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"Denuncia Human Rights Watch"

"Deja lucha contra el narco torturas y ejecuciones"

"El Presidente Calderón acusa al crimen organizado de ser la principal amenaza contra los derechos humanos"
09/11/2015 13:37

    AP/NTX

    MÉXICO (AP/NTX)._ Israel Arzate Meléndez caminaba por las calles de Ciudad Juárez, cuando soldados y hombres de civil lo obligaron a subirse a un auto... horas después era sometido a choques eléctricos para que aceptara haber participado en una masacre.
    Arzate afirmó en su relato que fue llevado a una base militar, donde fue torturado. Le exigían información y con cada respuesta negativa llegaba una nueva serie de choques eléctricos, golpes y asfixia. Fue capturado el 3 de febrero de 2010.
    Sus captores le dijeron que si no hablaba el cuerpo de su esposa sería arrojado a un terreno baldío. No resistió más y aceptó confesar lo que querían: su participación días antes en el asesinato de 15 personas en una fiesta juvenil en la colonia Villa de Salvárcar de Juárez, una de las peores masacres registradas hasta entonces.
    La historia de Arzate, quien se encuentra en espera de que le resuelvan un amparo tras denunciar haber sido víctima de tortura, forma parte de reporte de la organización Human Rights Watch, basado en dos años de investigaciones en cinco estados de México.
    El informe indicó que encontró evidencias de más de 170 casos de tortura, 39 desapariciones y 24 casos de ejecuciones extrajudiciales en el marco de la estrategia del Gobierno del Presidente Felipe Calderón contra el narcotráfico.
    El informe se concentra en casos de abusos ocurridos en cinco de los 32 estados del País: Baja California, Chihuahua, Guerrero, Nuevo León y Tabasco, que han sido algunos de los más afectados por la violencia atribuida al narcotráfico y en los que se ha dado un importante despliegue de fuerzas de seguridad.
    "En los cinco estados examinados, miembros de las fuerzas de seguridad sistemáticamente utilizan la tortura para obtener confesiones forzadas e información sobre grupos criminales. Y la evidencia apunta al involucramiento de soldados y policías en asesinatos extrajudiciales y desapariciones forzadas alrededor del país", señaló la organización.
    El grupo señaló que la mayoría de las víctimas de los casos que documentó son hombres jóvenes de origen humilde o clases trabajadoras, e incluyen desde mecánicos y taxistas hasta empleados de la construcción. Algunos, además, son policías, mujeres y niños.
    "El enfoque actual ciertamente no está funcionando", dijo Kenneth Roth, director ejecutivo de HRW. "Si bien no podemos hablar de causalidad, hay al menos una correlación entre el despliegue de un Ejército propenso a los abusos y la explosión de la violencia de los carteles".
    El crimen, enemigo principal
    El presidente Felipe Calderón ratificó a HRW que la principal amenaza a los derechos humanos son los criminales, quienes con delitos agravantes como el homicidio, el secuestro y la extorsión violan de manera sistemática las garantías ciudadanas.
    El mandatario dejó en claro que de ahí parte la obligación ética y legal del gobierno de desplegar todos los medios a su alcance para que, bajo el principio de corresponsabilidad, se fortalezca la presencia de la autoridad en aquellas comunidades con mayor rivalidad delincuencial.
    El Ejecutivo recibió en Los Pinos a directivos de la organización Human Rights Watch, que hizo entrega de un informe relacionado con el tema, al cual el mandatario instruyó la conformación de un grupo de trabajo para analizar el contenido del documento.
    Calderón Hinojosa ratificó su compromiso de que el respeto irrestricto a los derechos fundamentales es un elemento esencial para la consolidación de la democracia y la construcción de la seguridad auténtica y duradera.
    México ha dado pasos decisivos para la promoción y protección efectiva de los derechos humanos, siempre en un marco de transparencia y apertura al escrutinio público, recordó.
    Sin embargo, HRW señaló que miembros de prácticamente todas las fuerzas de seguridad que participan en el combate al narcotráfico han utilizado en algún momento métodos de tortura como golpes, asfixia con bolsas de plástico, ahogamiento simulado y choques eléctricos.
    "Si no se fortalecen los mecanismos de control, las violaciones van a continuar... y la impunidad también", dijo José Miguel Vivanco, director para las Américas de HRW, quien calificó la reunión con Calderón de "sorprendentemente constructiva", tras su disposición de trabajar para revisar los casos.

    CONTRASTE
    Aunque el Gobierno federal divulga el éxito que ha tenido la lucha emprendida contra el narcotráfico, existen casos documentados de abusos cometidos por las fuerzas de seguridad.
    TORTURAS
    n Golpes
    n Asfixia con bolsas de plástico
    n Ahogamiento simulado
    n Choques eléctricos
    VÍCTIMAS
    n Hombres jóvenes de origen humilde o clases trabajadoras
    n Son mecánicos, taxistas y hasta empleados de la construcción
    n Algunos, además, son policías, mujeres y niños