algún trabajador se le olvidó volver a llenar de cloro o alcohol.

    O con un empleado que hace cómo que toma la temperatura, pero ya ni siquiera acciona la falsa pistola láser. O ya se les descompusieron y nadie quiere volver a comprarlas o simplemente ya a nadie le importa la temperatura del prójimo.

    Y la autoridad ni sus luces, cuando al principio hasta el primer cuadro de la ciudad se cerró para evitar aglomeraciones.

     

    Y los contagios continúan

    Según la Secretaría de Salud estatal, desde mediados de diciembre los casos activos de Covid-19 se han mantenido por arriba de los 400 en todo Sinaloa.

    Los números nos dicen que la pandemia todavía no se termina, y si bien hay que aprender a vivir con ella, pero parece que la gente la desafía sin temor a contagiarse.

    Se nos olvida que al menos en los tres últimos días esta semana en el país se han reportado más de mil muertos cada día.

    Si con esas cifras no agarramos la onda, se nos puede venir una situación más complicada que la del principio de la pandemia.

    Sí, está la vacuna en la puerta pero como dijera el Gobernador Quirino Ordaz Coppel, hay que dar un estirón más y a extremar cuidados.

    Recuerden que ya perdimos el color amarillo y andamos navegando en el color naranja, apemas a un pasito de pintarnos de rojo, y la verdad es que ya nadie quiere volver a encerrarse y a padecer otra cuarentena.

    Mejor vamos a cuidarnos respetando los protocolos necesarios. Desde aquí les pedimos a los comerciantes que refuercen las medidas sanitarias. que a esto todavía le falta mucho.

     

    El juego de la carreta

    Las y los morenistas se están viendo muy ambiciosos, o como también podríamos decir, muy largos y largas, pues no dan paso sin huarache.

    Antes de ir por el siguiente cargo, que es al que realmente aspiran, aseguraron quedar en el pre registro para reelegirse en una diputación federal.

    Así es, en lo que sale la convocatoria para que se apunten a las alcaldías, diputaciones y otros puestos, las y los integrantes de la coalición Juntos Haremos Historia ya hicieron su proceso protocolario para apartar su curul en la Cámara de Diputados.

    Un ejemplo de ello es la coordinadora de la fracción sinaloense de Morena en la Cámara de Diputados, Yadira Santiago Marcos, quien participó en el proceso a la Gubernatura e incluso se presume que podría estar en la encuesta que a nadie le consta que se realizó.

    Ella misma manifestó, desde un principio, que quiere ser Alcaldesa de Culiacán, que es su principal intención por el momento, pero también envió su carta a los Reyes Magos para que, de no estar en ninguna de estas posiciones, se le contemple para seguir de Diputada federal.

    Este es solo un ejemplo, pues entre las y los legisladores locales también hay cada caso de personas que ya andan bien encampañadas y pagando publicidad, brincandose todas las trancas, pero en el discurso son de esas que dicen que prefieren esperar los tiempos y las formas.

    Como dice el dicho, al paso de la carreta se acomodan las calabazas y muchos se hicieron de varias por si alguna se cae en el camino.

     

    Cifras de miedo

    El tema de las muertes relacionadas con los accidentes automovilísticos nuevamente destacan al final del año en Culiacán.

    Ayer, el director de Tránsito Municipal de Culiacán, Pánfilo Díaz Juárez, dio los números completos y sin casi 100 los fallecimientos ocurridos en todo el 2020.

    El corte, según el funcionario es de 93 muertes, 19 más que las 74 ocurridas durante el 2019.

    Números muy altos para una ciudad como Culiacán, aunque por lo que dice Díaz Juárez el problema se agrava a fin de año con la llegada de visitantes de otras partes del estado, del país y del mundo.

    El gran problema, además de la evidente responsabilidad de quienes cometen los errores y con ellos los accidentes mortales, es que no existe una estrategia de la autoridad que se verdad haga una diferencia o encuentre una solución.

    Todo se reduce a puestos de control de los que los infractores se “safan” con 200 pesos.

    Ni los retenes han logrado reducir los accidentes, ni los conductores hemos aprendido a conducir de manera más segura.

     

    ¿Y el Secretario de Educación?

    Juan Alfonso Mejía López anda muy calladito, si bien es cierto que todos necesitan vacaciones, por ahí anda el rumor que las está aprovechando para trabajar en su campaña como Gobernador del Estado de Sinaloa.

    Aunque él diga que no, pero con esto de la Alianza Va por Sinaloa que combina al PRI, PAN y PRD, Mejía se sigue percibiendo como el único candidato factible para la contienda electoral para Gobernador.

    Se formó en el PAN, pero los priístas lo han apapachado desde que el Gobernador Quirino Ordaz Coppel lo añadió a su gabinete.

    Que no se le olvide al Secretario que actualmente es funcionario público, que las clases ya empezaron en algunos bachilleratos y están próximas a empezar para educación básica, y que atender la educación en Sinaloa debe ser su prioridad.

    No se vaya a quedar como el perro de las dos tortas, o como el Alcalde de Mazatlán, Luis Guillermo “El Químico” Benítez, que ya se soñaba Gobernador y ahorita no sabe si lo van a dejar competir por la reelección a la Alcaldía.

     

    El miedo no anda en burro

    El que sintió la lumbre en los aparejos fue el Presidente de EU, Donald Trump, después del desastre ocasionado por su intentona de impedir que Joe Biden fuera ratificado como ganador del proceso electoral.

    Después de provocar el caos en el capitolio, Trump salió a condenar la violencia y a prometer que va a cooperar para conseguir una transición pacífica.

    ¿No que no?