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"MALECÓN DE MAZATLÁN"

"La ‘no’ noticia"

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MALECÓN
28/04/2020 07:39

    El caso de la supuesta pretensión de endeudamiento por parte del Gobierno del Estado terminó en una de esas ridículas situaciones que solo la política nos puede regalar, sobre todo la política mexicana.
    Todo comenzó cuando la Diputada local por Morena, Victoria Sánchez Peña, salió públicamente a denunciar la insistencia del Gobernador Quirino Ordaz Coppel para endeudarse con el pretexto de realizar compras de material médico.
    Para rematar la faena, la líder de la bancada, de Morena, Graciela Domínguez, aseguró que su partido no le dará un “cheque en blanco” al Gobernador para que endeude a Sinaloa, aprovechando la emergencia sanitaria.
    Domínguez aprovechó, incluso, para dar algunos consejos de cómo administrar los escasos recursos sin necesidad de endeudarse.
    Y cuando ya parecían todas las navajas amarradas, sale el Gobierno del Estado, en voz de su Secretario de Administración y Finanzas, Luis Alberto de la Vega, a decir que a ellos no les interesa contraer ninguna deuda.
    “Plop”, y todo mundo se quedó mirando para todos lados.

     

    Hora de ahorrar

    Y ya entrados en asuntos de pobreza en los gobiernos, resulta que el Gobierno estatal se puso a aprovechar el tiempo libre que está dejando la pandemia en muchas áreas y se encuentran inmersos en una profunda reorganización.
    Para comenzar, el famoso edificio que alguna vez fue de Homex en Culiacán y que terminó en manos de Inbursa, para después ser vendido al Gobierno estatal, ya está prácticamente terminado.
    Después de una profunda rehabilitación y equipamiento el edificio albergará a numerosas secretarías, direcciones y dependencias que actualmente pagan renta en los alrededores de Palacio de Gobierno.
    Aunque no se han hecho públicos los números se calcula que el Gobierno estatal se ahorrará millones de pesos en rentas y hará que en un lapso menor a los 6 años se recupere la inversión que se ha hecho en el edificio.
    Cualquier ahorro que se puedan hacer los gobiernos en estos tiempos es como “agua de mayo”, y si a eso le sumamos la cancelación de varios fideicomisos que repartían dinero por causas meramente políticas, habrá más ahorro.

     

    Las áreas Covid-19

    El Gobierno del Estado sigue buscando y aprovechando las alternativas para luchar contra la pandemia del Covid-19.
    Ayer, el Gobernador Quirino Ordaz Coppel anunció dos áreas nuevas para la atención de pacientes con Covid-19 en el “viejo” Hospital General de Culiacán.
    El anuncio es importante porque el Gobierno no sólo está esperando que entre en funciones el Hospital General nuevo, que estará en manos de la Sedena, sino también el Hospital Civil ya lo han habilitado para que sea un Hospital Covid, y también con estas dos áreas será como un pequeño nosocomio más con 24 camas totalmente equipadas, con ventiladores respiratorios, con equipos de oxígeno y con baños.
    Y de acuerdo al Ejecutivo estatal, lo mismo se está haciendo en Los Mochis, Guasave y Mazatlán, instalando áreas especiales para la atención de personas con Covid.
    De acuerdo a las cifras de muertos y casos nuevos, los próximos días no se ven con buenas expectativas, pero al menos hay algo de tranquilidad con estos anuncios.
    “Tranquilidad que urge porque Sinaloa ya se subió al tercer lugar nacional en la lista de decesos por Covid con 124 defunciones, sólo por debajo de la Ciudad de México con 328 y Baja California con 167”.

     

    El eterno caso del corralón

    Los incendios en el corralón de Culiacán han puesto de nuevo en la palestra la concesión y administración de la pensión, en la que muchos han perdido sus unidades ante los siniestros y robos.
    Hace dos años fueron los robos los que llevaron a realizar una investigación, ahora son los incendios, uno cada 11 días, dicen los enterados.
    Hasta el mismo cuerpo de Bomberos de Culiacán ha exigido un alto ante tanto siniestro y pide que se pongan las pilas, tanto Protección Civil, como los gobiernos estatal y municipal.
    En esta telenovela farragosa salen perdiendo quienes, por alguna circunstancia, les han sido recogidas las unidades y llevadas a ese corralón... sólo les queda despedirse estoicamente de sus automóviles, motocicletas y demás.
    Salomón Monárrez Meraz sostiene que los gobiernos municipales han sido cómplices de las irregularidades y los siniestros en las instalaciones de Grúas Culiacán.
    El activista ha criticado a la Comuna por los múltiples robos que se realizaban en la pensión Municipal.
    Dice que ninguna administración ha querido poner orden en el lugar y subrayó que no lo hacen porque son cómplices de lo que ahí sucede.
    Y agarra parejo, “desde Vizcarra y desde Cuén hay corrupción, la complicidad que hay ahí, el conflicto de interés, entre gobernantes y el que tiene la concesión de la pensión, es complicidad, ¿qué otra cosa es?, ¿miedo? No es un pistolero, no es un narco poderoso el de la concesión, es una complicidad”.
    Tienen la palabra las autoridades municipales, porque ese humo que sale de cada incendio no huele nada bien.

     

    Nada más les mueven tantito...

    Ayer, varios locatarios del Mercado Garmendia, en Culiacán, reabrieron sus locales para ofertar sus productos, esencialmente, alimentos.
    El cierre total del emblemático mercado no había sido por orden de algún gobierno.
    Los locatarios habían cerrado por falta de clientes, pero ayer anunciaron con mantas en las calles aledañas, porque las autoridades no permiten circulación en el Centro, que el espacio abriría de 6:00 a 15:00 horas.
    Pues fue en un abrir y cerrar de ojos, el Centro que había estado semivacío en los últimos días “cobró vida” y se veía a muchas personas en las calles.
    Y hay que comentar que no solo fue en Culiacán, en Mazatlán ocurrió lo mismo el fin de semana cuando cientos de personas acudieron al Mercado Miguel Hidalgo, ubicado en la Colonia Juárez.
    Ante la embestida, las autoridades utilizaron a policías para organizar a los clientes, creando una larga fila de cientos de personas esperando su oportunidad para pasar a hacer sus compras.
    Eso sí, la mayoría con sus tapabocas y guardando la sana distancia.