Hay hechos graves en otras ciudades, como en Mazatlán, donde ha habido ejecutados y secuestrados, estos segundos de manera significativa, y la ciudad ha visto disminuir la afluencia turística y la vida nocturna, pero tales hechos no han paralizado al puerto ni sumido en el terror. Arturo Santamaría Gómez
OBSERVATORIO Sinaloa no resiste 60 días más de guerra La paz más allá de la que da la sepultura Alejandro Sicairos
Ernesto Núñez Albarrán Elección judicial, los comicios más caros de la historia Ernesto Núñez Albarrán