Este domingo comenzó a volverse viral un video en el que muestra cómo una mujer dio a luz en un baldío a su bebé y los testigos tuvieron que llamar a los números de emergencia para que fuera atendida por paramédicos.
La escena sale de la normalidad, porque difícilmente se puede creer que en 2023 sigan sucediendo estas cosas.
Sin embargo sabemos que hay lugares en donde la violación a los derechos humanos es más probable.
Ruiz Cortines, en el norte de Sinaloa, es uno de ellos, lo mismo que Villa Juárez en el centro o las zonas con migrantes o asentamientos indígenas en el sur.
Los primeros informes señalan que la mujer solicitó ayuda en un hospital de Seguro Social, pero le fue negada.
En su desespero quiso regresar a casa y no llegó y la naturaleza siguió su curso.
Ayer en los primeros momentos no fue posible confirmar si es verdad o no que le negaron ayuda en el IMSS, pero es difícil dudarlo por el perfil de quienes atienden el primer contacto. Ejemplos y anécdotas hay muchas.
Lo extraño es que suceda en tiempos en que desde el Gobierno federal se ha anunciado un cambio en los sistemas de salud y la cantaleta de que se priorice la atención médica a quienes más los requieran.
¿O de qué han servido la casi docena de convenios que ha firmado cada estado con el llamado IMSS Bienestar?
Lamentablemente este caso también hace pensar que existan todavía en nuestro estado destellos de racismo hacia las personas indígenas o migrantes.
Noroeste en algún momento pudo constatar cómo el Ejido La Flor, de camino de Eldorado, es un pueblo que está dividido por la carretera y por evidente actitud racista.
De un lado sur viven los migrantes de estados del centro y sur del País, y del norte los culiacanenses.
El trato a los migrantes se nota desde las gestiones para desazolvar su parte del canal pluvial y las gestiones para apoyos cada vez que llueve y se inundan.
Ni se diga la atención a las calles, los apoyos con programas del DIF y las invitaciones para las festividades del pueblo.
Según la encuesta nacional de discriminación del Instituto Nacional de Geografía e Historia, de 2017 a 2022 el porcentaje de personas de 18 años o más entrevistadas en Sinaloa que han sufrido discriminación bajó de 16.9 a 13.8 por ciento.
Sigue siendo una pena y una vergüenza que en nuestro estado todavía haya destellos de este mal social, que bien podría aplicarse a este caso.
Una combinación de eso y del nuevo sistema de salud pública que quiso instalar nuestro Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, que no les fueron suficientes cinco años y que dejará además una serie de hospitales sin equipamiento, sin áreas acondicionadas para atender como se debe, con deudas, inoperantes y con muchas personas en la fila para atender.
En estos tiempos preelectorales en donde más que buscar culpables reales mejor se busca sacar de la jugada a quien más haga mella, el dirigente del PRI en Mazatlán, José Luis Arreola Montoya, tomó la iniciativa de echarse a las calles a atravesársele a los carros en el semáforo de Insurgentes y Ejército Mexicano, aventarse un buen discurso y darle un volante a los conductores de los vehículos.
Este acto, que fue el viernes pasado, fue una campaña para exigirle a Édgar González Zataráin que regrese los 60 millones que se depositaron para la compra de las luminarias de Azteca Lighting, curioso que en ningún momento mencionó al ex Alcalde Luis Guillermo “El Químico” Benítez Torres, aun cuando es el principal implicado en este asunto.
¿Por qué a Edgar? y ¿por qué a Morena?, es evidente que la tierra va a empezar a caer sobre los que más estorban el camino de la Oposición y no es desconocido que las aspiraciones del actual Alcalde para aparecer en las boletas del 2024 son un tema que suena muy fuerte.
El que despacha desde el Ayuntamiento en sustitución de “El Químico” se ha dedicado en estos meses de gestión a ser “el apagafuegos”, ha lidiado con agendas muy cargaditas de eventos, ha echado a andar proyectos a los que otros que sí fueron electos les sacaron la vuelta y esa puede ser la razón por la que resulta apremiante comenzar a echarle la culpa de todo.
Problemas como los baches, el drenaje, los policías corruptos y las lámparas no aparecieron hace un año cuando llegó Édgar González, que no se le olvide al PRI que sus afiliados también le hicieron daño y le mintieron a los mazatlecos, para muestra el buen Pucheta con el Panteón de Miravalles y cómo olvidar las temporadas de poner calcetines para filtrar el agua, cuando Jorge Abel era el que “partía el queso”.
A Mazatlán no se le olvidan los 60 millones de pesos de Azteca Lighting, pero tampoco se le olvida el como indiferentemente a los colores del partido, muchos se han ido con las bolsas llenas y han dejado las arcas del Municipio temblando.
Pese a que no se le ve que haga trabajo en su zona, que corresponde el Sexto Distrito Electoral, la Diputada federal Olegaria Carrasco Macías dijo que aspira a reelegirse por segunda ocasión para un tercer periodo consecutivo.
Será que no quiere soltar el sueldazo que recibe mes con mes, además de las prerrogativas, solo por apoyar las propuestas de su jefe el Presidente Andrés Manuel López Obrador, aunque ella jura que ha votado en contra de iniciativas en las que no está de acuerdo porque no es ir a levantar la mano.
El pasado sábado 18 de noviembre, Carrasco Macías rindió su Segundo Informe como integrante de la 65 Legislatura y dijo que en esta ocasión no buscará la candidatura por Morena a la Presidencia Municipal de Mazatlán.
Entre sus “logros” destacó solo lo que ha hecho la bancada de Morena y aliados, y en menor cantidad las propuestas que ella ha presentado de manera personal como las reformas a la Ley de Salud en el uso de agroquímicos.
En fin, escaso trabajo, pero sí gran sueldo, y ahora quiere ir por tres años más, es decir, de ganar serían ya nueve años consecutivos levantando solo la mano.
Sorpresa pudiera causar que en Sinaloa, pese a la guerra sucia y a las metidas de pata del Gobernador Rubén Rocha Moya, porque hay veces que no se queda callado, es que una encuesta de la agencia Consulta Mitofsky arroje que se ubica entre los tres mandatarios mejor evaluados del País.
¿Será por el blindaje que le ha ofrecido el Presidente Andrés Manuel López Obrador, sus mensajes y sus visitas, o por la entrega bimestral de programas que se traducen en lana para todos, o bien porque sí le aprecian su trabajo, pero lo cierto es que Rocha se posicionó como el tercer Gobernador con mayor aprobación entre los 32 mandatarios estatales, sólo por debajo de los gobernadores de Coahuila y Yucatán.
Con una puntuación de 58.8 por ciento en el ranking de octubre, hasta presenta un alza comparado con septiembre, cuando recibió una aprobación del 58.3 por ciento.
Además que la casa encuestadora indicó que la aprobación promedio de octubre fue de 51.9 por ciento, una cifra muy abajo de Rocha Moya.
Pues parece que ni las declaraciones desafortunadas que ha hecho el Góber, y que se han hecho virales hasta en los medios nacionales, o la guerra sucia que ha recibido en las últimas semanas, aparentemente por las denuncias contra funcionarios de la UAS, han hecho mella en su popularidad.
No cabe duda que hay veces que es muy diferente la percepción de lo que en realidad piensan las personas de manera individual.