Pues parece que quedó definido que la Rectoría de la Universidad Autónoma de Sinaloa se disputará entre el desbigotado Rector, y también doctor Jesús Madueña Molina, y la doctora Denise Azucena Díaz Quiñónez.
Esto es provisional, pues todavía este viernes habrá chance de que alguien impugne por ahí la candidatura de alguno de estos dos perfiles. A lo mejor alguien saca otra acusación de malgastar 535 millones de pesos, nunca se sabe.
Para sorpresa solo de él, o ni eso, el señor José Casimiro Zamora Castro no pasó el principal filtro que pedía la convocatoria, que era ser mujer.
Y de parte de la investigadora Patricia Carmina Inzunza Mejía, pues no se ha revelado como tal, pero suponemos que algo habrá tenido que ver el hecho de que se registró tarde a un proceso del que conocía hace mínimo una semana.
Por supuesto que una disputa en la cual participa la mayor autoridad ejecutiva de la institución, pues estaría bajo sospecha únicamente por eso.
Si a eso le añadimos la jugarreta que intentaron aplicarle ayer a la doctora Denise Díaz, pidiéndole de última hora unos documentos que se supone que ya había entregado, la legitimidad de esta elección tambalea más.
Ciertamente, esta contienda tiene muchos elementos para considerar que está volcada en favor del Rector Madueña, comenzando por el hecho de que, ya sin el finado Melesio Cuén Ojeda, él es el mandamás en la UAS.
Si a eso le sumamos que ya no tiene broncas con su ex profesor de prepa, el Gobernador Rubén Rocha Moya, pues tampoco puede preocuparse por ese lado.
Por su parte, la señora Denise Díaz tendrá que apostarle a ser la figura sobre la cual la disidencia de la universidad vea una ruta de liberación de todo el sistema PAS-UAS,
Otra cosa que tendrá complicada la doctora será darse a conocer entre gran parte de la planta estudiantil de la institución, la chaviza, pues, que muchos de ellos seguramente ni sepan qué onda con las elecciones, y el día en que les pongan una boleta pueda que voten por el nombre que más les suene.
Sin duda que a nivel de popularidad tiene ventaja el Rector, pues no cualquiera es conocido a nivel nacional por gestionar gastos de 18 millones de pesos en tortillas.
Como ya hemos dicho, qué bueno que la UAS se someta a otro proceso de democracia, pero hay puntos en los que el margen de mejora es evidentísimo.
Uno de ellos es la ausencia de debates entre candidatos para exponer sus proyectos de trabajo a la comunidad universitaria, y por ahí fomentar el desarrollo crítico en los jóvenes.
Solo imagínese un debate en el que interroguen al Rector Madueña por los 535 millones de pesos que se gastaron irregularmente en su mandato, o sobre la compra a mansalva de propiedades que tuvo una vez llegó a la silla de Rectoría.
En su visita a la sindicatura de Jesús María, a la que no acudía desde hacía más de seis meses, el Alcalde de Culiacán Juan de Dios Gámez se encontró en medio de múltiples hechos de violencia que siguen golpeando a la entidad.
Durante su recorrido, surgieron una serie de incidentes que pusieron de relieve la dura realidad que atraviesan los ciudadanos. Hoy, en Culiacán, se registraron nuevos enfrentamientos armados que reavivaron el miedo entre los habitantes, generando más incertidumbre sobre la seguridad en la región.
Aunque de visita, lejos de la mancha urbana, el Alcalde no llevó consigo propuestas para garantizar la seguridad y el bienestar en el poblado que también ha sido alcanzado por la violencia, en cambio dijo que se esperaría para ver que solicitaban los habitantes.
La ausencia prolongada del Alcalde y la justificación de que existen “otras formas de estar presentes” no resuenan con los pobladores durante estos tiempos.
Otra vez, la ciudadanía no solo necesita calles y viviendas, sino también seguridad, liderazgo y un gobierno que se haga cargo de los problemas de manera efectiva y empática.
Mientras el Alcalde justifica su falta de presencia en la sindicatura con la entrega de obras, el pueblo continúa enfrentando la latente amenaza de la delincuencia organizada.
La indiferencia mostrada por el Gobierno municipal, al no reconocer plenamente la magnitud del sufrimiento y la necesidad de apoyo emocional y seguridad, deja en evidencia que aún queda mucho por hacer en términos de gobernanza y acompañamiento a la población en situaciones extremas como esta.
más bonitos
Uno de los errores que sin duda son los más graves qué han cometido desde la Secretaría de Seguridad Pública estatal es la de pretender qué no pasa nada y omitir informar sobre los hechos qué ocurren.
Aunque con la crisis, nuestro aferrado y chespiritizado ex Secretario de Seguridad, Gerardo Mérida Sánchez, sí comenzó a hacer como que la Virgen le hablaba, pudo enderezar por momentos esa equivocación, el nuevo titular llegó y volvió a enchuecar la orden.
La importancia de tener información veraz y oportunidad es tan añeja como obvia y necesaria para tomar las mejores decisiones.
Y en estos momentos, después de más de seis meses de sobrevivir a esta crisis, el saber, el estar informados, puede ser la diferencia entre la vida y la muerte.
Por varias semanas la SSP estatal hizo un trabajo histórico y de un impacto importantisimo para la ciudadanía al informar, primero casi en tiempo real, lo que estaba ocurriendo.
Ayer extrañamos eso.
Porque nuestros periodistas, y nuestros nos referimos no solo los de Noroeste, sino de todos los medios, nuestros periodistas sinaloenses, se vieron atrapados en una zona en donde no se detuvieron las detonaciones de armas de fuego, pese a la presencia de las policías y las fuerzas militares.
La presencia de los periodistas en el lugar hoy es crucial para confirmar la información que se comparten en nuestro portal, nuestra edición impresa, nuestras redes sociales y nuestro Noticiero.
Por eso estuvimos ahí.
Pero lo realmente inhumano e indignante es que las dependencias que se encargan de atender esas emergencias, y que gastan recursos públicos en sueldos y equipo para informar, prefieran callar, e ignorar la emergencia con el pretexto de que la información se dará hasta el día siguiente en una conferencia de prensa de la que todos sabemos no informan como deberían.
Y como especialistas en información, su manejo e impacto, hay que saber diferenciar en lo que implica diferenciar entre un ataque armado, un enfrentamiento entre grupos criminales o entre civiles y militares o policías.
Pues ya ni eso quiere informar la SSP estatal y parecen preferir qué se ponga en riesgo el mayor número de personas posibles, por el simple hecho de quedarse callados.
Desde aquí no nos queda más que lamentarnos de pasar estos años con personas con este perfil en administración del actual gobierno, ponernos de acuerdo con otros periodistas y medios para ajustar nuestras propias estrategias para informar con la mayor claridad y la menor exposición posible y esperar que simplemente la dependencia cambia de empleados a otros más empáticos, más humanos y sobre todo más profesionales. Lo peor es que luego se quejan de que se esparcen rumores o versiones no confirmadas, cuando son ellos quienes dejan el vacío de información.
Pues parece que quedó definido que la Rectoría de la Universidad Autónoma de Sinaloa se disputará entre el desbigotado Rector, y también doctor Jesús Madueña Molina, y la doctora Denise Azucena Díaz Quiñónez.
Esto es provisional, pues todavía este viernes habrá chance de que alguien impugne por ahí la candidatura de alguno de estos dos perfiles. A lo mejor alguien saca otra acusación de malgastar 535 millones de pesos, nunca se sabe.
Para sorpresa solo de él, o ni eso, el señor José Casimiro Zamora Castro no pasó el principal filtro que pedía la convocatoria, que era ser mujer.
Y de parte de la investigadora Patricia Carmina Inzunza Mejía, pues no se ha revelado como tal, pero suponemos que algo habrá tenido que ver el hecho de que se registró tarde a un proceso del que conocía hace mínimo una semana.
Por supuesto que una disputa en la cual participa la mayor autoridad ejecutiva de la institución, pues estaría bajo sospecha únicamente por eso.
Si a eso le añadimos la jugarreta que intentaron aplicarle ayer a la doctora Denise Díaz, pidiéndole de última hora unos documentos que se supone que ya había entregado, la legitimidad de esta elección tambalea más.
Ciertamente, esta contienda tiene muchos elementos para considerar que está volcada en favor del Rector Madueña, comenzando por el hecho de que, ya sin el finado Melesio Cuén Ojeda, él es el mandamás en la UAS.
Si a eso le sumamos que ya no tiene broncas con su ex profesor de prepa, el Gobernador Rubén Rocha Moya, pues tampoco puede preocuparse por ese lado.
Por su parte, la señora Denise Díaz tendrá que apostarle a ser la figura sobre la cual la disidencia de la universidad vea una ruta de liberación de todo el sistema PAS-UAS,
Otra cosa que tendrá complicada la doctora será darse a conocer entre gran parte de la planta estudiantil de la institución, la chaviza, pues, que muchos de ellos seguramente ni sepan qué onda con las elecciones, y el día en que les pongan una boleta pueda que voten por el nombre que más les suene.
Sin duda que a nivel de popularidad tiene ventaja el Rector, pues no cualquiera es conocido a nivel nacional por gestionar gastos de 18 millones de pesos en tortillas.
Como ya hemos dicho, qué bueno que la UAS se someta a otro proceso de democracia, pero hay puntos en los que el margen de mejora es evidentísimo.
Uno de ellos es la ausencia de debates entre candidatos para exponer sus proyectos de trabajo a la comunidad universitaria, y por ahí fomentar el desarrollo crítico en los jóvenes.
Solo imagínese un debate en el que interroguen al Rector Madueña por los 535 millones de pesos que se gastaron irregularmente en su mandato, o sobre la compra a mansalva de propiedades que tuvo una vez llegó a la silla de Rectoría.
En su visita a la sindicatura de Jesús María, a la que no acudía desde hacía más de seis meses, el Alcalde de Culiacán Juan de Dios Gámez se encontró en medio de múltiples hechos de violencia que siguen golpeando a la entidad.
Durante su recorrido, surgieron una serie de incidentes que pusieron de relieve la dura realidad que atraviesan los ciudadanos. Hoy, en Culiacán, se registraron nuevos enfrentamientos armados que reavivaron el miedo entre los habitantes, generando más incertidumbre sobre la seguridad en la región.
Aunque de visita, lejos de la mancha urbana, el Alcalde no llevó consigo propuestas para garantizar la seguridad y el bienestar en el poblado que también ha sido alcanzado por la violencia, en cambio dijo que se esperaría para ver que solicitaban los habitantes.
La ausencia prolongada del Alcalde y la justificación de que existen “otras formas de estar presentes” no resuenan con los pobladores durante estos tiempos.
Otra vez, la ciudadanía no solo necesita calles y viviendas, sino también seguridad, liderazgo y un gobierno que se haga cargo de los problemas de manera efectiva y empática.
Mientras el Alcalde justifica su falta de presencia en la sindicatura con la entrega de obras, el pueblo continúa enfrentando la latente amenaza de la delincuencia organizada.
La indiferencia mostrada por el Gobierno municipal, al no reconocer plenamente la magnitud del sufrimiento y la necesidad de apoyo emocional y seguridad, deja en evidencia que aún queda mucho por hacer en términos de gobernanza y acompañamiento a la población en situaciones extremas como esta.
más bonitos
Uno de los errores que sin duda son los más graves qué han cometido desde la Secretaría de Seguridad Pública estatal es la de pretender qué no pasa nada y omitir informar sobre los hechos qué ocurren.
Aunque con la crisis, nuestro aferrado y chespiritizado ex Secretario de Seguridad, Gerardo Mérida Sánchez, sí comenzó a hacer como que la Virgen le hablaba, pudo enderezar por momentos esa equivocación, el nuevo titular llegó y volvió a enchuecar la orden.
La importancia de tener información veraz y oportunidad es tan añeja como obvia y necesaria para tomar las mejores decisiones.
Y en estos momentos, después de más de seis meses de sobrevivir a esta crisis, el saber, el estar informados, puede ser la diferencia entre la vida y la muerte.
Por varias semanas la SSP estatal hizo un trabajo histórico y de un impacto importantisimo para la ciudadanía al informar, primero casi en tiempo real, lo que estaba ocurriendo.
Ayer extrañamos eso.
Porque nuestros periodistas, y nuestros nos referimos no solo los de Noroeste, sino de todos los medios, nuestros periodistas sinaloenses, se vieron atrapados en una zona en donde no se detuvieron las detonaciones de armas de fuego, pese a la presencia de las policías y las fuerzas militares.
La presencia de los periodistas en el lugar hoy es crucial para confirmar la información que se comparten en nuestro portal, nuestra edición impresa, nuestras redes sociales y nuestro Noticiero.
Por eso estuvimos ahí.
Pero lo realmente inhumano e indignante es que las dependencias que se encargan de atender esas emergencias, y que gastan recursos públicos en sueldos y equipo para informar, prefieran callar, e ignorar la emergencia con el pretexto de que la información se dará hasta el día siguiente en una conferencia de prensa de la que todos sabemos no informan como deberían.
Y como especialistas en información, su manejo e impacto, hay que saber diferenciar en lo que implica diferenciar entre un ataque armado, un enfrentamiento entre grupos criminales o entre civiles y militares o policías.
Pues ya ni eso quiere informar la SSP estatal y parecen preferir qué se ponga en riesgo el mayor número de personas posibles, por el simple hecho de quedarse callados.
Desde aquí no nos queda más que lamentarnos de pasar estos años con personas con este perfil en administración del actual gobierno, ponernos de acuerdo con otros periodistas y medios para ajustar nuestras propias estrategias para informar con la mayor claridad y la menor exposición posible y esperar que simplemente la dependencia cambia de empleados a otros más empáticos, más humanos y sobre todo más profesionales. Lo peor es que luego se quejan de que se esparcen rumores o versiones no confirmadas, cuando son ellos quienes dejan el vacío de información.