En el Palacio de Gobierno, este lunes que fue la conferencia de prensa del Gobernador Rubén Rocha Moya, destacó la presencia de elementos del Ejército Méxicano y de la Guardia Nacional en la entrada principal.

Ahí estuvieron los soldados y agentes desde muy temprano haciendo gala de sus patrullas y armas.

También en la puerta del estacionamiento del Palacio de Gobierno se instalaron al menos cuatro trabajadores del Gobierno estatal que con un listado iban anotando a los vehículos que entraban al estacionamiento.

Y por si no fuera la suficiente demostración de fuerza de seguridad, en la entrada del auditorio, en donde el Gobernador Rubén Rocha Moya presenta la Semanera, estuvieron dos agentes de la Policía Estatal que comúnmente no se encuentran en ese punto.

Puede ser que estas situaciones sean una gran coincidencia, pero resulta muy contrastante que se presenten estos actos y que el Gobernador Rubén Rocha Moya diga en conferencia de prensa que el estado está tranquilo. Pues cómo no se va a sentir tranquilo si hay funcionarios que lo protegen.

Mientras él se encuentra amurallado y resguardado en sus ya pocas apariciones públicas, el pueblo sinaloense se encuentra a la expectativa de que ocurra otro Jueves Negro, pero ahora creado por una lucha de territorio entre cárteles, en ausencia de Ismael Zambada García “El Mayo” o de Joaquín Guzmán López hijo de “El Chapo”.

Si bien la política del Gobernador ha sido no alarmar, uno se alarma al ver semejante muestra de poder securitario destinado a resguardar el Palacio de Gobierno.

Una de las noticias principales que dio el Gobernador de Sinaloa Rubén Rocha Moya en su conferencia de prensa la Semanera de ayer fue los cambios en su Gabinete, sobre todo el nombramiento de Ismael Bello Esquivel como nuevo titular de la Secretaría de Agricultura y Ganadería y la llevada a Jaime Montes Salas a despachar como director del Colegio de Bachilleres del Estado de Sinaloa.

La cereza en el pastel es que Rocha Moya no se anduvo con poses guardadas y dejó muy claro que no quiere tener cerca a Montes Salas, así que le dará chanza que opere la Dirección del Cobaes desde una oficina en Los Mochis, en la zona más al norte de Sinaloa.

Por otra parte, también deja claro que Bello Esquivel, quien se encontraba como titular en el Servicio de Administración Tributaria del Estado de Sinaloa, se ha convertido en uno de sus valedores de mayor confianza.

Casi por nada después de que le hizo la chamba a Montes Salas y sirvió como la parte que daba respuesta y solución a la bronca de la estrategia del estado para la comercialización del maíz al gestionar los recursos del estado y operar para su distribución entre los agricultores y bodegueros beneficiados.

Los cambios que también confirmó fueron de José Carlos Cárdenas Mellado al SAT y el de Paulina Peña Payán, quién laboraba como Directora Adjunta del Despacho de la Secretaría General de Gobierno del Estado de Sinaloa, y como nueva Subsecretaria de Planeación en la Secretaría de Educación Pública y Cultura.

El Gobernador se aventó un discurso motivacional en el que justificó estos cambios para dejar claro que son para mejorar el trato de su administración con los diferentes sectores, sobre todo en el sentido social y humano de este Gobierno.

De entrada, creemos que todos en Sinaloa estaremos de acuerdo que el cambio en la Secretaría de Agricultura era necesario... de hecho hasta se tardó como un año.

Otro anuncio que no gustó tanto tanto fue el análisis de que pudiera traerse desde el Congreso del Estado a Feliciano Castro como Secretario Gemeral de Gobierno.

La verdad es que entendemos que hay relación ahí de compas, pero es lógico que el amigo ya dio lo que tenía que dar y la verdad no le fue tan bien.

Es más, le adelantamos que preferimos a Ismael Bello ahí también.

De mucho impacto resultó la condolencia que el Partido Sinaloense envió a la dirigente municipal de su propia organización política en Elota por el fallecimiento de dos de los hermanos de ésta.

Y el pésame institucional llegó apenas unas horas después de que las propias autoridades sinaloenses pudieron confirmar la identidad de tres personas que aparecieron asesinadas con huellas de tortura en una brecha en la comunidad de El Espinal, en el municipio de Elota, el pasado sábado.

El anuncio resultó porque una de las tres víctimas del crimen fue Martín García Corrales, una persona señalada de ser un operador del Cártel de Sinaloa, y por el que el Departamento de los Estados Unidos ofrecía una recompensa de 4 millones de dólares por información que ayudara a dar con su paradero y detención, además de su hermano José Ricardo y uno de sus escoltas.

Martín y José Ricardo, según el anuncio del PAS, fueron hermanos de Sonia Esthela García Corrales, lideresa del partido en Elota.

No es la primera vez que este partido político, o algún otro de Sinaloa, se ve involucrado de esta manera con relaciones directas con el crimen organizado.

Lo peor es que asesinato y el anuncio se presenta poco más de 20 días después de la caída de Ismael Zambada García, “El Mayo”, y Joaquín Guzmán López, hijo de “El Chapo” Guzmán ante autoridades estadounidenses.

Y en medio de una crisis en su partido por el anuncio de “El Mayo” Zambada en una carta de su relación de varios años con el ex Rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa y líder fundador del PAS, Héctor Melesio Cuén Ojeda, quien también fue asesinado el pasado 25 de julio.

Poco a poco hemos visto en redes sociales que algunos ya comenzaron a deslindarse de este partido anunciando sus renuncias y otros más están por hacerlas.

Y por lo pronto no hay nadie del partido que saque la cabeza para ver quién será el líder de aquí en adelante, porque como ya todos sabemos, Cuén Ojeda no dejó tras de sí un número dos.

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Malecón es columna institucional de esta casa editorial.

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