Se les ha dicho por aquí en varias ocasiones y también en nuestro diario y sitio a través de diferentes voces: urgen medidas preventivas para evitar que un festejo termine en tragedia.
Se trata sobre todo del uso de la pirotecnia, que aunque a veces se percibe como un juego inofensivo, los daños que llega a ocasionar pueden ser irreversibles.
Ya se ha informado por varios medios cómo algunas personas, principalmente adultos, han tenido diversos tipos de lesiones, incluso con la amputación de una mano, por el uso irresponsable de los cohetes.
La pólvora con la que están hechos puede ocasionar más daños de lo que se llega a conocer, pues un error puede ocasionar consecuencias fatales.
También, como parte de las consecuencias de su uso, en los últimos días en Sinaloa se registraron incendios de vivienda precisamente por usarlos en las calles durante los festejos de Navidad.
Tal vez para algunos lo atractivo puede ser el riesgo que se toma al encender uno de esos artefactos y esperar a que estallen.
Pero las equivocaciones tienen un precio y ya hay quienes lo están pagando, de manera indirecta o de manera colateral.
Vienen los festejos por la llegada de Año Nuevo y hay quienes insisten en tener los cohetes de diversos calibres como una medida de celebración. Si tienen planes de usarlos o conocen de alguien que ya los haya comprado, hagan su tarea y eviten su uso.
Es mejor iniciar el nuevo año todos completos y sin ningún tipo de incidente que haga desviar el sentido de la celebración.
Ya bastante se tiene, además, con los disparos al aire que todavía hay quienes hacen en diferentes partes de la entidad, como para agregar una preocupación más, la de tener un familiar lesionado por jugar con fuego.
Es mejor prevenir, se insiste una y otra vez y vale más ser un poco racional en medio de las festividades que se tendrán en los próximos días.
Lo más importante de la fiesta es que todos la disfruten y no que haya quienes sin conciencia de por medio arrastre a la preocupación a los otros. Por esta vez y las que siguen, digan no a la pirotecnia.