El dedo
en la llaga

06/09/2024 04:00
    Amnistía Internacional no sólo señala o fustiga, sino tiende la mano y ofrece diálogo y contribución a la integración de una ruta de trabajo para lograr abatir los rezagos señalados. Ojalá el nuevo gobierno acepte el ofrecimiento.

    Amnistía Internacional puso el dedo en la llaga en una carta abierta dirigida a la Presidenta electa Claudia Sheinbaum.

    La organización global que lucha contra la violación de los derechos humanos en el mundo hizo ayer saber el contenido del documento en el que piden un diálogo con el nuevo gobierno de México por considerar que nuestro País atraviesa una profunda crisis de derechos, y precisa en qué puntos: Violencia de género, desaparición de personas y ausencia de seguridad de las mujeres buscadoras, así como de defensores de la tierra, territorio y medio ambiente.

    Pero también urgen a resolver el intento de ampliación de la prisión preventiva oficiosa, así como la desaparición del INAI, la creciente militarización y la elección de jueces y magistrados federales por elección popular.

    En este último punto incluye que preocupa la incorporación de la figura de ‘jueces sin rostro’, que posibilita que se lleven a cabo juicios de delincuencia organizada sin que se conozca la identidad de la persona juzgadora.

    “México es uno de los países prioritarios para nuestro movimiento dada la profunda crisis de derechos humanos por la que atraviesa”, advierte Amnistía Internacional.

    Y sentencia: “Durante las últimas cinco décadas, Amnistía Internacional ha investigado y acompañado a víctimas de algunas de las más graves violaciones de derechos humanos que han cometido diversas autoridades, entre ellas tortura, detenciones arbitrarias, desapariciones forzadas, violencia contra las mujeres, ataques a periodistas y personas defensoras de derechos humanos, entre muchas otras”.

    Amnistía Internacional no sólo señala o fustiga, sino tiende la mano y ofrece diálogo y contribución a la integración de una ruta de trabajo para lograr abatir los rezagos señalados.

    Ojalá el nuevo gobierno acepte el ofrecimiento.