Editorial
La crisis sanitaria provocada por el Covid-19 es una fábrica de incertidumbres, lo único seguro en esta pandemia es que nadie está seguro de nada, el desconocimiento sobre el virus es tan grande que todo lo que se dice de él va acompañado con interrogantes.
Otro de los grandes problemas es su asimetría, mientras algunos países, como Estados Unidos que tiene casi un millón de contagiados y más de 53 mil muertos, sus países vecinos como Canadá y México tienen una presencia del virus infinitamente menor.
Y aun dentro de los países los contagios han sido completamente desiguales, después de un mes de cuarentena en México hay regiones enteras donde el virus es un temor lejano, sin contagiados.
El problema es saber ¿qué va a pasar en el futuro próximo? si regresaremos a las calles en las fechas que nos ha marcado la autoridad sanitaria, el 30 de mayo, ¿o si seguiremos alargando el fin de la cuarentena?
Una de las ventajas que tenemos es que podemos observar lo que pasa en otros países donde la crisis sanitaria hizo estragos primero y ya se encuentran en una etapa adelantada a la nuestra.
Ayer, España permitió la salida de los niños y sus padres a las calles, con un ejército de uniformados vigilando la sana distancia y el uso de las mascarillas, pero aún y con los números de contagios a la baja nadie sabe si regresarán a la cuarentena en cualquier momento.
Italia se prepara para terminar la cuarentena el 04 de mayo, pero aún y con la esperanza de regresar a la normalidad, las autoridades advierten que cualquier brote los obligará a regresar a todos a sus casas.
Una de las interrogantes más frecuentes es si nuestros estudiantes podrán regresar a las aulas, las autoridades dicen que sí y ponen fecha para junio, algo que se antoja muy difícil.
Lo buena noticia es que México ha salido bien librado del primer encontronazo con el virus, veremos si somos capaces de mantenerlo bajo control.