Hoy por ahí del mediodía arriba a tierras sinaloenses, de nuevo, el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Vendrá desde Valle de Guadalupe, Jalisco, donde a las 13:00 horas inaugurará el acueducto El Salto-Calderón de la presa El Zapotillo.

Llegará al sur de Sinaloa y lo más seguro es que llegue al aeropuerto de Mazatlán después de las 14:00 horas. Lo más probable es que el Gobernador Rubén Rocha Moya lo reciba en el aeropuerto de Mazatlán y hasta lo lleve a comer mariscos de pasada en la Sindicatura de Villa Unión.

Luego emprenderá camino, específicamente al municipio de Concordia, donde a las 16:00 horas inaugurará el acueducto Concordia que viene de la Presa Picachos.

Por supuesto que pasará la noche en la zona turística mazatleca, como suele hacerlo cuando anda por la región, en el hotel de su amigo de muchas décadas, el fallecido empresario, don Julio Berdegué.

Y el sábado a las 10:30 horas estará en el paseo costero, para desde el asta bandera gigante que mira al Océano Pacífico, en la Glorieta Sánchez Taboada, rendir tributo al lábaro patrio en su día.

En sus visitas a los estados, el Presidente no suele dar declaraciones importantes ni hacer anuncios de algo que no se sepa ya.

De hecho, poca información sustanciosa surge de este tipo de giras.

A ver de qué humor llega el Primer Mandatario en un contexto preelectoral fuerte en el País, y con el tema de la investigación del Gobierno gringo sobre el posible financiamiento turbio que habría tenido su campaña electoral.

Veremos.

Como pudo leer ayer, la Auditoría Superior del Estado, ASE, incluyó en su plan anual de auditorías al águila suprema, la Universidad Autónoma de Sinaloa, es decir, que intentarán revisar cómo manejaron el recurso estatal y propio durante 2023.

Pero no nos hagamos, hasta la licenciada Emma Félix, titular de la ASE, sabe perfectamente que los uaseños, o mejor dicho, la pandilla que se cree dueña de la UAS, buscará impedir a toda costa que los auditores hagan su chamba.

También hay que entenderlos, imagínense permitir que descubran la forma tan cochina en que usan el dinero público, simplemente recuerde que no les alcanzó para cubrir las últimas quincenas del año, vaya, ni los aguinaldos.

Ya el año pasado vimos este cuento, y la cosa va tan avanzada como que Robespierre Lizárraga se encadenó a la silla de Rectoría para que el señor titiritero mantenga a sus muñecos en la UAS.

Hasta ahorita, el Rector separado y actual encargado del Despacho de Rectoría están procesados en una causa por abuso de autoridad, y han esquivado otra por el mismo delito, así que no es descabellado esperar una o dos denuncias más por la misma razón.

A esos súmenle la media docena de denuncias por desempeño irregular. Nombre, a como va el asunto, la saga de Rápidos y Furiosos quedará en cortometraje comparado con este peliculón que traen montados los pasis... perdón, los uaseños.

Difícil olvidar las palabras con que respondió Víctor Corrales Burgueño, en aquel entonces Rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa por allá en el 2012, cuando Noroeste publicó un reportaje que reveló que el 56 por ciento de directores de unidades académicas, el 42 por ciento de personal de coordinaciones generales y el 37 por ciento de trabajadores de las direcciones de administración de la UAS estaban afiliados al PAS, partido creado por el ex Rector Héctor Melesio Cuén Ojeda.

“No, no conozco la lista. Ustedes son los que la han publicado, tú debes tener esa referencia”, dijo cuando se le cuestionó.

“¿No le incomoda esta situación de los funcionarios...?”, le preguntamos. “No, no me incomoda”, respondió.

“¿Eso no le da razón a quienes critican que Cuén Ojeda tiene las manos metidas en la Universidad?”, insistimos.

“No tiene las manos metidas, eso lo dicen ustedes, no tiene la manos metidas”, reaccionó ya encorajinado.

“¿Usted está en el partido?”, cuestionamos. “No, yo no estoy ahí”, recalcó.

Esta entrevista, realizada en Ciudad Universitaria de Mazatlán, no se pudo terminar debido a que Arnoldo Valle y otros trabajadores uaseños que lo acompañaban intervinieron para impedir el paso a la prensa y que el entonces Rector continuara su camino.

Como todos sabemos, y después de andar haciéndole al ensarapado hasta el último minuto en la Rectoría, Corrales Burgueño se afilió al PAS con todo y su familia.

Y lo que son las cosas.

En el último recuento que Noroeste publicó ayer, la cifra de funcionarios de primer nivel ya alcanzó el 92 por ciento, es decir de los 105 de los empleados con categoría de funcionarios en la Universidad, solo 8 no se encuentran afiliados al PAS.

Revelamos además que el total de la nómina percibida por todos los funcionarios pasistas es de más de 6.91 millones de pesos.

N’ombre, pues con razón andan con todo aferrándose a la opacidad y las artimañas.

Y lo que son las cosas, el hipócrita de Víctor Corrales ahora es el dirigente estatal del PAS, y hasta en un podcast con Cuén Ojeda andan aburriendo gente juntos. ¡Ni hablar!

El ex Presidente Municipal de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro, ya anda enfilando para el Senado de la República y dando por hecho que el impulso mediático que le han dado sus berrinches va a ser suficiente para un escaño.

Este jueves encabezó una conferencia de prensa flanqueado por el fantasma de Leobardo Alcántara, líder del Partido del Trabajo en Sinaloa. Y sí, aunque esté de no creerse, el Partido del Trabajo aún existe.

Pues en la conferencia el ex Alcalde dijo que la gente va a apoyar a quien le tenga confianza, respingando la nariz y dando por hecho que ya tiene en el bolsillo la confianza de la ciudadanía. Una cosa es la viralidad que han alcanzado sus desatinos en redes sociales, y otra muy distinta es que pueda jalar los votos necesarios para de perdida quedar en segundo lugar y alcanzar una silla en el Senado de la República.

Que no subestime Estrada Ferreiro el poder de Morena y el factor Andrés Manuel López Obrador que sigue vigente, pues para que la gente voltee a ver al PT va a estar difícil pues es un partido históricamente ignorado en Sinaloa.

Lo que sí fue muy audaz de su parte fue que en la conferencia también acusó que el Gobernador Rubén Rocha Moya buscó quitarle la Alcaldía para usar el cargo como un negocio y cederlo a su ahijado Juan de Dios Gámez Mendívil. Sin duda ya nos está adelantando el tono que tendrá su campaña.

Hoy por ahí del mediodía arriba a tierras sinaloenses, de nuevo, el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Vendrá desde Valle de Guadalupe, Jalisco, donde a las 13:00 horas inaugurará el acueducto El Salto-Calderón de la presa El Zapotillo.

Llegará al sur de Sinaloa y lo más seguro es que llegue al aeropuerto de Mazatlán después de las 14:00 horas. Lo más probable es que el Gobernador Rubén Rocha Moya lo reciba en el aeropuerto de Mazatlán y hasta lo lleve a comer mariscos de pasada en la Sindicatura de Villa Unión.

Luego emprenderá camino, específicamente al municipio de Concordia, donde a las 16:00 horas inaugurará el acueducto Concordia que viene de la Presa Picachos.

Por supuesto que pasará la noche en la zona turística mazatleca, como suele hacerlo cuando anda por la región, en el hotel de su amigo de muchas décadas, el fallecido empresario, don Julio Berdegué.

Y el sábado a las 10:30 horas estará en el paseo costero, para desde el asta bandera gigante que mira al Océano Pacífico, en la Glorieta Sánchez Taboada, rendir tributo al lábaro patrio en su día.

En sus visitas a los estados, el Presidente no suele dar declaraciones importantes ni hacer anuncios de algo que no se sepa ya.

De hecho, poca información sustanciosa surge de este tipo de giras.

A ver de qué humor llega el Primer Mandatario en un contexto preelectoral fuerte en el País, y con el tema de la investigación del Gobierno gringo sobre el posible financiamiento turbio que habría tenido su campaña electoral.

Veremos.

Como pudo leer ayer, la Auditoría Superior del Estado, ASE, incluyó en su plan anual de auditorías al águila suprema, la Universidad Autónoma de Sinaloa, es decir, que intentarán revisar cómo manejaron el recurso estatal y propio durante 2023.

Pero no nos hagamos, hasta la licenciada Emma Félix, titular de la ASE, sabe perfectamente que los uaseños, o mejor dicho, la pandilla que se cree dueña de la UAS, buscará impedir a toda costa que los auditores hagan su chamba.

También hay que entenderlos, imagínense permitir que descubran la forma tan cochina en que usan el dinero público, simplemente recuerde que no les alcanzó para cubrir las últimas quincenas del año, vaya, ni los aguinaldos.

Ya el año pasado vimos este cuento, y la cosa va tan avanzada como que Robespierre Lizárraga se encadenó a la silla de Rectoría para que el señor titiritero mantenga a sus muñecos en la UAS.

Hasta ahorita, el Rector separado y actual encargado del Despacho de Rectoría están procesados en una causa por abuso de autoridad, y han esquivado otra por el mismo delito, así que no es descabellado esperar una o dos denuncias más por la misma razón.

A esos súmenle la media docena de denuncias por desempeño irregular. Nombre, a como va el asunto, la saga de Rápidos y Furiosos quedará en cortometraje comparado con este peliculón que traen montados los pasis... perdón, los uaseños.

Difícil olvidar las palabras con que respondió Víctor Corrales Burgueño, en aquel entonces Rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa por allá en el 2012, cuando Noroeste publicó un reportaje que reveló que el 56 por ciento de directores de unidades académicas, el 42 por ciento de personal de coordinaciones generales y el 37 por ciento de trabajadores de las direcciones de administración de la UAS estaban afiliados al PAS, partido creado por el ex Rector Héctor Melesio Cuén Ojeda.

“No, no conozco la lista. Ustedes son los que la han publicado, tú debes tener esa referencia”, dijo cuando se le cuestionó.

“¿No le incomoda esta situación de los funcionarios...?”, le preguntamos. “No, no me incomoda”, respondió.

“¿Eso no le da razón a quienes critican que Cuén Ojeda tiene las manos metidas en la Universidad?”, insistimos.

“No tiene las manos metidas, eso lo dicen ustedes, no tiene la manos metidas”, reaccionó ya encorajinado.

“¿Usted está en el partido?”, cuestionamos. “No, yo no estoy ahí”, recalcó.

Esta entrevista, realizada en Ciudad Universitaria de Mazatlán, no se pudo terminar debido a que Arnoldo Valle y otros trabajadores uaseños que lo acompañaban intervinieron para impedir el paso a la prensa y que el entonces Rector continuara su camino.

Como todos sabemos, y después de andar haciéndole al ensarapado hasta el último minuto en la Rectoría, Corrales Burgueño se afilió al PAS con todo y su familia.

Y lo que son las cosas.

En el último recuento que Noroeste publicó ayer, la cifra de funcionarios de primer nivel ya alcanzó el 92 por ciento, es decir de los 105 de los empleados con categoría de funcionarios en la Universidad, solo 8 no se encuentran afiliados al PAS.

Revelamos además que el total de la nómina percibida por todos los funcionarios pasistas es de más de 6.91 millones de pesos.

N’ombre, pues con razón andan con todo aferrándose a la opacidad y las artimañas.

Y lo que son las cosas, el hipócrita de Víctor Corrales ahora es el dirigente estatal del PAS, y hasta en un podcast con Cuén Ojeda andan aburriendo gente juntos. ¡Ni hablar!

El ex Presidente Municipal de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro, ya anda enfilando para el Senado de la República y dando por hecho que el impulso mediático que le han dado sus berrinches va a ser suficiente para un escaño.

Este jueves encabezó una conferencia de prensa flanqueado por el fantasma de Leobardo Alcántara, líder del Partido del Trabajo en Sinaloa. Y sí, aunque esté de no creerse, el Partido del Trabajo aún existe.

Pues en la conferencia el ex Alcalde dijo que la gente va a apoyar a quien le tenga confianza, respingando la nariz y dando por hecho que ya tiene en el bolsillo la confianza de la ciudadanía. Una cosa es la viralidad que han alcanzado sus desatinos en redes sociales, y otra muy distinta es que pueda jalar los votos necesarios para de perdida quedar en segundo lugar y alcanzar una silla en el Senado de la República.

Que no subestime Estrada Ferreiro el poder de Morena y el factor Andrés Manuel López Obrador que sigue vigente, pues para que la gente voltee a ver al PT va a estar difícil pues es un partido históricamente ignorado en Sinaloa.

Lo que sí fue muy audaz de su parte fue que en la conferencia también acusó que el Gobernador Rubén Rocha Moya buscó quitarle la Alcaldía para usar el cargo como un negocio y cederlo a su ahijado Juan de Dios Gámez Mendívil. Sin duda ya nos está adelantando el tono que tendrá su campaña.