|
"MALECÓN DE MAZATLÁN"

"Rescatan los fines de semana largos"

""
MALECÓN
20/05/2020

    Miguel Torruco Marqués, Secretario de Turismo, tenía rato sin aparecer en público y eso para un político es un signo de debilidad.

    Ayer apareció, por fin, para dar la cara por uno de los sectores más afectados por la pandemia provocada por el Covid-19, el sector turístico.

    Anunció que los fines de semana largos se mantendrán en México para intentar reactivar el turismo en el País, una buena noticia en el páramo desértico en el que se han convertido las buenas noticias para el turismo, a nivel global.

    Antes de la pandemia, la industria sin chimeneas era un orgullo nacional. México era uno de los países más visitados del mundo y cada una de las regiones geográficas del País podía presumir su propia joya turística.

    Hoy, con las medidas sanitarias impuestas en todo el planeta, el turismo lo único que tiene seguro es la incertidumbre, sin una vacuna el miedo seguirá afectando a uno de los sectores más productivos de México y de Sinaloa.

    Torruco Marqués pasó de amigo cercano del Presidente Andrés Manuel López Obrador y de titular de una de las secretarías más importantes del Gobierno federal a un funcionario casi anónimo.

    Primero fue la pérdida de Consejo de Promoción Turística lo que lo fue dejando sin “canicas” y después vino la pandemia para darle la “puntilla”.

    Con los destinos turísticos cerrados, “Torruco”, como lo llaman sus amigos se quedó como un rey sin palacio y volteó a ver a sus únicos posibles aliados: los gobernadores.


    Torruco en Sinaloa

    A pesar de las terribles condiciones que vive el turismo en México, el Secretario de Turismo, Miguel Torruco Marqués busca dónde apoyarse para sacar adelante el galimatías en el que lo ha metido la pandemia.

    El funcionario tiene entre los hoteleros de Mazatlán a un buen grupo de aliados y se apoya en el Gobernador Quirino Ordaz Coppel.

    De pronto y en medio de la escasez, los gobernadores y los empresarios se han convertido en el principal aliado de Torruco Marqués, ya que no hay más interesados que ellos en la reactivación del sector.

    El funcionario federal comienza a diseñar la estrategia para el regreso de los hoteles, pero lo primero que se advierte es que no hay un camino seguro, el turismo tendrá que ir regresando a la “nueva normalidad” paso a paso y cuidando cada etapa.

    Por lo pronto se habla de un regreso limitado, de impulsar primero el turismo regional y de capacitar al personal de hoteles, restaurantes y bares para mantener criterios sanitarios muy estrictos.

    Todavía hay mucho que planear y decidir en el mundo turístico, pero lo que todo mundo tiene claro es la necesidad de reactivar un sector que da de comer a millones de mexicanos.


    Desordenados

    Los cierres y clausuras de los tres expendios de Culiacán por aglomeración sigue siendo motivo de charlas, luego del levantamiento de la Ley Seca.

    Ayer, la Unidad de Inspección y Vigilancia del Ayuntamiento difundió que el problema principal era que los clientes hacen caso y que los encargados de los negocios no tienen la capacidad para poder controlar a sus clientes.

    Luis Alfonso Meza explicaba cómo las ventas comienzan, pero luego fracasan los protocolos cuando la gente empieza a arremolinarse.

    La bronca es que justamente ese fue el problema durante el Día del Niño: la gente aglomerándose en pizzerías y pastelerías.

    Ayer se formaron largas filas de automóviles de personas intentando comprar bebidas embriagantes, debido a los rumores que hablaban de una posible escasez de cerveza.

    Y no todos están de acuerdo con el fin de la Ley Seca, el Alcalde de Escuinapa, Emett Soto Grave levantó la mano para cuestionar la decisión de Gobierno del Estado de permitir la venta de bebidas alcohólicas.

    El Alcalde no ve las condiciones adecuadas para la venta de cerveza, ya que asegura que las bebidas alcohólicas son el ingrediente principal de las fiestas y el desorden.


    ¿Un logro?

    Ayer, el Consejo Estatal de Seguridad Pública salió a decir que las denuncias de violencia familiar bajaron un 28 por ciento durante el confinamiento.

    ¿Será un logro para las autoridades de seguridad el tener 113 denuncias de violencia familiar durante el mes de abril, solamente en el municipio de Culiacán?

    Si bien, se presenta un decremento de los casos con relación al mes anterior, ya que durante marzo hubo 160 denuncias, habrá que considerar el por qué no se concretan en una denuncia formal los casos de violencia familiar.

    Teresa Guerra Ochoa señaló que la Fiscalía General del Estado no está trabajando de acuerdo al contexto de pandemia que se vive, y que esto pondría en una situación difícil a las víctimas, ya que los obliga a decidir entre ir a las oficinas de la FGE y denunciar a su agresor, o correr el riesgo de contagiarse del coronavirus.


    Deseos truncados

    A muchos sectores de la población ya les anda el gusanito por volver a la normalidad. Básicamente ya se sienten en la cuenta regresiva de regreso a las calles, pero no debemos olvidar que ya la vida no será como la recordamos.

    Por mucho que deseemos regresar a la vida que teníamos antes del confinamiento, no será posible.

    Las cifras en Sinaloa no ceden y con ello también se llegarán nuevos problemas sociales.

    El Gobierno todavía no anuncia una solución sobre cómo será la reintegración a los trabajos de los ciudadanos, la utilización de las oficinas públicas, el transporte público, un sinfín de etcéteras a los que no se le ve un futuro cercano.

    Las ansias nos comen a todos, más a aquellos cuya vida afectó directamente la pandemia, empezando con sus familiares enfermos o fallecidos y terminando con aquellos que se quedaron sin empleo, con objetivos truncos y metas estacionadas sin nuevo aviso.

    Bien lo dijo el Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, que tal vez nunca volvamos a la normalidad, pero eso no indica que no haya un futuro al cual podamos acostumbrarnos.