La organización del Tianguis Turístico en Mazatlán fue un negocio redondo que tendrá enorme repercusión, no solo para Mazatlán, sino para el resto de los destinos turísticos del País.
Hay que reconocer que el evento no lo inventamos los sinaloenses, es el resultado de muchos años de esfuerzos de los guerrerenses, que lo hicieron por primera vez en 1975, en Acapulco, y que terminó convirtiéndose en un éxito que ahora aprovecha todo el País.
El Tianguis Turístico es sin duda el evento más importante en su tipo en México y uno de los principales motores que sirve para vender los sitios turísticos de México en el mundo.
Pues resulta que los mazatlecos se aventaron el mejor tianguis que se haya organizado jamás, y esto reconocido hasta por el propio Gobernador de Guerrero, Héctor Antonio Astudillo Flores.
El martes, durante la entrega de la “estafeta” que anuncia que el tianguis regresará a Acapulco el próximo año, Astudillo Flores no tuvo otra que reconocer que Mazatlán le “había dejado la vara muy alta”.
Las claves del éxito
Las razones del éxito del Tianguis Turístico son numerosas, pero comienzan con el enorme trabajo que desplegó Gobierno del Estado y el Municipio de Mazatlán, apoyados por el Gobierno Federal.
Después estuvo la decisión de sacar al evento de un Centro de Convenciones, donde generalmente se organiza, y utilizar la ciudad como escenario.
Esto trajo consigo la remodelación y mejoramiento del Centro Histórico y el malecón, provocando una derrama económica y el involucramiento de los prestadores de servicios de la ciudad, hoteleros, restauranteros.
Después se tomó otra gran decisión, la de utilizar todo el potencial cultural de Mazatlán, mostrando las fiestas tradicionales como fuente inagotable de atractivos turísticos de calidad.
Ahí, quizá, el prietito en el arroz: se contrató un espectáculo del Circo de Solei para la inauguración, asegurando un evento de gran calidad, pero que seguramente se hubiera podido sustituir por algo sinaloense, un lugar que hubiera podido ocupar una compañía de danza local como Delfos.
El otro “arrocito” fue la polémica provocada por la iluminación de la Isla de venados, algo que se hubiera evitado si se hubiera informado con anticipación.
Y el otro gran acierto fue involucrar a la población; los mazatlecos terminaron sintiendo que el tianguis era de ellos, así que respondieron en masa cuando abrieron las puertas.
Rebeldía azul
Quienes pasaron del lamento a la acción fueron los panistas de Sinaloa.
En una acción inédita, sin precedente, 240 militantes tocaron la puerta del tribunal electoral local, para impugnar el “agandalle” de las cúpulas, a favor de esposas, parejas sentimentales, amigas y hasta asistentes-choferes.
Esta es la primera ocasión en que se registra una acción masiva, una auténtica gesta en contra de la degradación moral, ética e histórica del panismo sinaloense.
En total, 18 militantes interpusieron juicios para la protección de sus derechos políticos-electorales, por considerar que quienes “parten y reparten” en el albiazul, violaron todos los procedimientos para la designación de candidaturas plurinominales.
Y aunque el fallo pudiera ser adverso, ya empezaron a dar lecciones de honor y dignidad.
A este reclamo se sumaron 220 militantes más.
Entre los promoventes de juicios se encuentran voces de gran valía, como Catalina Frank, ex diputada local, y Silvia Ramírez, activista contra los fraudes electorales en los años 80.
También Juan B. Ordorica, Diana Rice, Martín Pérez e incluso Adolfo Beltrán, líder del albiazul en Culiacán.
Este último, fue desplazado de la lista de regidores “pluris” por el asistente de Carlos Castaños, diputado local con licencia, cuya amistad con los dirigentes nacionales, le permitió garantizar “pluri” para él, para su asesor, su asistente-chofer, amistades y etc...
De ‘capa caída’
Incluso nos dicen que hasta la esposa de Alejandro Higuera Osuna, la señora Juana Ávila, habría impugnado la lista, pues se le desplazó del lugar tres a la quinta de la lista de candidaturas a diputaciones locales plurinominales.
Lo que la saca de la jugada, pues los cálculos del PAN es que entrarán a lo sumo tres, máximo cuatro, posiciones pluris.
El malestar en las bases albiazules es ya palpable en las campañas de la coalición Por México Al Frente.
Tanto, que allegados a Héctor Melesio Cuén Ojeda, líder del PAS, empiezan a reprocharle a algunos candidatos panistas federales el hecho de que nomás pongan cara y agarren micrófono en los actos “del maestro”, pero no lleven “tropa”.
Y eso que aún no comienzan las campañas locales, donde el desfonde albiazul, a lo largo y ancho de Sinaloa, será más visible.
Sólo hay que esperar la fecha para verlo: el 14 de mayo, cuando arranquen las campañas para alcaldes y diputados locales.
Al tiempo.
