Horrible es el caso de Miguel Eduardo Burgos Varela, policía municipal de Navolato, acusado por la Fiscalía de dos feminicidios, aunque habría que subrayar la presunción de inocencia a la que obliga el espíritu del sistema de justicia penal.
Pero con base en la información del Fiscal, Juan José Ríos Estavillo, podríamos pensar en un caso de asesino serial o psicópata no documentado a la fecha en Sinaloa, estado acostumbrado a los asesinatos relacionados con el crimen organizado.
Con orden de aprehensión en Sinaloa y buscado hasta por la Interpol, Burgos Varela cumpliría, en caso de ser culpable, con dos características de un sociópata de esta naturaleza: era una persona fuera de sospecha y quiso que sus crímenes se conocieran.
Se le acusa de los feminicidios de Dayana y Jovana, ambas menores de edad.
La primera, de 5 años al momento de su rapto, fue encontrada sin vida, cuando los investigadores encontraron su cráneo.
Sin embargo, las autoridades ya habían rastreado la zona sin encontrar nada. A los días, “apareció” el cráneo de la niña y “una llamada anónima” lo reportó.
Igual con Jovana, la joven estudiante de preparatoria. Sus restos fueron también hallados, ya solamente en huesos, en un paraje de Navolato.
Como policía, Burgos contaba con buena reputación y hasta fue galardonado hace 9 años por un club social, como “gente buena”.
Hoy está prófugo, sin embargo, la duda está latente: ¿tiene más víctimas?
Se quedó arriba
Por los corrillos del PRI traen de bajada a Gloria Himelda Félix. Dicen que se quedó arriba… del ladrillo.
Y es que a la actual Diputada federal con licencia y número 1 en las “pluris” locales del PRI le gusta vestir caro y enseñarlo.
Ahora que andan las campañas, lo que se estila es vestir práctico: un pantalón de mezclilla, playera de candidato, gorra, ¡y vámonos!
Pero la protegida de Jesús Aguilar Padilla aparece con ropa marca Carolina Herrera, Gucci, Chanel.
Por ejemplo, durante la visita de José Antonio Meade, la semana pasada, a Gloria Himelda se le vio con un pantalón Carolina Herrera cuyo costo es, al menos, de unos 10 mil pesos, y un bolso Gucci que seguro cuesta más que la prenda.
Entonces, los priistas la recuerdan sencillita como era cuando fue alcaldesa de Mocorito, pero que ahora ya no la reconocen.
Y no tiene nada de malo que le guste lo bueno, sino que despierta dudas que lo haga con tanta opulencia: ¿aguanta un análisis de ingresos-egresos?
Lo peor, según lo que le critican sus correligionarios, es que no la disimule y aparezca con 30 o 40 mil pesos de ropa en zonas marginadas.
Buscan refuerzo
en el Frente
La coalición por Sinaloa al Frente negocia con un nuevo refuerzo para el Distrito 3, de la demarcación federal.
Nos cuentan que el candidato de ese distrito, Adolfo Rojo Montoya, y el presidente del PRD estatal, Audómar Ahumada, quieren convencer al ex Alcalde priista de Navolato, Miguel Calderón Quevedo, para que se una a la campaña del panista en el Distrito 3.
Al finalizar su trienio, Calderón Quevedo se refugió en actividades de la sociedad civil y puso pausa a la actividad partidista.
Se sabe que no le fue muy bien con el Gobernador que le tocó, que fue Mario López Valdez. Era conocida la falta de sintonía entre ambos, sobre todo porque Malova le impuso obras en su municipio.
Calderón Quevedo fue uno de los pocos alcaldes que se enfrentó públicamente a Malova y finalmente el tiempo le dio la razón.
Pero que hoy se fuera en alianza con personajes de tan mala reputación, como que hace ruido.
Ahora, cualquiera puede invitar, habrá que esperar la respuesta del navolatense.
La verdadera
mafia del poder
El que sigue dando dando de qué hablar es el ex Presidente Carlos Salinas de Gortari.
Hasta parece que disfruta su personaje de “villano favorito” de la política mexicana.
No son pocos los políticos que siguen asistiendo a escuchar sus consejos, pedir favores o simplemente para tomarse la foto con el dinosaurio que se niega a jubilarse.
Resulta que el ex Mandatario celebró sus 70 años de vida y para que todo México se entere invitó hasta al Presidente Enrique Peña Nieto.
Lo peor de todo es que Peña Nieto asistió, pero bueno, no esperábamos que su sagaz inteligencia lo previniera del quemadón que se iba a dar por acudir a semejante festín.
Y no fue el único, la finca ubicada en un exclusivo fraccionamiento del sur de la Ciudad de México recibió a personajes de la talla del “Jefe Diego”, el ex candidato panista a la Presidencia.
También andaban por ahí personajes de la ralea de Raúl Salinas y Carlos Romero Deschamps, todos millonarios.
Por si alguien tiene una duda de aquello de la “mafia del poder” que tanto pregona “ya saben quién”, en esa fiesta se encontraba el núcleo duro.