Resucitando espíritus, así andan estos tiempos de la política.

Así como el domingo “El Diablo” Higuera mostró que aún le “late el corazoncito” por la Alcaldía de Mazatlán y dijo que se lanzará a buscar la candidatura de Morena, ayer otro espíritu revivió de las entrañas de los partidos y fue el de la otrora famosa, y hasta temida, lideresa de colonias: “La Güera guerrillera”.

Así es, María Elena Gómez Pineda, mejor conocida como “La Güera guerrillera”, reapareció en las lides políticas porteñas, ahora del brazo del Frente Amplio, el que reúne al PRI, PAN y PRD, y fue presentada como parte de la estructura de los “Amigos de Xóchitl”.

Famosa y temida porque lideró numerosas invasiones en Mazatlán, de hecho se le acusó de invadir terrenos particulares para formar nuevas colonias, entre ellas la Libertad de Expresión... y fue justamente eso, la libertad, lo que le quitaron en dos ocasiones: en 1990 y en 2018 estuvo presa en el Penal de Mazatlán.

Desde esos años de finales de los 80 y los 90, los políticos la frecuentaban por el número de seguidores que según tenía en las colonias, y en los días de elección defendía las urnas para los candidatos del Partido Revolucionario Institucional.

Ahora dice que sigue en el PRI, que porque ya se fueron de ese partido los que “apestaban”, pero lo cierto es que en 2021 “La Güera guerrillera” jugó para Morena, pues en ese entonces reapareció en los eventos de promoción del entonces candidato a Gobernador, Rubén Rocha Moya, y ahí afirmó que había operado para Andrés Manuel López Obrador desde ¿dónde creen?, desde la cárcel, según lo que ella misma declaró en su momento, cuando anduvo en la campaña de Rocha.

Es más, en aquel entonces dijo que fue el mismísimo Rocha el que le mandó abogados para sacarla del Penal, luego que los “otros” que ella conocía, y que con una llamada hubieran podido liberarla, le dieron la espalda.

En fin, ahora bajo el amparo del Frente Amplio revive este polémico personaje de las bases partidistas dando un bandazo una vez más. Y pues no es que sea un activo muy valioso, pero pues se nota la desesperación de los partidos, que seguramente van a seguir levantando piedras a ver qué más pueden revivir.

Ahora que sí se les hizo bolas el engrudo a los encargados de la seguridad del estado y todo por el fentanilo, químico utilizado para preparar drogas y del que tanto han advertido por los estragos que ha causado.

Entre todo el asunto de las mantas que aparecieron supuestamente colgadas por un grupo delictivo, que buscaban contener la comercialización del fentanilo en Sinaloa, la autoridad estatal se evidenció como incompetente en el tema.

Al parecer la autoridad estatal no se pone de acuerdo con el discurso de decir si hay o no hay fentanilo en el estado.

Por una parte, la Fiscal Sara Bruna Quiñónez Estrada dice que en Sinaloa el fentanilo que se ha localizado es el ya procesado, y no ha habido indicios de la presencia de la materia prima en el estado.

Y a media declaración a medios de comunicación apuntó con un “pero ese no es mi tema”.

Mientras que el Secretario de Seguridad Pública, Gerardo Mérida Sánchez, se rajó con el tema y no quiso hablar del mismo pues “ya dijo el Gobernador que no hay fentanilo en el estado”.

De risa, su declaración por lo chusca “a hechos ya hablados, quedó bien claro que el fentanilo en Sinaloa nada, nada de fentanilo”, no, si las regañadas en la Semanera sí calan. ¿Qué hora es?, preguntaría Rocha, y Mérida le contestaría: la que usted diga, señor Gobernador.

Y luego se enojan si uno no les cree, pero pues parecen película de Cantinflas con esas contradicciones y comentarios contra el otro, cuando juegan para el mismo equipo.

Tan solo un ejemplo, en agosto, elementos de la Policía Federal Ministerial de la Agencia de Investigación Criminal, atendiendo una denuncia anónima, se trasladaron a una empresa de paquetería ubicada en el Bulevar José Limón, en Colonia Humaya, en Culiacán. En el lugar se aseguraron 131 mil 39 pastillas que contienen fentanilo.

Más todos los decomisos de los que han dado cuenta todos los medios y publicitados por la misma Sedena.

Ahora nos sale la Fiscal con que pues lo que se ha encontrado es el puro fentanilo procesado y no la materia prima, ¡que alguien nos explique!.

El puro hecho de las mantas apuntan a un negocio en el que los grupos delictivos no están dispuestos a compartir.

Y fentanilo procesado o no procesado, ¿es igual de peligroso, qué no?

Primero el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación le dice que “no” a la revisión del proyecto que podría devolverle, si es que eso es posible, la Alcaldía de Culiacán, y ahora ayer empezó el juicio oral contra Jesús Estrada Ferreiro por el caso de viudas de policías, y empezó con todo.

Al empezar la audiencia, el ex Alcalde le tiró una pequeña pulla a la Juez Graciela Adriana Peraza García, pues le echó en cara que ella no anuló la vinculación a proceso dictada por el anterior Juez, Adán Salazar Gastélum.

Después de mucha queja, ya tomaron lugar las presuntas víctimas que pasaron a testificar.

La primera hasta rompió en llanto por recordar las supuestas agresiones verbales que les dijo Estrada Ferreiro; las otras dos se mantuvieron más serenas.

“Con esas palabras dañó o manchó el honor de mi esposo... él era un buen elemento”, declaró, a como pudo, la primer testigo.

“Se empezó a enojar, nos empezó a insultar... que no tenía por qué mantenernos... que nos salía más barato casarnos con otro policía”, manifestó la segunda víctima.

Lo que le ha costado lo bocafloja y hasta donde ha caído al ángel malogrado del Palacio Municipal. Y todo lo que le espera.

Una vez se le preguntó a Estrada cuando andaba buscando la reelección, cosa que logró por cierto, si había aprendido con el periodo en la Alcaldía a pelearse menos, y él contestó que no, al contrario, había aprendido a pelearse más.

Ahí están las consecuencias, le iría mejor como sparring del Canelo Álvarez.