"Genera controversia en crimen de jóvenes"
MÉXICO (Sinembargo.MX)._ La Suprema Corte de Justicia de la Nación decidió, el pasado miércoles, liberar a Israel Arzate Meléndez, detenido en 2010, acusado del asesinato de 15 jóvenes en un fraccionamiento en Villas de Salvárcar, en Ciudad Juárez, Chihuahua.
"No me la creo, estoy contento", fue lo primero que dijo Arzate al conocer la decisión.
Junto con él, organizaciones nacionales e internacionales celebraron que el máximo tribunal de México hiciera valer los derechos humanos de un individuo que fue torturado para sacarle una declaración que lo inculpaba.
Israel fue presentado el 6 de febrero de 2010 ante los medios de comunicación como uno de los supuestos asesinos que participó en la matanza de la noche del 30 de enero de ese año.
Se dedicaba al comercio ambulante y fue el 3 de febrero de 2010 cuando fue interceptado por dos personas que le preguntaron si él era Carlos Madrigal. Al contestar que no, fue "levantado" por dos militares que descendieron de una camioneta.
El joven declaró que a partir de ese momento, fue torturado por más de 30 horas, golpeado y amenazado de que si no firmaba una declaración donde se decía culpable de asesinato, lo desaparecerían y además, los militares violarían a su madre, Guadalupe Maléndez, y a su entonces pareja sentimental.
Permaneció un año en prisión preventiva y las autoridades, al no contar con más pruebas para inculparlo y para resolver el caso, solicitaron una orden de arraigo domiciliario.
El 31 de agosto de 2011, la Comisión Nacional de Derechos Humanos emitió la recomendación 49/2011 a la
Secretaría de Defensa Nacional donde acreditó la tortura que padeció Israel a manos de militares cuando estuvo retenido.
Cuestionan fallo
Los familiares de las víctimas repudiaron el fallo de la SCJN y el miércoles mismo se reunieron en el memorial de víctimas que se hizo en honor de los 15 jóvenes.
"No dudo que haya sido torturado, pero ese no es mi problema: si por unos golpes hace tanto relajo, ¿qué cree que deba hacer yo? ¿A quién le dolió más? Le cambio mi lugar, que sea yo la de la tortura y él el de los muertos, a ver a quién le pesa", señaló Blanca Estela Camargo, madre de Horacio Alberto Soto y tía de José Luis Aguilar, ambos perdieron la vida en la masacre.
Luz María Dávila, la madre de familia que le dijo a Felipe Calderón que no era bienvenido en la visita que hiciera luego de la tragedia, también expresó su inconformidad y denunció que no se acercó gente de Derechos Humanos a atenderlos y sólo se enfocaron en el caso de Israel.
Por su parte, Simón Hernández León, abogado del Israel Arzate, pidió al Gobierno mexicano dar con los responsables de la matanza.
"Es muy grave que para el Estado, lejos de reconocer que falló y que le está mintiendo a la sociedad de Ciudad Juárez para investigar y esclarecer estos hechos, que enérgicamente nosotros también condenamos, y que también estamos exigiendo que se esclarezca quién participó, porque la sociedad lo merece saber", dijo en entrevista con Carmen Aristegui en su noticiero en MVS.