o instinto

    La vida transcurre normal en las ciudades, todo marcha, todos trabajan, todos realizan sus labores, incluso los criminales, situación que deja alta percepción de inseguridad en grandes segmentos de la población,

    De acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana que presentó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, seis de cada 10 mexicanos consideran inseguro vivir en su ciudad.

    En tres meses de 2023, el 61.0 por ciento de la población de 18 años de edad y más, residente en 90 ciudades de interés en México, consideró inseguro vivir en su ciudad, señala la encuesta,

    Asimismo, durante marzo de 2024, 66.5 por ciento de las mujeres y 54.5 por ciento de los hombres consideraron inseguro vivir en su ciudad.

    Inseguridad que no es gratuita, en todas las ciudades encuestadas la población ha sido testigo o víctima de algún hecho delictivo.

    Las encuestas son válidas, sin embargo, el miedo a ser presa de actos criminales o volver a sufrir una agresión es latente en los habitantes.

    En Sinaloa, de acuerdo con la encuesta del Inegi, de marzo de 2023 a marzo de 2024 la percepción de seguridad en Culiacán y Mazatlán ha mejorado, pero en Los Mochis las personas se sienten más inseguras.

    Una percepción que provoca suspicacias, dado el estigma de violencia que caracteriza a la tierra de los once ríos.

    Porque a nivel nacional el 21.5 por ciento refirió que la situación empeorará durante los próximos 12 meses; 19.2 por ciento dijo que la situación de la delincuencia e inseguridad en su ciudad seguirá igual de bien, y 23.5 por ciento manifestó que mejorará.

    No obstante este optimismo, el 47.4 por ciento de la población manifestó que modificó sus hábitos respecto a llevar cosas de valor, como joyas, dinero o tarjetas de crédito.

    Optimismo que en Sinaloa dista de ser halagüeño, pues la encuesta señaló que este primer trimestre de 2024 en Culiacán el 21.7 por ciento de personas dicen haber presenciado un conflicto o enfrentamiento, en Mazatlán es el 35.9 por ciento y en Los Mochis es el 26.1 por ciento.

    Ser víctima de un acto criminal impacta en el ánimo de quien lo sufre, sin embargo permea en quienes lo presencian, tal es el caso de comerciantes de una plaza de Culiacán que fueron testigos del asalto a una joyería y ahora cambiaron sus hábitos por temor a ser asaltados.

    Percepciones que huelen a instinto de supervivencia.

    Las encuestas son válidas, sin embargo, el miedo a ser presa de actos criminales o volver a sufrir una agresión es latente en los habitantes