Los oportunos
En otra gran muestra de astucia de parte del Gobierno del Estado de Sinaloa, el Secretario General de Gobierno y vocero oficial, Feliciano Castro Meléndrez, informó que las conferencias de la vocería del Estado ya no serán diarias, sino que se realizarán sólo los miércoles y viernes.
La crítica en esta ocasión no es hacia un ejercicio de transparencia, más aún con el entorno de violencia que vivimos cada día, sino a la pésima ejecución de parte del Gobierno a la hora de informar a la ciudadanía en torno a lo que ocurre en los espacios que deberían ser de ellos.
El fin de estas conferencias de prensa era que la gente tuviera claro qué ocurrió en la balacera del día anterior, o por qué se vieron muchas patrullas en determinado sector de Sinaloa. En cambio, el Estado intentó imponer su agenda de una manera rústica y tediosa.
Ni siquiera el róster de la administración pública estatal, que es más vasto que equipo de futbol americano, alcanzaba para llenar la semana y tratar de enfocar la atención de la audiencia, tan siquiera unos momentos, en otra cosa que no sea la contigencia delictiva que sufre Sinaloa.
Y aún con eso, lo peor de la vocería del Gobierno de Sinaloa vino con el cambio de mando que supuso la renuncia de Gerardo Mérida para la llegada de Óscar Rentería Schazarino.
Como hemos comentado en más de una ocasión, el nuevo General al frente de la SSP no se deja ver ni por accidente, y cuando llega a aparecer en algún acto público, aparece a lado del Gobernador Rubén Rocha Moya, además que es más rápido que el mismísimo Usain Bolt para evadir a la prensa.
Desde entonces, la gente debe enterarse de los resultados en materia de seguridad pública mediante la vocera de la SSP, Verona Hernández Valenzuela, quien probablemente sea la menos culpable de lo mal ejecutada que está la conferencia.
Puede entenderse que la vocera está sujeta a lo que le dictan los mandos de seguridad, y por supuesto que ella no tiene por qué dominar los términos y maneras en que se trabajan los operativos y movimientos de las corporaciones. Aquí lo reprobable es el hermetismo del verdadero jefe de seguridad.
Nunca se ha pedido que Óscar Rentería esté diariamente frente a los medios de comunicación, pero que al menos una vez por semana se pueda cuestionar al máximo responsable (en teoría) de la seguridad pública de las y los sinaloenses, y asuma esa atribución por la cual se le paga.
Qué a gusto está Badiraguato
No podemos pasar por alto los comentarios del Presidente Municipal de Badiraguato, José Paz López Elenes, en relación a la crisis de seguridad que enfrenta Sinaloa, pues señaló que en el municipio que él gobierna hay paz.
A pregunta expresa sobre a qué le atribuye esa paz, el Alcalde dijo que hay seguridad porque la gente de Badiraguato se porta bien y que no hay visitas que trastoquen el bienestar ciudadano.
Mire usted, y que según él se aventó una respuesta estudiada y preparada, pero muy cuestionable pues ya en todo Sinaloa hay gente que se “porta bien” y tiene que lidiar con las consecuencias que el crimen organizado, así que la buena conducta ciudadana no es garantía de seguridad.
En segundo lugar, el Presidente Municipal se jactó de que el municipio no recibe visitas problemáticas, pues cómo, si es una de las zonas intocables y acorazadas para el Cártel de Sinaloa, pues no olvidemos que en la sierra del municipio iniciaron capos como Rafael Caro Quintero, Miguel Ángel Félix Gallardo y Joaquín Guzmán Loera “El Chapo” así que históricamente es considerado un lugar estratégico para el crimen organizado.
Y con estos comentarios no se pretende estigmatizar a las buenas gentes de Badiraguato, pero es muy ingenuo pensar que por la capacidad de las autoridades en materia de seguridad hay paz en la zona.
Y acá no sólo se cuestiona al Presidente Municipal, sino a su equipo completo de comunicación pues es absurdo no prepararlo para una pregunta así en medio de una crisis de seguridad que enfrenta el estado.
De por sí siempre que López Elenes habla se entiende que hay un mensaje oculto en sus palabras, como no diciendo la verdad absoluta.
Y no hay que ignorar que justamente el año pasado unos paramédicos de la Cruz Roja fueron interceptados y se les entregó un cuerpo envuelto en bolsas de la basura en Badiraguato, y eso no pasa en un municipio pacífico, señor Alcalde.
Rehuye Sánchez Kondo al tema UAS
En medio de la crisis de seguridad una de las situaciones que se agravaron fue la opacidad de funcionarios municipales y estatales en Sinaloa, pues se saben rebasados por los hechos delictivos y no tienen la capacidad de responder ante los mismos.
La Fiscal General del Estado, Claudia Zulema Sánchez Kondo, ya tiene maestría para huirle a los medios de comunicación y para ver con desdén a todo aquel que le insista sobre su falta de eficiencia ante los hechos de inseguridad que acechan al estado.
Este miércoles se le cuestionó sobre el agente de la Fiscalía que fue asesinado en un estacionamiento en Mazatlán, y considerando que ya le han asesinado a otros dos funcionarios en medio de esta crisis de seguridad, se le cuestionó qué está haciendo para garantizar la seguridad de los agentes.
Como robot contestó que ya se investigan los casos, cosa que dudamos muchísimo pues no han existido avances en ellos. Así que no hay otra forma de calificar a la Fiscal que no sea indolente ante las víctimas que esperan justicia en medio de la situación de inseguridad que atraviesa Sinaloa.
Y cuando se le cuestionó sobre el perdón otorgado a la pandilla de la Universidad Autónoma de Sinaloa a cambio de una reparación del daño de 20 millones de pesos, la Fiscal dejó una estela de polvo al huir de la entrevista con medios de comunicación locales. Un escenario muy bochornoso.
La cuestión es que no sería tan señalada de opacidad si la Fiscal estuviera presentando resultados, pero no se ve ningún avance sustantivo en el tema de búsqueda de justicia para el estado.
Pareciera que se encuentra en el cargo nada más para ocupar una silla y nos hacen cuestionarnos si va a durar en ella.